Yo ya estaba acostumbrado a que todas las chicas del mundo gritaran y llorarán a mi paso, y ahora con la grabación de mi nueva película, pues más todavía. Pero a lo que no estaba acostumbrado hasta ahora, era a enamorame de verdad, o más bien, a ena...
Las tres semanas que tenía para aprovecharme de mis amigas por acompañarlas a The Late Late Show estaban a punto de terminar. La verdad, era que se me habían pasado tremendamente rápido.
Lisa y Rose llevaban una semana entera enganchadas a las redes sociales por las promociones de la nueva película de Kay. Todo el día enviando noticias aquí y allá. ¡Estaba incluso en el telediario! Al parecer será "la película del año".
Aquella tarde estábamos en la biblioteca de la facultad haciendo los deberes, aunque la única que los hacía era yo, por que mis amigas estaban ocupadas planeando otras cosas.
–¿Qué vas a ponerte para ir al show?– Le preguntó Lisa a Rose.
–No sé. No creo que haga calor, así que puede que vaqueros y tacones.
–¿Tacones? Sabes que te va a tocar estar de pie durante horas, ¿no?
–Si, pero lo que tengo son muy cómodos.
–Tu misma. Oye, ¿hacemos una pancarta?
–¿Pancarta para que?
–En plan tarjeta de cumpleaños. Mucha gente hace esas cosas.
–Pero vamos a ver: entre la pancarta, el móvil para hacerle fotos y papel y boli por si se acerca a darte un autógrafo, ¿cómo piensas sujetarlo todo? Te faltan manos.
–Athenea.– Dijo Lisa mirándome.
–Ni de coña.– Dije casi sin levantar la vista.– Yo voy pero no sujeto nada.
–Pues se lo pedimos a Ethan.
–¡Ay vale!
–¡Ssshhhh!– Dijo la bibliotecaria.
–Es la cuarta vez que os mandan callar.– Les susurré.– Si queréis hablar sobre esto, id a la cafetería.
–Pues vamos.– Dijo Rose y se levantaron tras coger sus cosas.
–¿Vais a dejarme aquí?
–No, vente. Aunque sabes que vamos a hablar de nuestro niño.
–Bah, paso. Cuando acabéis me pegáis un toque.
Las chicas salieron de la biblioteca todavía hablando de lo mismo. Yo seguí con mis deberes, que no eran pocos pero cuando me sonó la alarma para ir a trabajar recogí todo y me marché. Obviamente, no fui tan idiota como para dejar el móvil con sonido en la biblioteca, pero incluso la vibración se oía un par de mesas más allá.
Cuando salí hacia el centro, cogí el autobús y a medio segundo de estar en él, me llegó un mensaje.
WonderWomen 👸
Lisa💕
Chicaaass
Decidme que os parece:
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Es para ir a The Late Late Show
Rose🌹
Me encanta!!😍😍
Lisa💕
Incluso la indirecta del jersey??😏
Rose🌹
😂😂😂 Sii
Tú qué te vas a poner Athenea??
Pues ni idea Lo primero que pille y lista
Rose🌹
Qué!?! Vas a una "alfombra roja" no puedes ir en chándal.
No iría en chándal
Lisa💕
Admite que serías capaz
Me encantaría seguir con esta conversación tan apasionante, pero tengo que entrar a trabajar
Rose🌹
Valee, luego hablamos 😘
Lisa💕
😘😘
😘
Llegué al trabajo justo a tiempo. Trabajé toda la tarde sin ni siquiera acordarme que en dos días estaría viendo a Robbie Kay y a sus amigos en la alfombra. Jupi.
Todo estaba bien, tranquilo, sin mucha gente hasta que de repente me llegó un café y antes de gritar el nombre, como hacía siempre (me encantaba esa parte de mi trabajo), leí mejor el nombre para asegurarme de que no me había equivocado.
–Eh... ¿Robbie.K?– Dije no muy alto.
–Si, yo.– Resultó ser una chica que no pasaría los 16 años de edad, con una coleta rubia que casi le llegaba a la cintura.
–¿Robbie.K? ¿Enserio?
–Así tengo un baso de Starbucks con su nombre.– Dijo y cogió el café.– Gracias.
–De nada.– Dije pero ya se había ido.– Yo... no entiendo nada. Simplemente no lo entiendo.
Cuando llegué a casa, mi madre estaba viendo en la tele de la cocina una entrevista. ¿Sabéis de quién? Si, exacto: de Robbie Kay y Alexandra Daddario.
–Oh, venga ya. Mamá, tu también no por favor.
–Esta interesante, y la peli tiene buena pinta.
–Si fuera ella sola, vale. ¡Pero es que a él no le aguanto!
–Pero si es muy mono y parece buena persona.
–Parece idiota.– Susurré.
–¿Has dicho algo?
–No, nada. Qué voy a cenar y luego me voy a la cama, estoy muerta.
–Vale.
De verdad que no veía el momento de meterme en la cama. Había tenido suficiente Robbie por un día, incluso por una semana, pero algo me decía que en los próximos días, oiría hablar más de él que en toda mi vida.
