Nos encontrábamos en la habitación de Dizzy, sus primos y yo estábamos sentados en su cama, mientras ella acababa de contarles lo que Ariana me había hecho.
Resulta que era su breve horario de descanso, así que lo habían aprovechado para mantenerse al tanto acerca de lo que había sucedido.
—Esa perra nos hizo la vida imposible desde siempre, se cree mucho por tener "influencia en el más allá", esas cartas que "leen el futuro" y esos estúpidos muñecos vudú que no asustan a nadie. —Musitó Annie, haciendo comillas con sus dedos.
—Es una Perdida, ella no debería tener magia pero por alguna razón la tiene, pero no voy a permitir que vuelva a meterse con mi familia...—Habló su hermano mayor con seriedad, era muy sobreprotector. Entonces me observó. — Ni con la tuya, Mal, ya has sufrido demasiado.
—La hemos soportado por años y ya estoy harta, ha ido demasiado lejos esta vez, es tiempo de que la detengamos. —Dijo la hija de Anastasia, sonreí al escuchar aquello.
—Estoy de acuerdo en que esa Perdida merece que le den su merecido, pero esta no es nuestra lucha, es de Mal. —Comentó Anthony, observándola, tomó sus manos. —No quiero arriesgarnos, sabemos perfectamente de lo que ella es capaz, Ariana jamás amenaza en vano, ella siempre cumple sus promesas, si algo sale mal...
—N-no lo digas, eso no puede pasar...—Lo interrumpí, negando con la cabeza, sabía que lastimaría a mi princesita si algo salía mal pero debía recuperarla. —Nosotras nos encargaremos de buscar a Alex...
—Ustedes solo tendrán que vigilarla, si ven algo sospechoso solo deben avisarnos, sé que ambos son muy inteligentes y no dejarán que los descubran, entonces no correrán ningún peligro. —Prosiguió Dizzy.
—Las ayudaré. —Accedió Annie inmediatamente, entonces las tres observamos al único chico que se encontraba en la habitación, esperando a que él hablara.
—Bien, ustedes ganan, cuenten conmigo entonces. —Afirmó el hijo mayor de Anastasia.
— ¡Me importa una mierda su estúpida rebelión, ya estoy harta de escucharlos! ¡Déjenme dormir o los quemo vivos, sabandijas! —Gruñó entonces la hermana gemela que estaba dando vueltas en su cama debido a que no podía dormir porque estábamos planeando el rescate de mi nena.
— ¿Tú no deberías estar abajo trabajando mientras nosotros descansamos? Mamá va a matarte cuando se entere...—Mencionó la chica con la que compartía la habitación.
— ¡Eso no sucederá porque si me delatas me las vas a pagar, mocosa! ¡Así que cierra la boca y déjame dormir, necesito mis ocho horas de sueño! —Alzó la voz Danielle, molesta.
—Agh, como sea, si la abuela se entera de que no cumples con tus obligaciones creo que por fin dejaré de tener que soportarte porque te va a echar...—Dizzy acomodó su cabello. —Como sea, ahora Mal va a descansar y mi hermanita nos va a cubrir, ¿verdad? —La miró de reojo.
—Mejor los delataré a ver si así me dejan en paz de una vez por todas. —Respondió su gemela, entonces sus primos le arrojaron una almohada que le dio justo en la cara, ella masculló insultos entre dientes para luego voltearse y seguir intentando conciliar el sueño.
—No creo que pueda dormir, en lo único que pienso es en Alex y en lo muy asustada que debe estar...—Admití, haciendo una mueca. —Soy una estúpida, yo dejé que esto pasara, ¿qué voy a hacer?
— ¿De qué estás hablando? ¡Tú eres Mal Igna, hija de la emperatriz del mal, reina de Auradon! ¡Mírate! —Mencionó Annie, golpeándome con otra almohada. — ¿¡Qué vas a hacer!? ¿¡Es una pregunta!? ¡Demuéstrale a Ariana que no olvidas que ella es una Perdida patética y que no olvide quien eres tú! Cuando sepas dónde está, ve, enfrenta el problema, pelea, ¡gana! —Prosiguió la pelirroja.
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Revenge & Cribs [P&C #3]
FanfictionRevenge & Cribs 《Ain't you ever seen a queen be a bad bitch?》 Mal, Evie, Jay y Carlos han encontrado la felicidad en Auradon. Luego de cinco años, cada uno está formando su familia, confiando plenamente en que están viviendo sus sueños en su vida...