Capitulo 18

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— ¿ya llegamos? — preguntó por tercera vez.

— no — vuelve a responder Wyatt, apuesto a que en este momento me quiere sacar volando del carro.

Suelto un quejido, está incertidumbre me está matando, ¡Maldición! Ya quiero saber que es.

Unos minutos más y siento mi vejiga a punto de explotar, ¡¿es en serio?!, ¿por qué ahora?, ay no, ya me paso una vez, esta vez será diferente... me aguantaré.

me cruzo de piernas para que no se me salgan, pero es imposible, así que empiezo a hacer un pequeño baile en el asiento. ¡Es imposible!

- ¿Qué tienes? - escucho preguntar a Wyatt quien ya se debió dar cuenta de mi estado, sin embargo no le contesto, solo me limito ha apretar mis labios.

siento como el auto frena, supongo que ya llegamos, ¡al fin! mi vejiga no iba ha aguantar ni un minuto mas.

—llegamos —suspira Wyatt como si estuviera aliviado ¡la desesperada era yo! pero prefiero no decirle nada, con tal de que tenga un regalo de cumpleaños para mi estoy bien porque quien en su sano juicio se quejaría, ¡exacto! nadie, y si lo hiciera es que es una persona estúpida.

Delicadamente me ayuda a bajar del auto, mala idea, porque al pararme siento mis orines salirse, ¡que vergüenza! rápidamente pego mis piernas para aguantarme.

—Necesito ir al baño —digo al fin, pero con dignidad, aunque con un poco de desesperación.

—Ya lo sabia—¡¿Es en serio?! tanto que me costo disimular para que el de una vez supiera. Jamas pensé que un embarazo fuera tan difícil, me trato de esforzar pero parece imposible, ya estoy cansada de vomitar y los malditos mareos que me dan aveces, solo espero que mi hijo se vuelva profesional y me de todo lo que quiera, porque tenerlo durante nueve meces no es ni va a ser fácil.

Gruño enojada, entonces para que carajo pregunto que tenia, si es que ya sabia.

—Princesa, no te pongas enojadita, te ves perfecta aguantando, incluso me llego a excitar —esto ultimo lo dijo en susurro ¡pervertido! lo ultimo que quería era aquello, pero que se puede hacer, al menos me veo sexy aguantando mis ganas de orinar.

Me guió rápidamente hacia un lugar desconocido ¡que asombroso! que no se me note el sarcasmo, pero es en serio, ni siquiera me ha desatado la venda de los ojos, y ademas mis orines se están saliendo de gota en gota, y por lo tanto no estoy muy feliz en este momento, no se como es que hacen en las películas las mujeres embrazadas para parecer perfectas, todo es una total mentira que toda adolescente cree.

Cuando por fin orino en el lugar "desconocido" que es un baño improvisado por Wyatt, me relajo. Solo espero que no me haya visto orinar, porque según el estaba de espaldas, aunque es muy difícil creerle aquello aun hombre. El lugar debe de ser un bosque o un jardín, porque hay pasto, aunque en algunos lugares no, y el ambiente es tranquilo no hay ningún ruido, aunque a veces suenan grillos, a los cuales le temo bastante, así que espero que no se acerquen porque así mi cumpleaños estaría completo.

—bueno supongo que ya llego el tiempo de que te muestre la sorpresa —oh vaya, ¿en serio? y  lo peor es que todavía "supone" —Tranquila, veras que valió la pena esperar —dice, por fin desamarrando la venda.

¡oh dios mio!... ¡es hermoso!, hay una mesa para dos en medio de un pequeño bosque, por eso el sonido de los grillos, y ahí lamparas por todos lados, esto sin duda es el mejor cumpleaños de todos, nadie había hecho esto por mi, se veía tan intimo y personal, que de seguro demostraba que lo había hecho con mucho esfuerzo. Sin poder evitarlo suelto algunas lagrimas contenidas desde el primer momento en que vi esto.

—es hermoso—digo en voz baja, al fin mi voz sale, simplemente no tengo palabras, y unas horas antes estuve a punto de dudar de él, simplemente me siento mal por eso.

—ven, sentémonos. — dice alargando la mano hacia a mi, para que la reciba lo cual hago sin dudar.

