VodooQueen

Familia

Era el día y el momento perfecto para que la familia Holdings Mills se reunieran a tener un momento en familia, bueno al menos eso fue lo que pidió la adolescente Rachel.

Apartamento de Facilier, miércoles 8:30pm

—Bien, ¿y cómo me veo?.—
—Te ves muy guapo, papá. De seguro vas a conquistar a mamá.—
—¿Tú crees?.—
—No creo, estoy segura que mamá no podrá resistirse a tus encantos de chocolate jajajajaja.—
—No, ¿tú también?.—
—Solo me hace gracia ver como maQueen te llama.—
—¿MaQueen? ¿qué es eso?.—
—Así decidí llamarla para diferenciarla de mamá Regina.—
—Entiendo.—
En esos momentos el timbre sonó un par de veces indicando que alguien había llegado.
—¿Quién?.—
—Soy yo, Regina.— Rachel abre la puerta y se encuentra con una Regina totalmente diferente a la que acostumbraba a ver.
Llevaba medias veladas de mallas negras, un vestido color vino tinto el cual en la parte del pecho tenia un encaje de color negro que a su vez dejaba al descubierto parte de sus senos, zapatos tacón delgado negros y una cartera de manos.
Wow, dijo Rachel al mirarla con determinación, parecía que a su hija le había encantada esta nueva forma de vestir de su madre.

Pero no era la única que se había quedado boquiabierta, Facilier también lo había hecho, ni si quiera las palabras le salían para decir estás hermosa o preciosa, solo se quedo allí parado con los ojos como linces.
—Ammm, papá, con la boca cerrada también ves bien.—
—Hola, ¿cómo están?.— Respondió regina con un poco de vergüenza al ver como Facilier la miraba sin tener ganas de quitar la vista de ella.
—Estamos bien, ¿y tú, mamá? Te ver hermosa, me gusta como te ves.—
—Gracias cariño. Parece que a tu padre los ratones se le han comido la boca.—
—Debe ser ante tanta belleza perdió el habla, ¿no es así, papá?.— Le dio un leve codazo para ver si el mayor respondía de algún modo.
Facilier reaccionó sobandose la parte del abdomen donde Rachel le había generado aquel golpe.
—¡Au! Eso dolió.—
—Bueno, como parecías estatua y no reaccionabas.—
—Si, es que...—
—Es que mamá te dejo sin palabras ya nos dimos cuenta.—
—Estás preciosa, Regina.—
—Gracias, Facilier. ¿Puedo pasar?.—
—Si, si claro, pasa.—
—Gracias.—
Regina se adentro al sitio observando todo lo que había a su alrededor pues Facilier decidió que esa noche las cosas serian distintas. Había acomodado la sala y la había adornado con bombillas pequeñas de luz tornasol, había puesto una alfombra blanca de plumas y al rededor unos cojines de diferentes colores.

—¿Qué es todo esto?.—
—¿Te gusta? Papá y yo decidimos hacer algo diferente por esta vez.—
—Me encanta, está hermoso.—
—Ves papá, te dije que algo sencillo seria mejor.—
—Me agrada que te guste, Regina. Lo hicimos pensando en tí.—
—Esta perfecto.—
—Y Henry, ¿no venia contigo?.—
—No, dijo que llegaría acá.—
Toc, toc.
—De seguro es él.—
Esta vez quien decidió abrir la puerta fue Facilier y afectivamente era Henry quien al parece siguió los pasos de su mamá esa noche, bueno todos decidieron ponerse bellos para la ocasión.
—Henry, bienvenido. Pasa.—
—Gracias, con permiso.—
—Henry, cariño.—
—Mamá, estás bellísima. A ver, una vuelta.— Henry tomo de la mano a su madre y guiro su cuerpo para detallar lo bien que se veía esa noche.
—No entiendo por que siguen diciendo eso, estoy normal.—
—Claro que no, estás más hermosa de lo normal.—
—Gracias, cariño.—
—Y bien, ¿esperamos a alguien más o ya estamos todos?.—
—Solo te esperábamos a tí, hermano.—
—Entonces, ya podemos comenzar ¿no?.—
La familia por primera vez reunida en un solo sentimiento, el de pasarla bien y compartir sus gustos y disgustos.

