Perfectamente imperfectos

Capítulo 2: Mis amigas me roban el movil

Narra Athenea:

Odio el sonido del despertados con todas mis fuerzas. Me parecía uno de los sonidos que nunca se deberían de haberse inventado.

Aún así me levanté, aunque solo fuera para apagarlo. Me recogí el pelo en un moño mal hecho y me metí a la ducha. En si, me levantaba un cuarto de hora antes de lo que debería, pero mi madre trabaja hasta tarde casi todos los días y me gustaba dejar el desayuno hecho para ella y para mí. Vivíamos solas en un piso en el centro de California, mi padre era militar, o lo fue. Le destinaron en Siria pero una bomba explotó cerca de su campamento.

Al salir de la ducha, me puse la primera camiseta que vi y unos vaqueros después, me peiné un poco y me puse a hacer el desayuno. Cuando ya lo tenía casi todo hecho vi a mi madre entrar en la cocina.

–Buenos días, mamá.– Dije dándole un beso.

–Hola cielo.

–¿Qué tal el curro anoche?

–Muy duro. Ya sabes cómo es la hostelería.

–Lo sé mamá. Yo también trabajo en hostelería.

Mi madre trabajaba por las tardes en un restaurante y yo iba a las mañanas a la universidad y a la tarde trabajaba en un Starbucks. Salíamos adelante con nuestros sueldos y una pensión que nos pagaba el estado por los servicios prestados por mi padre.

–Me voy.– Dije cuando terminé de desayunar y de coger mis cosas.

–Adiós cielo.

–Adiós, mamá.– Junto a la puerta, había una foto de mi padre junto a la medalla que le concedieron a título póstumo.– Adiós papá.– Dije y saludé como en el ejército a la foto. Siempre lo hacía antes de salir.

Salí de casa y fui a paso rápido hasta la parada de autobús ya que para ir a la universidad, tenía que coger dos buses y caminar diez minutos.

Cuando cogí el segundo autobús, miré mi reloj y vi que iba perfecta de tiempo. Cuando llegué a mi parada, bajé, me puse los cascos y caminé hasta la facultad donde estudiaba arquitectura.

Mientras caminaba, entré en Twitter. Todas las puñeteras noticias que me salían eran sobre la misma persona:

"Escena filtrada sobre "Revolution" la nueva película de Robbie Kay"

"Robbie Kay y Alexandra Daddario juntos en un nuevo proyecto."

" "El rey de corazones" nuevo proyecto... ¿nueva relación?"

"¿Son Alexandra Daddario y Robbie Kay la nueva pareja de moda?"

Si había algo que me irrita más que el sonido del despertador, era ese chico. Odiaba al tal Robbie. Lo peor de todo era que estaba en todas partes: marquesinas, redes sociales, televisión... Además, mis amigas Rose y Lisa estaban enamoradas pérdidas de él. Estuve a punto de salir de Twitter por que ya estaba harta de ver fotitos suyas, pero de repente, alguien me empezó a hacer cosquillas por la espalda, con lo cual yo grité en medio de la calle. Cuando me giré vi a Lisa riéndose y a Rose acercándose por detrás de ella con su novio Ethan.

–Lisa, no tiene gracia.– Me quite los cascos.

–¿Cómo que no?– Dijo sin parar de reír.– Tu no has escuchado el pedazo de grito que has soltado, ¿no?

–No.

–Pues casi dejas sordo a medio vecindario.– Dijo Ethan.

–Es muy fácil sorprenderte por la calle, Athenea.– Añadió Rose.

–¿Qué veías?– Dijo Lisa mirando mi móvil.

–Nada interesante.

–¡Pero que dices! ¡Rose, mira esto!

Lisa terminó quitándome el móvil y fue corriendo a donde lisa para enseñarle las fotos de Robbie y ambas suspiraron a la vez.

–Es tan mono...

–Me siento ignorado.– Dijo Ethan.

–Bienvenido al club.

–¡Mira, mira, mira!– Dijo Lisa.– ¡Aquí sale con Tom y Thomas!

–¡Oh! Friendship goals.

–Devolvedme mi móvil.– Dije recuperándolo.

–No entiendo por qué no te gusta.– Dijo Lisa mientras íbamos hacia la universidad, ella estudiaba veterinaria y Rose derecho.

–Pues no me gusta. Tan simple como eso.

–Pero vendrás a ver la peli con nosotras, ¿no?

–Aaggg. Leí el libro, y la verdad, no lo veo como protagonista.

–¿¡Cómo que no!?

–Si sabes que le odio, ¿por qué me haces esas preguntas?

–Porque sé que algún día cambiarás de opinión.

–Pues espera sentada.– Dije tajante y los cuatro seguimos nuestro camino hacia la universidad.