Capítulo 9: Cat me da un remedio asqueroso para la resaca

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Narra Robbie:

Me encanta salir de fiesta, y odio tener resaca, cosa que casi siempre va unido. Cuando salgo me gusta beber un poco, pasármelo bien con mis amigos y relajarme. Sobre todo relajarme.

La cosa es que no me acuerdo cómo llegué a casa. Estaba tranquilamente dormido sin molestar a nadie, cuando de repente escuché el sonido de la tostadora y me desperté. Cuando estoy medio borracho, se me agudiza el oído.

–¡Estoy despierto! ¡Estoy despierto!– Grité levantándome.

Entonces la cabeza me dio una vuelta de 360 grados y volví a tumbarme dejándome caer. Ni siquiera había conseguido llegar a mi cuarto, me había quedado dormido en el sofá con un brazo y una pierna colgando, pero estaba más agusto que nunca, si quitaba el echo de que la cabeza me retumbaba como si fuera un tambor y que mis tripas parecían querer devolver a este mundo mis comidas de la semana pasada.

–Buenos días.– Escuché.

Abrí los ojos y vi a Cat completamente encima de mi y me asusté por un momento al verla de frente.

–¡Cat! No vuelvas a hacer eso en tu vida.

–Lo siento. Aunque esto compensa el que anoche tuviera que traerte medio a rastras mientras cantabas canciones de Lady Gaga.– Se sentó a mi lado.

–¿Qué?– Dije mientras me incorporaba y me agarré la cabeza para que no me diera vueltas.– Dime qué no hice mucho el ridículo, porfa.

–No, tranquilo. Ben se encargó de que nada saliera a la luz.

–¿Alguien acabo en el hospital?

–No.– Dijo como si fuera obvio.

–Ah, menos mal. A veces Ben se pasa un poquito con la seguridad.

–Tranquilo, no tienes que preocuparte por eso.

–Genial.– Dije levantándome.– Por que ahora mismo necesitó urgentemente ir al baño.

Después de ir al baño (cosa que no os voy a contar) subí a mi cuarto para quitarme la ropa de salir de fiesta y me puse lo más cómodo que encontré en mi armario.

Cuando volví a la cocina, no vi a Alicia por ninguna parte, solo a Cat preparando café.

–¿Donde esta Alicia?

–En su casa. Cuando sales de fiesta no te suele gustar desayunar a la mañana siguiente, ¿recuerdas?

–Ah si... ¿y ese café?

–Es para mi. Para ti, tengo algo para la resaca.– Dijo pasándome un baso.

–¿Esto se bebe?– Dije cogiéndolo y observando el color extraño que tenía aquello.

–Si tienes resaca, si. Vamos, tómatelo.

Me acerqué el baso a los labios ignorando el fuerte olor y pegué un trago.

–¡Dios!– Dije mientras aquello me quemaba la garganta.– ¿Pero que mierdas es esto?

–Remedio familiar para la resaca.– Dijo mientras se reía.

–Pues a mi no me hace nada de gracia.– Dije y dejé el baso en la mesa y me di media vuelta para marcharme.

–¿A dónde vas?

–A dormir.

Me gustaba que Cat se quedará conmigo en casa cuando no me encontraba bien. Era lo más parecido que había tenido a una madre desde que me marche de Londres.

Cuando llegué a mi cuarto me tumbe en la cama, pero no conseguí dormirme. Cuando cerré los ojos, un mensaje de alguno de los chicos hizo que me fueron imposible dormir.

😎Machos alfa😎

Tom

Por favor, que alguno me
diga que tiene resaca como
para una semana.

Pues yo mismo.

Qué tomamos anoche?

Tom

Ni idea, pero seguro que
no fue nada bueno.

Thomas

Yo no tengo resaca.

Tom

Por que?!?

Yo estoy en la mierda.

Thomas

Por que yo no bebí tanto como vosotros.

Y una mierda que no.

Seguro que te has levantado, te has bebido un batido de proteínas de esos de los tuyos y estás en el gimnasio.

Thomas

Pues no te digo que no 😂

Tom

Has ido al gimnasio después de salir de fiesta? Tío, eres mi héroe.

Thomas

😂😂😂

😂😂😂

Perfectamente imperfectosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora