Falling In Love |H.S|

Treinta y nueve

1 mes después.

El tiempo pasa muy rápido cuando realmente estás ocupada, sin embargo en tanto tiempo habían pasado tantas cosas. Para empezar no volví a saber nada de Harry desde aquella vez que me despedí de él en Los Ángeles, según Louis sigue con su vida normal y siempre que habla con él, Harry pregunta por mí. Por supuesto yo no me quedo atrás porque en cada oportunidad aprovecho para preguntarle a Louis sobre él. Con respecto a Louis, consiguió un empleo fabuloso en una empresa de arquitectura en Londres, ahora gana bastante bien y dice que adora trabajar, también comenzó una relación oficial con Gemma hace un mes exactamente y ambos están muy felices. Con Niall las cosas se terminaron cuando llegué del viaje, no podía seguirme mintiendo a mí misma ni seguir dándole falsas esperanzas a Niall, ahora volvimos a ser sólo amigos y de vez en cuando salimos con Louis a divertirnos, por cierto también está trabajando en una empresa muy prestigiosa de hoteles y turismo, por supuesto se da la gran vida visitando lugares hermosos. Las cosas con mi hermano han mejorado considerablemente, ahora que me he decidido a estudiar leyes, Zayn fue el primero en ofrecerse a ayudarme ya que él estudió lo mismo, de hecho gana muy bien como abogado, sin duda alguna quiero seguir sus pasos.

He pasado tan ocupada estos días, a tan sólo un mes de mi graduación, todo es un caos con los trabajos finales y los exámenes, gracias al cielo tuvimos un merecido descanso cuando hicimos el viaje grupal de despedida, fue realmente divertido y hermoso, Liam me contó que va a estudiar ingeniería en sistemas y que no puede esperar para salir ya de la preparatoria, al parecer se consiguió una novia y vive cerca de la universidad a la que él irá, así que puedo entender por qué quiere salir ya. Yo quiero salir también pero a la misma vez no, sé que extrañaré todo esto y la universidad es aún más pesada.

Justo ahora me dirijo a casa de Louis ya que este me invitó y me dijo que tenía que decirme algo importante, luego de pasar a Starbucks por un café, muchos recuerdos se me vinieron a la cabeza, todos sobre Harry. Salí del lugar maldiciendo en mis adentros y llegué a casa de Louis, así que ahora me encontraba en su habitación esperando que hablara de lo que sea que tuviera que decirme.

-¿Y bien? ¿Qué era tan importante como para obligarme a venir aquí? -inquiero cruzándome de brazos.

Louis enarca una ceja -Yo no te obligué, además tú querías venir -me mira triunfante.

-Pues sí, estaba muy aburrida -admito sacándole la lengua y él ríe.

Me gusta pasar tiempo con Louis, siempre buscamos una forma nueva de perder el tiempo y divertirnos, por eso cuando no estoy con él me aburro demasiado.

-Y por esa misma razón te llamé -sisea y salgo de mis pensamientos -Nos vamos de fiesta hoy.

Lo miro con las cejas elevadas.

-¿Era eso lo importante que tenías que decirme? -espeto incrédula.

-Sí -se encoge de hombros y yo ruedo los ojos.

-Me hubieses dicho mejor por teléfono que iríamos a una fiesta y así hubiera venido con ropa adecuada -reprocho negando con la cabeza.

-Eso le habría quitado toda la diversión -niega con la cabeza -Además te ves bien, esa ropa no está mal -se lleva una mano a la barbilla mientras me mira.

-¡Claro que está mal! Sólo mira -señalo mi cuerpo.

Andaba en unos vaqueros negros y una camisa rosa sensilla, una cazadora y unas vans negras, no era para nada el atuendo con el que se va a una fiesta.

-Estás genial -le resta importancia -Es más si quieres me pondré mis vans para hacer juego contigo y así ser de esos amigos goals que salen en fotos.