Pasamos horas charlando y la comida estuvo deliciosa, ya casi van hacer las doce de la noche, pero no nos importa, estamos metidos en nuestro propio mundo, y eso se siente fantástico.

Veo de repente como Wyatt se para y luego se arrodilla al frente mío ¡oh por Dios! Ni siquiera a comenzado a hablar y yo ya estoy hiperventilando.

"Vamos relájate, relájate" me digo a mi misma tratando de tomar el control de la situación.

Wyatt se aclara la garganta y empieza:

— Amelia se que hace pocos meses nos conocimos, tú estabas ahí de pie viendo el televisor, mientras yo sinceramente no dejaba de ver tu culo — suelto una carcajada ante esto, aquello no me lo sabía— y cuando te diste vuelta ¡maldición! eras increíblemente hermosa, por lo cual no pude durar tanto tiempo enojado contigo, pero al pasar el tiempo me di cuenta, de que tú eres la única persona con la que quiero estar, y no me importa que estés embarazada, amaré a ese bebé como si fuera mío, yo te quiero demasiado,como para dejarte ir, te has vuelto vital en mi vida, me has cambiado totalmente, así que ¿Amelia Smith aceptas ser mi princesa?

Me quede sin palabras, esto era realmente impresionante, todas esas palabras fueron muy hermosas.

Solo pude asentir y lanzarme de una vez a sus brazos, él fácilmente me sostuvo, yo no podía parar de reír y él tampoco. Los dos estábamos muy felices.

Ya unos minutos después nos encontrábamos acostados en el césped, el detrás mío y yo entre sus piernas, solo estábamos ahí, en un silencio tranquilizante y para nada incómodo, me sentía en paz.

— ¿Qué fue lo primero que pensaste al verme por primera vez? — rompió el silencio Wyatt; ay no, si supiera todo lo que pensé de él, cosas para nada buenas e inocentes para alguien de mi edad.

— No te dire, me lo llevaré a la tumba — es obvio que no le iba a decir, pero tampoco significa que le iba a mentir.

— ¡oh vamos! No es para tanto, pero no te presionaré, tarde o temprano lo dirás —
lista mental: jamás decirle a Wyatt.

Estaba apunto de cerrar los ojos a causa de sus caricias en mi vientre un poco abultado.

— estaba pensando, si te gustaría retomar tus estudios después del embarazo — abrí los ojos como platos. Desde hace mucho que no pensaba en aquello, incluso no lo veía como algo importante por ahora, pero no me puedo quedar como una mantenida en la casa de Francelena, no podía darle un mal ejemplo a mi hijo, tenía que estudiar para ser profesional.

— si, entraré a estudiar, pero es mejor pensar en eso después— digo queriendo poner fin al tema, sin embargo él sigue.

— hay un instituto al lado de mi universidad, estudiarás ahí — lo mire con una ceja enarcada, ni siquiera me pregunto, más bien me ordeno. Pero no lo contradecís porque ya sé que solo quiere protegerme, y eso me gusta.

— ajam — dije, como tratando de no discutir más sobre el tema.

Apoye mi cabeza a su pecho, mientras que él me apresaba más en sus brazos,   ya debía de ser muy tarde, aunque ninguno de los dos nos importó el tiempo, lo único que espero es que la casa no esté en llamas.

Cierro los ojos tratando de evadir todos esos pensamientos que solo hacen preocuparme más. La noche fría es hermosa y aún más con las estrellas, solo espero que esto nunca se acabe, sé que habrá obstáculos pero sabremos manejarlos y aprender de ellos.

El sonido de mi celular me saca de mis pensamientos. Wyatt contesta por mi, por lo que sus manos se alejan de mi cuerpo, y siento el vacío.

Volteo para ver mejor de lo que le están hablando y me encuentro con sus dedos en el entrecejo, parece frustrado.

— si ya vamos — cuelga, y espero paciente a ver qué dice.

— es Cinthya

Gracias por sus sugerencias, aunque algunas hallan sido algo crueles 😂😂😂

Aquí les dejo otro capítulo más, y espero que voten y comenten
Y ya saben por si ven alguna falla ortográfica

Los quiero...
Hasta la próxima actualización

Sólo quiero... *terminada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora