-Yo tenia 16 años 10 meses cuando lo conoci.- Comienza a decir. No se de que hablaba hasta que comprendo. Es su historia. El motivo por el cual odia a sus padres.- Él, era un chico encantador, su nombre era James. Lo conoci en el parque que estaba cerca de la casa donde antes vivia yo. Él era lindo, dulce, detallista. Sus ojos eran como los de Logan, de ese precioso verde limón, su cabello era rubio obscuro, como el mio, su cuerpo era delgado, sin musculos. Su padre,-Rie entre dientes, una de esas risas frias llenas de odio. Seguia mirando a la nada.-era un infeliz. Lo golpeaba porque decia que era debil y que con eso seria más fuerte. Era soció en la empresa de Jonathan, mi padre. Era un estafador. James y yo, comenzamos a frecuentarnos más. Salíamos a pasear, al cine, al teatro, amabamos ir a la biblioteca. Yo...hay una parte de mi pasado que solo lo saben las chicas y Logan; jamás pense en llegar a decirselo a alguien más, y mucho menos a James.-Una lágrima recorre su mejilla y su voz suena entrecortada.- Eso es algo que no creo que te pueda llegar a decir. En fin, cuando se lo conte a Jamie...creí que se alejaría de mi, que pensaria que yo era la peor persona del mundo, pero, sin embargo, él...se quedo a mi lado, él me apoyo mucho, y...me enamore de él, nos hicimos novios, pero...a escondidas, ya que su padre habia querido jugarle chueco a Jonathan y él lo odiaba. Me prohibieron verlo, pero yo seguia saliendo con él. Un día, invite a James a mi casa, ya que segun Jonathan y Katherin tenían una importante cena de negocios. No...solo mirábamos películas. Cuando ellos llegaron... Jonathan enfurecido, comenzo a golpear a James, -Su voz se convierte en un susurro a causa de las lágrimas.- lo dejo inconsciente, lleno de sangre, quise reclamarle y me dio una bofetada, le pedi ayuda a mi madre y me dijo que ella no podia hacer nada, además de que él se lo merecía por ser un perro de un maldito estafador. El chofer de Jonathan lo llevo al hospital... él quedo en coma por los golpes en la cabeza. No me dejaron ir a verlo, ni un solo día, nunca. El maldito bastardo de su padre le pidio dinero a mi padre para "borrar el daño". Un día, me llego una noticia, James... James habia, habia muerto. El colmo para mi fue que no me dejaron ir a su funeral. 3 días después empaque mis cosas y me large de la casa, me fui a casa de Nayla, ella fue la primera en independisarze, asi que fui a su casa. Luego de varias peleas con mis pad... con ellos, supuestamente llegamos a un acuerdo; si yo aceptaba su dinero, porque según ellos se sentirian mal si algo me faltase, no me volverían a buscar nunca a menos de que yo lo decidiera, y, a lo que yo se, yo no lo decidí. No quiero verla... aún no estoy lista para verla.-Cierra los ojos con fuerza. Sus manos estan empuñadas y sus nudillos estan blancos.
-Mackenzie...-Vacilo. No tengo idea de que decir.-yo...-Me mira por primera vez en este rato. Posa su dedo indice en mi boca.
-Shhh... no digas nada, ¿ok?.-asiento con la cabeza. Me quita el dedo de los labios. Se sienta a horcajadas sobre mi. Restriega su intimidad en mi "amiguito" haciendome gemir. Besa mi cuello y susurra sobre el.- Hazme tuya...-
En cuanto lo dice, una parte en mi, despierta. Siento que mi erección esta muy notable y dura. ¿Porque coños esta chica hace que mi polla se ponga dura al instante?.
-Y aqui estamos de nuevo, la chica te utiliza para quitarse el mal sabor de boca y las ganas de follar.
Decido ignorar esa estúpida voz, seguramente estoy loco, ¿como puedo discutir con alguien que nisiquiera existe?.
-Mackenzie...tu madre llegara en una hora y media.- Murmuro.
La beso con intensidad. Con mi lengua delinio sus labios para después apoderarme de su boca. Su sabor es incomparable. Sus manos siguen jugueteando con el cabello de mi nuca.
-Que le den.-Murmura.
Sus manos van al dobladillo de mi playera, comienza a subirla hasta que me la quita. Meto mis manos por debajo de su ligera blusa. Acaricio su torso y sus pechos. Ella gime
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Mis Pervertidas Fantasías
Cerita Pendek―¿Entonces todo este maldito tiempo fui un objeto para ti?―Pregunta en un tono muy calmado para la situación. A pesar de eso, se escucha la tristeza, indignación, decepción y enojo en ella. ―¿Siempre fui eso para ti? ¿Un maldito objeto? ―No...―Un en...