En el Tiempo

CAPITULO 42: TE EXTRAÑARE

Lo único que sabía era que ahora estaba sola con mi hijo, la familia de Himchan me abandonaría y la gente se compadecería de mí.

Pronto comenzaron a concurrir familiares y conocidos de mi Him, la iglesia donde se estaba realizando su velatorio. Yo estaba junto a mi suegra, callada y triste recibiendo los pésames mientras Kim y su padre se encargaban de los asuntos internos del velorio.  

Yo solo trataba de no parecer como una esposa desgraciada para que la gente no me juzgara al pensar que había sido una mala esposa, y eso era, justamente, lo que tanto lamentaba.

Pasadas las ocho de la noche, llegó Min Ho, seguramente su turno había terminado y pasó directamente del trabajo a verme, podía adivinar que venía a preguntarme si había comido algo. Y la verdad era que si había comido una sopa instantánea de verduras y la había vomitado, mi suegra que estaba al lado mío en el baño me salió con que a Hyun le asqueaban las sopas de verdura, bufé, mi bebé al parecer tenía las mañas de su padre.

Cuando Min Ho se me iba acercando me puse en pie para decirle que justo iba de camino hacia la recepción a comer una galleta, pero repentinamente todo me dio vueltas, llevé mis manos a las sienes y cerré los ojos tratando de conservar el equilibrio, me senté de golpe en la banca. Cuando abrí los ojos vi como venían Minho y Kim corriendo a socorrerme.

- ¿___, estás bien, amiga?- preguntó Minho poniéndose en cuclillas delante de mi

- Sí, sí- dije con mis aires desorbitados- solo me dio un mareo, creí que me desmallaba

- ¿comiste?

- Min Ho- Berrinché con inocencia, él no fue capaz de enfadarse- bueno, tengo un poco de hambre

- qué quieres comer

- no sé, cualquier cosa

- ammh ¿papas fritas?- dijo con tono divertido.

Sonreí un poco, yo acostumbraba a decir eso cuando estudiábamos juntos y él solía comprarme papas fritas. Pero de pronto volvieron mis náuseas.

- No quiero papas...

- Lo siento, jovencita, vas a tener que comer igual- dijo tratando de no parecer tan duro

Se levantó y se acercó a Kim, lo alejó un poco de mi para hablarle, pero podía oírle igual.

- ¿Te pido un favor?- dijo Min Ho sacando su billetera del bolsillo trasero de su pantalón- ¿le puedes comprar un paquete de Potatos pop chips?

- De qué...- preguntó casi molesto.

Min Ho rio un poco y le explicó:- son unas papas fritas, están junto a las papas fritas y a los palitos de harina y todo eso, el paquete es rojo, es de barbeque

- Ah ya, ya sé cuáles son

- A ___ le gustan, yo sé que así comerá

Kim ni siquiera afirmó, se dieron la espalda al mismo tiempo y Minho volvió junto a mi. Quizá Kim ya lo odiaba,  él me había oído nombrar a mi amigo algunas veces, pero Himchan jamás me hizo escenas de celos por eso, pese a qué sabía lo cercanos que éramos.

Al final Kim volvió con el enorme paquete de potato pop chips y me lo entregó. Demonios, si había que fingir que él y yo éramos solamente cuñados, Kim merecía un premio.

- Ahí tienes, déjate de molestar- me dijo toscamente y se alejó.

Me quedé en shock, debí haberme puesto de pie en ese momento y haberle gritado: "dile eso a tu hijo, que no me deja comer ni de maldito paquete de papas fritas", pero él sabía que yo no era capaz de hacer algo como eso.

Y se fue a sentar en las últimas bancas de la iglesia junto a tres mujeres, sus amigas. De no haber sido por Min Hon, quizá los celos que sentí al ver a Kim acompañado de tantas mujeres se hubiesen notado más, pero sé que fui lo suficientemente explícita como para que Kim viera mi cara de odio cuando se acercó una hora después a hablar con su madre, cansado de charlar con ellas. Y pude ver su cara de satisfacción con mi reacción, imbécil.

Hasta que llegó al lugar la ex mujer y ex amante de Kim y Himchan con una panza a punto de estallar. Lo primero que pensé fue que esa criatura que esa mujer esperaba era de Kim o tal vez de Himchan como resultado de alguna de sus aventuras. Minho notó que yo me estaba acongojando, y aun sin saber el porqué, se ofreció para llevarme a casa y yo acepté, mi suegra nos miró de reojo, me detuve y le dije mejor que no me iría a casa aún, sabía que mi suegra estaba molesta por el hecho de que me subiera al auto de otro hombre cuando Himchan llevaba apenas unas horas muerto. Y tenía razón.

Pasó un día, y Kim no había dormido desde que toda esa desgracia había comenzado. Yo, pese a estar dolida con él, fui la única en percatarme de que él estaba que caía al suelo por el cansancio, él era el que más había corrido por todos lados, atendiendo a la familia y preocupándose de que nada faltara, al igual que su padre, pero este solo ordenaba y Kim era el que se movía.

- Kim- dije acercándome a él que estaba solo en la última banca con su hermosa cara de zombie- vete a casa, no has dormido nada

- ¿por qué te preocupas por mí?, la que está más mal por todo esto eres tú

- No preguntes tanta cosa, solo hazme caso, necesitas dormir

- Ve a sugerírselo a tu amiguito ese

- ¿qué?- pregunté creyendo haber escuchado mal

Kim no me miró, permaneció con la mirada severa y sin embargo estaba haciendo un puchero infantil y tierno.

- ¿te he dicho algo yo de por qué invitaste a tu ex mujer a presentarse aquí con esa panza de canguro a lucir que también va a tener un hijo tuyo?

Callé enseguida, me arrepentí de haber dicho ese "también" demasiado fuerte.

- El hijo que ella espera no es mío- dijo Kim sin pensar

Si esa pansa no era por Kim, todo me daba vueltas pues había una gran posibilidad de que ese niño fuera de Himchan, la sangre me hervía y en mi cabeza circulaban un monto de ideas hasta que Kim volvió a hablar

- ¿estabas celosa por creer que tenía un hijo con ella?

  Bajé la vista y negué con la cabeza  

-Hubiera preferido seguir pensado que era tu hijo y no en la posibilidad de que fuera hijo de Himchan - una lagrima cayo por mi mejilla, apreté fuerte mente en puños, sin darse cuenta Himchan se había vengado de lo que yo le ocultaba

- No, cariño- dijo Kim con suavidad- ella solo vino a darme el pésame por mi hermano y a decirme que quería que estuviéramos bien, que no la odiara, me dijo que esa era la criatura del hombre con quien ahora estaba...sabes deberías de dejar echar a volar tu imaginación así.

En ese momento apareció Min Ho con su delantal blanco colgando del antebrazo y su fonendoscopio en la mano. Me separé de Kim pero antes le repetí: "vete a casa a dormir, lo necesitas".  

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¿Me extrañaron? espero que si.

Preguntaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!

¿cómo se imaginan el final de esta historia? 

¿Final feliz o triste?