Coachella in your Heart (Trawn)

El lío amoroso de Charlie

Troye dormía plácidamente en su cama, estaba en un mundo en el que todo podría pasar y era verdad porque sentías una cálidas manos recorrer su cuerpo bajo su pijama... cálidos besos depositados en su vientre e iba bajando hasta llegar al borde de su pantalón, una enorme mano se posó entre sus piernas y apretó levemente su creciente erección haciéndolo jadear bajo y morder su labio inferior, otro apretón suave lo hizo arquear su espalda.

- Shawn basta.- mantenía sus ojos cerrados y su voz salió casi en un hilo.

Caso omiso.

Shawn empezó a bajar las prendas inferiores del rizado lentamente hasta dejarlo desnudo, empezó con la misma rutina, besos suaves, ligeros y muy húmedos entre sus muslos, un par de mordiscos y caricias que le erizaban la piel...

- Shawn... ya... Me voy a correr.

Palabras huecas.

El chico castaño oscuro tomó con una de sus manos el pene de Troye y empezó a masturbarlo muy lentamente, era tortura y placer a la vez. Leves jadeos salían de los labios de rubio que empezó a mover sus pelvis de forma sincronizada con la mano de Shawn.

- Luces tan hermoso.- Shawn se acercó a Troye y lo comenzó a besar en los labios mientras le hablaba en voz baja, no dejó de masturbarlo en ningún momento.- Amo ver tus labios entre abiertos jadeando y diciendo mi nombre, el de tu único dueño.

- Soy sólo tuyo Shawn.

- Exacto, solo mío. Vamos nene, no tengas miedo y correte para mi.

Orden cumplida.

Troye se corrió en la mano de Shawn salpicando un poco su vientre, el castaño lo masturbó hasta sacar lo último, el rubio quedó agitado por alcanzar su cumbre.

Shawn se acostó a su lado en la cama, Troye abrió por fin sus ojos y miró a su lado a su novio, parecía irreal decirlo o pensarlo pero lo era oficialmente. Sonrió, tenía derecho porque su novio era el hombre mas deseado por cualquier hombre o mujer en la actualidad, Shawn era solo suyo. El chico rizado con curiosidad pasó una de sus manos por el vientre y sintió entre sus dedos su semen, era la primera vez que alcanzaba un orgasmo y se manchaba de esa manera, empezó a observar sus dedos y los acercó a sus labios pero fue tomado por la muñeca, Shawn lo miraba y él entendió lo que haría, el castaño lamió los dedos disfrutando del sabor del rubio. Eso lo dejó sorprendido pero lo hizo más al ver que el chico dejaba sus dedos para posar sus labios sobre los suyos en un beso muy excitante, estaba saboreando a Shawn y a sí mismo, sus lenguas se enredaban y se daban leves mordiscos en los labios.

- Eres perfecto.- le dijo Shawn cuando se separó para observarlo, ese chico era suyo.- Demasiado perfecto que siento que no te merezco.

- Yo siento eso mismo por ti.

Se volvieron a besar.

Pasaron unos minutos más en la cama hasta que decidieron entre los dos que ya era hora de desayunar, Troye fue a bañarse primero y luego Shawn.

La idea de dormir juntos en la habitación del rubio fue de Shawn, el castaño oscuro no compartía habitación con Hailey, ella tenía una propia. Mientras que Troye se vestía Shawn se quedó mirando un oso panda de peluche, el juguete tenía colgado el collar de corazón azul que meses atrás se habían regalado.

- Lo coloqué ahí porque jamás me alejo de ese regalo.- dijo el rubio al percatarse de la escena.- Lo llevo a todos lados.

- Es muy lindo ¿Quién te lo regaló?

- Una fan en Italia.

Shawn se acercó a Troye y le dio un beso en la mejilla abrazándolo. No podía quitar sus manos de encima del chico, era como una adicción. Debido a su estatura Troye le dio un beso en el cuello y ¡Oh por Dios! Ese perfume seguía en el cuerpo de Shawn, le hacía temblar de pies a cabeza ese olor tan varonil.