Enemigas pat2

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Después de haber encontrado la tarjeta de Roni, la chica salio rapidamente del lugar donde se encontraba y se abrió paso a su habitación en donde tomo el teléfono y marco a casa de su amiga Hanna.

—¿Hola?—
—Hanna, soy Rachel.—
—A, hola amiga ¿qué hay? No me digas que ya ¿comenzaste a extrañarme?—
—No te llamo por eso, quiero saber si estás libre, tengo que ir hacer algo y necesito que me acompañes.—
—Pues estaba disfrutando de un buen postre pero creo que eso puede esperar. Entonces ¿te recojo?—
—Si, acá te espero, no tardes.—

Cuelga el teléfono y comienza a cambiarse de ropa al igual que le da espera a su amiga.
Pasado unos minutos sonó el pito de aquel auto avisándole a Rachel que ya estaban esperándola abajo. La chica toma su bolso y con el la tarjeta del lugar, ella estaba decidida a conocer el lugar donde trabajaba la "novia" de su padre.

Roni's

—Aquí, creo que aquí es, dice Roni's.—
—Si, supongo que es aquí.—
—Oye hay algo que aún no entiendo, ¿para qué vienes a un bar y a esta hora?—
—Quiero hablar con la dueña y esta es la hora perfecta. ¿Entramos?—
Ambas bajaron del auto echando seguro al momento de abandonar el interior de aquel vehículo.
Una vez dentro del establecimiento, ambas controlaban el lugar como quien descubre un tesoro, en esos momentos una chica pelirroja saluda detrás de la barra.

—Buenas ¿las puedo ayudar en algo?—
—Uhm... Si, estamos aquí por que venimos a...—
Fue interrumpida por la mujer mayor.
—¿No están un poco jóvenes para estar en este lugar? Además el bar abre a las ocho.—
—No, no estamos aquí por bebidas, usted misma lo ha dicho somos demasiado jovenes para beber.—
—Entonces, si no viene por el alcohol, ¿por qué vienen?—
—Quiero hablar con la dueña del establecimiento. Con Roni.—
—Creo que perdieron su tiempo al venir acá por que mi hermana no esta.—

Solo basto que la pelirroja dijera eso para que por las escaleras se viera a una mujer de estatura promedio y morena bajando las escalera.
Ambas chicas se quedaron mirando a la pelirroja con cara de nos mentiste y ella si esta aquí.
—Hola Roni.—
—Rachel ¿qué haces aquí?.—
—Quiero hablar contigo ¿podemos? A solas.—
—Si, si claro. Ahm... Kelly estare afuera por si me necesitas, ¿de acuerdo?.—
—Hanna, no tardo, esto me tomaras unos minutos.—
Ambas mujeres que se quedaban dentro del establecimiento, asintieron al unisono quedando calladas sin ganas de romper el hielo.

—Y bien, Rachel, ya estamos aquí ¿para qué soy buena?—
—¿Sabias qué? papá y yo siempre hemos sido los dos solos.—
—Ahm... No entiendo a que viene eso.—
—Lo que quiero decir es que papá nunca ha conocido ninguna mujer después de que mamá murió y ahora apareces tú, y de la nada.—
—Bueno, creo que nada se hace de la nada, todo llega con un objetivo.—
—Si, tú tienes razón. Y tú objetivo fue llegar y dañar la relación que había entre mi padre y yo.—
—A ver, hay algo que no entiendo, ¿qué quieres decir con todo esto?—
—Qué papá y yo hemos estado distanciados por tu culpa, las peleas que hemos tenido han sido por tu culpa, por que él te defiende.—
—Mira, Rachel, los problemas que tengas con tu papá a mi no me incumben creo que ya me disculpe con tu padre por la forma en como me viste el otro día.—
—No te haces una idea ¿verdad? Alejate de mi padre, por que aquí donde me ves puedo ser el más dulce angelito pero también puedo ser la peor bruja que jamás hayas visto.—
—¿Qué? Oye, oye espera.—

