Dolía, era como sentir que una espada en llamas desgarrara tu interior. Como la herida se mantenía ardiente mientras sangraba incesantemente.
Así es como se sentía, mientras lo miraba. Sus compañeros trataban de animarlo, y aunque lo agradecía profundamente, era evidente que su dolor no desaparecía nunca.
Menos cuando el castaño celebraría su boda en menos de una semana.
-Yo fui quien alentó a Tony a que se confesara.
Steve dejo de prestar atención a la pareja que conversaba tranquilamente con Wanda y Peter, dirigió su mirada a su compañera, mas no respondió, ella lo tomo como invitación a que continuara.
-Es decir, podía ver la excelente química entre ustedes dos. Al principio asumí que eran como Clint y como yo, compañeros de armas, pero entonces noté algo en ti. Cada que veías a Tony, tus ojos mostraban un brillo, dejabas tu porte recto y solo estando a su lado permitías relajarte. Por eso no dude en decirle que se confesara, pero me sorprendí al saber que lo rechazaste.
-¿Y qué? ¿Vienes a decirme que fui un idiota?
-No. Supongo que eso te lo has repetido cientos de veces en estos días. Solo quiero saber qué piensas hacer.
-¿Hacer qué? Tony es feliz con esa chica. Qué clase de persona seria si me interpongo en su felicidad.
-No discuto eso, pero creo que deberías decirle lo que sientes.
-Por supuesto que no, solo provocaría que él se pusiera triste.
-Si el ya no te ama. No se pondrá triste no por él, eso es a lo que le temes. Que te tenga lastima, y que tu admitas frente a él, que solo cuando lo perdiste, te diste cuenta de lo importante que era para ti.
Natasha tan solo suspiro al ver como el rubio no respondía ante lo que le había dicho.
-Debes decirle, al final somos un equipo. Si no lidias con esto ahora, será un problema en el futuro.
<...>
Caminaba con lentitud y parsimonia, ni siquiera se percató cuando llego a su destino. No fue hasta que escucho la radiante de voz, de aquella persona.
-¿Qué te trae por aquí Cap?
Había meditado las palabras de Natasha, y ciertamente ella tenía razón. Tendría que ser honesto, porque a pesar de todo seguían siendo amigos.
-Tony, solo quiero que me escuches y por favor no interrumpas.
-¿Ok? Pero dilo, me preocupas.
Se mordió el labio, aún estaba asustado. – Quiero decirte que... te amo...
-Steve... yo...
-Espera. Solo quería decírtelo, no te estoy obligando a nada. Es decir, quiero reírme de lo irónico de todo esto, te rechace cuando confesaste tus sentimientos hacia mí, en ese momento en verdad estaba tan ciego que no vi, solo cuando te fuiste entendí lo realmente importante que eras para mí. No te pido nada, solo quería decírtelo, sé que eres feliz y en verdad estoy feliz por ti... yo solo...
Las lágrimas empezaron a descender de sus mejillas, contuvo el sollozo, se sentía patético por mostrarse frente a Tony de esa manera.
Lo que no se espero fue sentir los brazos del castaño, sintió como era jalado, y su rostro se recargo en el hombro del genio.
-En verdad eres un gran hombre...
-Perdón, no quería que me vieras así.- murmuro mientras sollozaba.
-Tranquilo, sé que puedo causar este efecto en las personas, así que no te sientas mal.
Steve no pudo evitar reír ante el comentario.
-No te creas tan galán, Stark.- respondió solo para llevarle la contraria.
-No me creo, lo soy.
Tony mantuvo abrazado a Steve, mientras el aún tenía su rostro recargado en el hombre del castaño, ambos compartiendo ese momento en la soledad del taller.
<...>
Todos estaban en la cocina, algunos comentando que faltaban 3 días, para el gran día, aunque Tony no hizo público la boda, más bien habían decidido hacer algo privado entre sus conocidos y ya después lo haría a lo grande con los medios presentes.
-Buenos días chicos.
Tony entro somnoliento, parecía que no había dormido casi nada.
-Deberías dejar de trabajar en tus proyectos en tres días te casas.- Hablo Bruce.
Tony se dirigió a la cafetera, para servirse en su taza con el logo de AC/DC, bebió un poco y a la salida de la cocina, miro a sus compañeros.
-Sobre eso, olvide decirles. La boda se canceló.
El shock fue grande, lo cual Tony aprovecho para encerrarse en su taller, evitando que sus compañeros intentaran averiguar que paso, incluso Steve estaba sorprendido. Hacia menos de 2 días converso con Tony y pasaba esto. No sabía cómo sentirse al respecto.
<...>
-¿Entonces como se lo tomaron?
-Considerando que han intentado romper la puerta de mi taller, supongo que bien.
-No puedes culparlos, se preocupan por ti. Son buenas personas.
-Eso no dijiste hace 11 meses.- respondió con burla.
-Hace 11 meses, mi primo favorito, llego triste a mi hogar y con el corazón destrozado. Así que discúlpame si no tenía una buena opinión de ellos, menos de aquel soldado.
-¿Cómo que tu primo favorito? Soy el único que tienes.
-Y eres el favorito. Enserio eres dramático, eso supongo que lo sacaste de la tía María.
-¿Entonces a donde estas viajando?
-Pues quiero conocer Latinoamérica. Así que primero iré por México, y ya veré.
-Entonces cuídate mucho.
-Eso debería decírtelo a ti. No quisiera enterarme que ese soldado te rechazo nuevamente porque no me importara que sea un supersoldado.
-Tranquila, aunque creo que después será difícil explicarlo.
-¿El que somos familia por parte materna y que fingimos el compromiso? No es tan difícil, además de no ser por ti, el abuelo me hubiera casado con ese sujeto.
-En verdad aun no puedo creer que te comprometiera con Hammer.
-Como sea, debo irme. Tengo que abordar el avión.
-Avísame cuando llegues.
-Por supuesto, y Tony.
-Dime.
-Las segundas oportunidades, no siempre se dan en la vida. Así que ni tú, ni el, vayan a desperdiciarlas.
-Lo sé, gracias por todo.
-Para que esta la familia.
Colgó y solo miro el celular, escucho la puerta abrirse y vio a Steve.
Quizás sería muy pronto, pero al menos estaba la posibilidad, tan solo el tiempo lo diría.
