Sword and Crown 》Muke

Vingt-troisième

  —¿QUÉ?

El estruendo por parte del príncipe, con su intensidad, logró amortiguar el sonido del trote de los corceles que guiaban el carruaje principal, logrando que el cochero por precaución, detuviera el vehículo con pasajeros.

—Sir, ¿y recién en estos momentos se le ocurre hablar sobre este descubrimiento?  Podría haberme quedado en el reino para controlar lo que sucedía...—comentó Calum, que estaba en el carruaje junto al pintor y el príncipe, donde el último ante la detención del carruaje, bajó de este para poder chillar como correspondía.

—¡Me van a casar! ¡Me van a casar con una mujer! ¡Con una mujer!—comenzó sus gritos, atrayendo la confundida atención del cochero, llamando la atención de los otros dos que iban unos metros más adelante cargando el equipaje.

  —Príncipe, le recomiendo que controle sus palabras—reprendió el pintor saliendo del carruaje, siendo seguido por Calum. Necesitaba proteger a Luke de sus propias palabras, porque si a este se le escapaba su inclinación hacia los hombres, todo tendría un futuro demasiado oscuro e incierto.

—¡ESTO ES INCONCEBIBLE! ¡ES ABSURDO! ¡ES ABSOLUTAMENTE ALGO EN CONTRA DE MI VOLUNTAD CASARME CON UNA MUJER QUE NO CONOZCO!

El pintor se iba a acercar al príncipe para calmarlo, pero el cochero que ahora viajaba como pasajero, estiró su brazo para impedirle el paso y negar con su cabeza repetidas veces.

—Deja que se desahogue o sino tendrá sus crisis donde amenaza con terminar con su vida para evitar algo.

Ashton aceptó la sugerencia de Calum y ambos se quedaron observando  a un príncipe caminando en círculos, gruñendo entre dientes. Ashton había sido suficientemente precavido como para guardar tal información  el tiempo suficiente como para que Luke no diera las órdenes de regresar. Sólo quedaban tres días para llegar al reino unido, así que ya podía intuir que el rubio solo llegaría al palacio de su mejor amiga, para que esta determine cuando será su matrimonio y así, cuanto antes, marcharse a asumir el poder en Canberra.

  —Les apuesto—murmuró Luke con su mirada oscura, por fin enfrentando a Calum y Ashton—. Les apuesto mi nuevo palacio, a que el reinado que iban a visitar aquella vez que nos separamos, era el de este tal rey Thomas, con todas las intenciones de que Michael pudiera pasar tiempo con la princesa, le agradara y así él sería el arma que mi padre utilizaría para controlarme. Les apuesto todo, pues él es lo suficientemente torcido como para utilizar a Michael contra mí, mientras que mi guardián actúa de  forma inconsciente.

.          .          .   

  —Entonces, con la creación del estado moderno, Europa central está dividida en pequeños mini-estados y de ellos se busca crear una nacionalidad, lo que se traduce como una serie de costumbres, lengua e historia en común que te permite localizarte en cierto territorio con tus mismas características. Los hermanos Grimm están intentando hallar la esencia de un país y lo que hacen es recopilar los cuentos de hadas más conocidos.

Michael asintió a las palabras de la princesa, y cuando ella terminó, bebió con delicadeza su taza de té y le dio un pequeño bocado a las galletas.