Revenge & Cribs [P&C #3]

Capitulo 37

— ¡Dáñala y mato a Audrey!—Amenazó el chico de cabello largo, que estaba dispuesto a ahorcar a mi sobrina.

—Hazlo, ella no me importa, ya no la necesito ahora que soy libre. —La hijastra de Gothel se encogió de hombros.

— ¿Qué te dije, princesita? Vas a terminar muerta y a nadie le interesa. —El hijo de Jafar le sonrió con malicia a su víctima.

— ¡Jay, no!—Gritó Evie rápidamente.

— ¡No eres como ellos, eres mejor!—Intervino Lonnie, tratando de hacerlo entrar en razón.

— ¡Mal!—Me llamó la hija de Úrsula, volteé a verla, mientras pensaba en qué debía hacer. —No la escuches, no te rindas. —Suplicó.

—M, recuerda que nunca debes hacer tratos con villanos, nunca cumplen con su palabra. —Reflexionó el novio de Jane. —Debes terminar con esto de una vez por todas.

— ¡Cariño, no te rindas! ¡Siempre hay otra solución! Si te rindes, Alex no será feliz, nadie lo será. —Comentó el rey de Auradon.

— ¡Cállense todos! No me dejan pensar. —Grité ya harta de ellos, no soportaba tanta presión.

—Tic, tac, tic, tac...—Musitó esa Perdida, apreté los puños. —El tiempo se acabó, Harry mátala.

— ¡Por fin me dejan divertirme!—El chico del garfio sonrió con malicia.

— ¡Su collar! ¡Quítaselo, rómpelo y no pienses en mí!—Gritó Uma, la miré y observé el collar vudú que tenía mi enemiga, era el mismo que había visto en mis sueños, pero ¿cómo tomar la decisión correcta? ¿Debía dejarla morir para salvar a Auradon? ¿Esto era justo? No, claro que no, pero ¿estaba dispuesta a dejar que mi archienemiga fuera asesinada por el bien de todos? — ¡Es la única manera de terminar con esto! ¡Eres la reina, eres madre, tienes que pensar en tu pueblo y en tu familia, tienes mucho que perder, yo no tengo nada, así que déjame sacrificarme para compensar todos mis errores!

 Su mirada estaba llena de arrepentimiento y dolor al mismo tiempo, pero era más valiente que yo al atreverse a hacer algo así.

— ¡Ella tiene razón! —Alzó la voz Annie.

— ¡Jay, suelta a mi chica!—Gritó su prima, esforzándose por soltarse del agarre del hijo de Anastasia, pero él era mucho más fuerte.

— ¡No es momento para eso!—La regañó Anthony antes de mirarme. — ¡Mal, escucha a tu corazón y haz lo correcto!

  Él tenía razón pero ¿qué era lo correcto?

— ¡Recuerda quién es el verdadero enemigo!—Gritó Jane.

 Fue entonces cuando lo comprendí.

  Uma no era mi verdadera enemiga, era una aliada muy fuerte que estaba dispuesta a caer en representación del bien.

 Ariana era mi verdadera enemiga y esta era mi oportunidad de destruirla de una vez por todas.

  Estaba segura de lo que haría así que suspiré hondo y miré a la chica con la que estaba dispuesta a acabar.

—Aún no es tarde para que te unas a mí, Mal, el mundo será nuestro. —Susurró ella, en ese momento su collar empezó a brillar y mis ojos también.

No entendía que demonios estaba pasando.

— ¿¡Qué le está haciendo!?—Escuché la voz de mi mejor amiga.

—La está hipnotizando. —Respondió Jane justo antes de que un fuerte dolor de cabeza me hiciera cerrar los ojos, al abrirlos, observé a mí alrededor solo para darme cuenta de que todos habían desaparecido y ahora me encontraba en un lugar extraño pero lo reconocí; era el lugar de mis sueños.