—Antes que nada quiero que nos tomemos una foto, ¿les parece?.—
No hay problema respondieron todos mientras Rachel tomaba su celular y lo acomodaba en el palito del selfie.
—Digan familia.—
Familia. Y listo todos quedaron capturados en la foto, era una foto perfecta, más que se una foto era un futuro, una nueva vida, un nuevo camino, un destino para caminar juntos.
La noche transcurrió y con ella llego el postre al igual que los juegos, chistes y confesiones.
—Tengo una idea.— Agregó la adolescente.
—Jugaremos hacer mímicas. Yo haré equipo con mamá y Henry con papá.—
—¿Y en que consiste el juego?.— Pregunto anciosa Regina.
—¿En serio no lo sabes?.—
—No, nunca he jugado eso.—
—¿Nunca?.— Pregunto Facilier asombrado.
—No, ¿qué tiene de malo?.—
—Jajaja pero si es un juego muy reconocido.—
—Tú no te burles de mamá, que tampoco sabes de que se trata.— La risa de Facilier se borro de su rostro al ser descubierto por su hija.
—Claro que sé de que se trata.—
—¿Ah si? Pues ven, parate aquí al frente y dinos en que consiste.—
—No, tú explicas mejor.—
—Pero quiero sederte el turno.—
—De verdad, tú eres mejor para explicar.—
—Ve Facilier, Rachel quiere que expliques tú, ya que es tan conocido el juego.— Dijo Regina incitandolo a pasar.
—Lo que pasa es que....—
—Lo que pasa es ¿qué? Lo que pasa es que no sabes nada y aún así te burlas de mí. Prosigue, Rachel.—
—Bien, ya que papá quería hacerse el héroe y no le salio, entonces explicare yo. La dinámica consiste en que un tú y Henry que van hacer equipo me dirán el nombre de algún objeto, película o de lo que sea que quieran y yo debo interpretarlo con mímicas para que mamá descubra de que se trata. Si mamá logra adivinar sera punto para nosotras pero si no lo logra entonces no habrá puntos. Recuerden que abra un minuto para hacer la mímica y que el compañero lo descubra.—
—¿Un minuto? Eso es poco tiempo.—
—Esa es la gracia, que sean aguiles para adivinar.—
—De acuerdo, estoy lista.— Todos se habían Quitad los zapatos y ahora estaban sentados en la alfombra al rededor de unos deliciosos postres.

—¿Quieren comenzar ustedes o prefieren que mamá y yo lo hagamos?.—
—Si claro, las damas primero.—
—Entonces iré yo de primera. Diganme que es lo que voy a interpretar.— Facilier y Henry se llevaron a Rachel aparte y le susurraron al oído la palabra hechizo.
—¿Tan fácil?.—
—A ver, demuestra que eres buena en eso.— El tiempo comenzó a correr y Rachel hacer las mímicas pero Regina no lograba saber que cosa era.
Rachel quería gritar la palabra pero no podía y es que la verdad estaba muy fácil de hecho Regina la conocía muy bien pero las mímicas de Rachel no le eran familiares.
—¡Tiempo!.— Grito Facilier con una gran sonrisa en sus labios pues había logrado que las mujeres no sumaran.
—¿Qué era?.—
—Hechizo, mamá. Hechizo.—
—¿Eso era? Pero si yo los he hecho.—
—Si, pero no lograste adivinar.—
—Lo siento chicas pero esta vez no.— Dijo Henry en signo de burla.
—Ahora, voy yo.— Respondió Facilier mientras iba a lo lejos con las mujeres y ellas le susurraban esternocleidomastoideo.
¿Qué? Pregunto de nuevo Facilier. esternocleidomastoideo le murmuraron de nuevo a lo que Facilier sonrió amplio pues sabia lo que era y estaba seguro de que no fallaría, pero por otro lado las mujeres estaban seguras que eso jamás Henry lo interpretaría.

El mayor comenzó hacer las mímicas señalando junto el lugar donde quería que Henry descubriera y para sorpresa de muchos Henry descubrió lo que él trataba de decirle.
—esternocleidomastoideo.— Dijo Henry ya cuando estaba apunto de acabarse el tiempo.
—¿Qué? ¡no puede ser!.— Dijo regina dando un zapatazo en el suelo pues pensó que eso seria difícil para él pero ella olvido que Henry era un joven bastante listo.
—¿Si es eso?.—
—Si, si lo es. Punto para ustedes.—
—¡Yuju! ¡si!. Ven Facilier, dame esos cinco.—
—Claro que si.— Equipo alfa gritaron al mismo tiempo que chocaron las cinco.
¿Equipo qué? Vaya que estos dos ya se habían convertido en buenos amigos ya hasta un nombre tenían para su equipo cosa que a Regina y Rachel les sorprendió bastante.
Pasaban los segundos, minutos y ya el juego llegaba a su fin.

Comentarios.

Me gusto mucho escribir sobre esto ya que desde hace rato quería juntarlos a los cuatro en un solo lugar. Bai babys. 💋