No la dejo ni que terminara de hablar para irse y dejarla sola. Una vez dentro del establecimiento pide a su amiga que se fueran de aquel lugar.
—¿Qué te pasa, Rachel?—
—Estoy bien, Hanna, solo vámonos de aquí.—
—¿Esa mujer te dijo algo que te molestara? Por que si es así déjame que yo me baje del auto y le de su merecido.—
—No te preocupes estoy bien, ella no fue quien dijo algo, y ya ¿podemos dejar de hablar eso?—
—Claro, como digas, no olvides que cuando quieras hablar me lo puedes comentar.—

Al salir Rachel del lugar, su padre entra en busca de Roni.
—Hola.—
—Ash, lo que faltaba, que el brujo viniera a fastidiar.—
—Tranquila, controla tus hormonas, no vine a verte a ti si no a Roni.—
—No creo que te atienda, esta arriba tomando su siesta.—
—Bueno, si no fuera urgente no estaría aquí, por favor llamala y dile que de aquí no me iré hasta que no decida verme.—
La pelirroja rueda los ojos con cada palabra que decía el contrario, de verdad que su presencia la fastidiaba pero no seria por mucho ya que él y su hermana estaba llevando una relación a escondidas.

Pasaron unos minutos y la morena apareció en la planta baja del bar.
—¿Qué acaso hoy es el día de interrumpir la siesta de Roni?—
—Hola, necesito hablar contigo.—
—Creo que las cosas ya quedaron claras.—
Ambos callaron para ver a la mujer pelirroja que aún seguía allí escuchando cada palabra de la conversación.
—¿Qué?—
—¿Te quedaras allí a escuchar nuestra conversación, hermana?—
—Bien, ya me voy.—

Con un gesto de desagrado tiro en la barra el traoito con el cual estaba limpiando las copas y se ingreso en la parte trasera del bar.
—Quiero hablarte de algo importante.—
—¿Si? Pues que coincidencia, yo también, vamos afuera.—
Primero salio la mujer morena y detrás de ella el hombre con el cual hablaba.
—Bien, ¿dime tú que quieres decirme?—
—No, tú viniste a mi bar para decirme algo así que habla.—
—Pero quiero darte la palabra a ti.—
—Esta bien, mira Facilier te diré esto lo más claro posible. Quiero que te alejes de mi.—
—¿De qué estás hablando?—
—Alejarse, retirarse, mantener distancia, ¿si te suenas esas palabras?—
—Se lo que significa, Roni, mi pregunta es ¿por qué.—
—No quiero problemas con nadie.—
—¿A qué te refieres con nadie?—
—Solo ten presente que ya no quiero que te me acerques ¿si?—
—Roni, te conozco ¿qué pasa?—

Roni al ver que Facilier estaba tan insistente en que le contara que había pasado, tomo un respiro y se cruzo de brazos para entonces proseguir con su relato.
—Es Rachel, tu hija.—
—¿Qué tiene que ver ella en todo esto?—
—Ella vino a verme hoy, me dijo algunas cosas.—
—¿Qué clase de cosas? Roni, ¿que clase de cosas?—
—Para que, no vale la pena repetirlo.—
—Pues no me iré de aquí hasta que no me digas que te dijo Rachel.—
—Solo me dijo que me alejara de ti por que podría resultar ser peligroso. Eso fue todo, ahora no quiero que le digas nada a ella, ella tiene razón es mejor que tú y yo estemos distanciados.—
—Rachel me va a escuchar.—
—Hey, te acabo de decir que lo dejes así, ¿si?—
—Debo irme.—
—Aguarda, ¿no tenias algo que contarme?—
—Si, te lo diré mañana, adiós.—

Si Rachel quería colmar la paciencia de su padre, pues esta vez si que lo logro.
Facilier llego rapidamente a la casa y al ver que su hija no estaba decidió esperarla hasta que esta se dignara en aparecer.

Comentarios.
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No dejen de leerla, les traeré muchas sorpresas, esta historia promete cosas nuevas y diferentes. Bai babys 💋

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