La Verdad

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Ambos yacían acostados en la cama completamente desnudos pero cubiertos por las gruesas sábanas a causa del frío, Shawn acariciaba con las yemas de sus dedos la espalda de Troye que lo abrazaba rodeándolo por la cintura con sus brazos y apoyando su cabeza sobre su pecho, eran pasadas las nueve de la mañana de un primero de enero y los dos no querían moverse de donde estaban, primero porque el frío estaba en su punto más alto y porque estaban demasiado cómodos. Troye soltó un largo suspiro, aún tenía en mente lo que había sucedido a eso de las dos de la madrugada cuando todos comían y seguían viendo los fuegos artificiales que le daban la bienvenida al nuevo año.

Todo se desencadenó por una simple conversación entre la señora Karen y el señor Shaun, la conversación iba de los planes futuros de sus hijos pero como era de esperarse al mencionar los nombres de Shawn y Troye todo lo que traía no solo era música o proyecto artísticos sino más. 

- ¿Qué tiene planeado tu hijo hacer este año?- le preguntó Shaun a la mujer.

- Si todo va bien mi pequeño Shawn lanzará otro álbum ¿Y el tuyo?

- También.

- ¡Que casualidad! ¿No?- respondió Karen emocionada y bebió algo de champaña.- Nuestros hijos nacieron con muchas similitudes también.

- Y para estar juntos.- comentó esta vez Laurelle dándole un codazo amistoso a la canadiense.- A mi en lo personal me encanta tu hijo Karen, es muy maduro para su edad y Troye le encanta eso, no me sorprendería verlos casándose.

- De que se casan se casan aunque cierto hombre que estoy viendo diga que no.- ella miró a su esposo sonriente.- ¿Verdad Manuel?

- Si es lo que desean.

Manuel después de la visita de Hailey estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano de aceptar a Troye en la familia, le buscaba conversación y lo invitó a las compras de la casa para fin de año que él tradicionalmente hacía con sus dos hijos, no solo al rubio sino también al hermano menor de este que se convirtió en el novio de Aaliyah y lo mejor de todo fue que Manuel lo aceptó a él y a Troye... a regañadientes claro está pero con el propósito de ser mejor persona y una más comprensiva.

Como era costumbre Shaun miró a su hijo pero esta vez notó algo raro en él... su hijo no apartaba la vista de su plato de comida a medio comer, se veía algo nervioso y se lo dejó saber a su esposa que fue la encargada de cuestionar que le sucedía.

- ¿Te sucede algo cariño?

Troye negó sin dejar de mirar hacía su plato pero el rojo de su rostro demostraba lo contrario a su respuesta, disimuladamente miró a Shawn que estaba igual que él solo que sin el rojo sino que estaba nervioso mirando a cada uno de los presentes.

- Lo que sucede... es que...

El rubio rizado empezó a negar pero ya su chico no pudo más detener las palabras de salir de su boca.

- ... Troye y yo nos casamos en Japón.- soltó sin detenerse a respirar y explicó de igual manera.- Fue por eso que nos perdimos casi dos meses de todos y después de ahí viajamos a República Dominicana a celebrar nuestra luna de miel pero no nos atreviamos a decir nada por miedo a lo que mi padre o los de Troye dijeran y teníamos planeado hacerlo pero no cuando pero ahora creo que es lo mejor que podemos hacer...

- Al final íbamos a decírselo.- agregó el ojiazul.- No sabíamos cuando pero lo haríamos.

Silencio.

- Lo sentimos.- Troye estaba llorando del miedo.

Shawn tomó entre sus manos las de su esposo como muestra de su apoyo y dándole fuerzas, Manuel se levantó de su puesto sin dejar de mirar a su hijo y se acercó a él lentamente, Troye tenía miedo que algo pasara pero no fue así, el hombre le pidió a su hijo que se levantara y lo abrazó emocionado a tal punto que no pudo contener el llanto; de ahí en adelante todo fue un mar de lágrimas en la familia Mendes-Mellet, ambos chicos recibían la felicitación de sus padres y hermanos.

Coachella in your Heart (Trawn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora