No hice ningún comentario al respecto y subí las escaleras hacia mi recámara, la cual por desgracia compartía con la bastarda de mi hermana gemela, pero por suerte ella no estaba.
Abrí la puerta y encendí la luz, pero me asusté al ver a esos tres en mi cama.
—Esto no puede estar pasando...—Murmuré, mirándolos con desconfianza. —No me asusten así, hijos de puta.
— ¿Que no te asuste? —El chico de abrigo rojo se levantó y se acercó a mí rápidamente, acarició mi cabello con su garfio, lo cual hizo que me estremeciera. Mordí mi labio inferior. —Pero esa es mi especialidad...
—No me molesten, no estoy de humor para soportarlos, ya no soy parte de su estúpido plan y no sé qué mierda hacen en mi casa pero aquí no son bienvenidos, lárguense o le diré a mi abuela todo lo que nos han robado durante años. —Dije seria, les temía pero estaba de mal humor por volver a verlos.
—Oh pequeña, tus amenazas patéticas no nos dan miedo, ahora que Camaroncito ya no está, las cosas cambiaron, es tiempo de que aprendas un par de cosas... —El chico que los acompañaba sonrió con malicia, sabía que había solo una persona además de mí que se atrevía a llamarla así a la hija de Úrsula aún cuando ella estaba aquí y ése era él.
—Y-yo no quiero aprender nada de ustedes, váyanse. —Susurré algo asustada, retrocediendo lentamente para salir de la habitación pero entonces la puerta se cerró con llave de repente.
No, no, no, no, pensé, no puedo estar atrapada aquí con estos villanos.
— ¿Por qué estas tan asustada, bonita? No debes temer, no te haremos daño, solo queremos charlar...—Habló ella mientras jugaba con el amuleto vudú que se encontraba en su cuello, sonriendo con malicia, el brillo en sus ojos me indicaba que estaba en peligro.
Ya estoy muerta.
Jane.
Habíamos organizado una reunión con nuestros amigos porque teníamos que darles un anuncio, aunque gracias a esto estaba muy nerviosa.
—Amor, tranquila, todo va a salir bien, ¿sí? —Murmuró mi novio, mirándome a los ojos antes de besarme.
—Pero, ¿no es muy pronto para decírselos? ¿No será de mala suerte comunicárselos antes de que pase? —Cuestioné, el chico de cabello blanco y negro negó con la cabeza.
—No puedo esperar más, además merecen saberlo antes que nadie...—Dijo Carlos sonriendo como si se hubiese ganado la lotería, estaba así desde que nos habíamos enterado de esta noticia.
— ¿Pueden por favor dejar de hacerse los misteriosos y contarnos de una vez el motivo por el que nos han reunido aquí? —Pidió Ben, impaciente, observando de reojo nuestro hogar, que rápidamente habíamos ordenado apenas todos confirmaron que vendrían a casa.
—Bueno, es que nosotros...—Empezamos a coro, lo miré y no pude evitar reírme, tomé su mano.
— ¡Hablen de a uno! —Suplicó la chica de cabello azul, nerviosa.
— ¡Bueno, está bien! —Chillamos al mismo tiempo, volvimos a reír con bastante nerviosismo. — ¡Lo diré yo!
Lo besé para callarlo y me separé rápidamente, acomodé mi cabello.
— ¿Por qué están tan raros? —Inquirió Doug, algo confundido.
—Yo te lo contaré, ¿recuerdan que nosotros íbamos a ser los únicos que no podrían tener hijos? —Mencioné, mis amigos asintieron. —Bueno, eso ha cambiado, porque estuvimos investigando y resulta que podremos adoptar así que oficialmente nuestra familia se está formando...—Informé entonces, feliz.
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Revenge & Cribs [P&C #3]
FanficRevenge & Cribs 《Ain't you ever seen a queen be a bad bitch?》 Mal, Evie, Jay y Carlos han encontrado la felicidad en Auradon. Luego de cinco años, cada uno está formando su familia, confiando plenamente en que están viviendo sus sueños en su vida...