Capitulo 12 «especial»

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POV ERIC

Si la mirada matara ya estaría tres metros bajo tierra. Amelia no deja de mirarme mal, no la culpo, se que fue mi culpa.

Cuando le dije que quería que saliera conmigo, era una forma para enfrentar a mi padre, y ella aceptó. Pero lo que no me imaginaba era que iba a estar embarazada de mi, esa noche estaba ebrio y enojado porque mi padre me había obligado a casarme, y termine acostándome con ella, lo recuerdo todo, su piel, su olor, su sabor, me volvieron loco, pero ya es tarde.

Mi mayor error fue no haberla apoyado, tenía miedo, tengo que aceptarlo, y mi padre no estaría orgulloso de aquello, y por culpa de mis impulsos la perdí a ella.

Tal vez mis excusas no sean suficientes, en realidad no lo son, pero quiero estar con mi hijo y con ella, pero ahora ella está enamorada de Wyatt, estoy celoso, pero le agradesco haberla cuidado mientras yo estaba teniendo problemas con la prensa.

Mi querido padre me comprometió sin saber con tanya ni siquiera la conocía, nunca me llamo la atención, a decir verdad tampoco me acoste con ella, por eso cuando resultó embarazada no le creí, pero no me quedo de otra, que hacerme responsable.

Y me sentí el ser más despreciable, aún me siento así.

Rechace a mi propio hijo, para hacerme responsable de otro, por eso obligue a tanya que le dijera la verdad a la prensa. Y sin dudarlo me fui a buscar a Amelia, pero ya se había ido.

Estaba desesperado, por eso le conté a sus padres la verdad, aunque no me esperaba la reacción que tuvo su madre, se puso súper feliz al saber que yo era el padre de su nieto.

Ya rindiéndome decidí llamarla en el aeropuerto donde me encontré con su hermano el cual me dio una fuerte paliza, me la merecía.

Pero tampoco me iba echar para atrás, los seguí y me impresionó al ver que se subían en un avión directo a Londres, el cual también me subo yo, fue fácil sobornar a la encargada para que me dejara montar.

Cuando llegue, nunca me imaginé ver a Amelia acostada en esa camilla mientras la revisaba el doctor, me sentí emocionado, pero ese sentimiento duro poco al saber de su novio o lo que sea, estaba al lado de ella sosteniéndole la mano, ese debería ser yo.

Me rechazo, lo sé, pero le dije que iba a luchar por ella, pero cada día me rechazaba, no sé cómo conquistar a una mujer, nunca lo he hecho, ellas siempre han estado a mis pies.

Ahora estoy aquí, no sabía que tenía problemas con sus padres por lo que me siento también culpable de haberles dicho donde estaba, pero su padre se veía muy mal, así que tuve compasión.

Me destrozo verla tan desolada por el accidente de su hermano y amiga, quería consolarla, pero yo no era el indicado para eso, y ella lo sabía. Por eso no me interpuse cuando Wyatt la abrazo, él está verdaderamente enamorado de ella... y yo también. Pero ahora mismo no la merezco, le hice sufrir mucho, pero tampoco me rendiré, quiero poder conocer a mi hijo, lo deseo, lo anhelo.

También me sentí mal por el accidente, tengo sentimientos aunque muy pocas veces lo demuestro, James también era mi amigo, y por mi estupideces perdí mi amistad con el.

Esta situación es incomodo todos se están matando con las miradas, estoy en un grave problema.

— hija por favor, tenemos que hablar — dice la madre de Amelia, está enojada.

Sin embargo Amelia solo suelta un gruñido, ella también está enojada, y yo confundido.

— ¿ahora si soy tu hija? Porque cuando te dije que estaba embarazada era una completa perra para ti ¿o me equivoco... madre? — la última palabra la remarcó más.

No sabía que ellos la habían tratado así, ahora me siento peor conmigo mismo por traerlos.

La cara de su padre se descompone al escucharla, parece verdaderamente arrepentido, yo no le voy a refutar nada, porque yo hice lo mismo.

— No te da vergüenza hablar así, vas a ser madre, ¿es eso lo que quieres para tus hijos? - okey ahora si se pasó.

La cara de Amelia se pone súper roja, de la rabia.

- ¿en serio? - levanta la voz - Lo dice al mujer que abandonó a su hija cuando más la necesitaba, pero eso no te basto, también dejaste solo a tu hijo, que en este momento está entre la vida y la muerte, pero a ti solo te importa la maldita imagen, nunca mirarás más allá de tus narices, ahora lo más deseo en este momento en nunca llegar a ser como tu, una persona falsa e hipócrita con todo mundo, tal vez perdí mi dignidad para todo el mundo, pero prefiero eso, a que mi hijo me odie toda la vida, y al final mirarme en el espejo y saber que no tengo nada.

Todos nos quedamos callados, hasta que su padre no aguanta más, y se hecha a llorar, la dos señoras desconocidas también lloran en silencio, mientras la madre de Amelia está en estado de shock, yo solo bajo la mirada avergonzado, no sabía que aquello había hecho asado, ahora me siento mucho más miserable por haberla dejado sola.

- ¡Que esta sucediendo aquí! - dice legando a la habitación un Wyatt enojado, al ver las lagrimas y la cara roja de Amelia, el sin pensarlo se dirige a ella y la abraza, siento una opresión en el pecho, yo debería ser el, pero no, solo soy el imbécil que la lastimo.

- ¿Quienes son ellos? - pregunta su madre, como si lo que le dijera su hija no le hubiera importado, no puedo creer que ella sea isa, no se supone que las madres son las que mas tienen que querer a sus hijos, pero al parecer a ella le da igual.

La señora mas refinada se gira hacia ella y le tiende la mano.

- Mucho gusto soy Francelena Miller, usted me debe conocer, mi difunto esposo, era el dueño de la empresa mas grande de Europa, incluso usted se me hace conocida- la madre de Amelia abre los ojos como platos - oh claro, mi esposo le dio trabajo al tuyo hace mucho tiempo, al parecer ustedes estaban muy desesperados, seria una total decepción que mi esposo los viera, saber que cambiaron tanto.

Amelia agranda sus ojos, sorprendida, en realidad, todos lo están, nadie se esperaba tal confesión, al parecer la han puesto en su lugar, al fin alguien le ha bajado el ego.

- Por supuesto, también soy la que recibió a su hija, dándole un trabajo, porque no tenia como mantener a su hija, ya que sus padres no la apoyaron, ustedes dos son una total vergüenza como padres.

- Les quiero pedir amablemente que salgan de la habitación, su hija no puede tener emociones fuertes, y ustedes le provocan muchas - dijo con mucha educación la señora Miller, quien luego se dirigió a la otra señora - ven conmigo, el doctor hablara con usted sobre el caso de su hija - oh, ella era la madre de la amiga de Amelia.

Todos salen de la habitación, después de calurosa discusión, solo quedamos los tres, por la mirada que me da Wyatt quiere que yo salga de la habitación, mientras que el trata de calmar a Amelia, quisiera poder quedarme, pero ya perdí mi oportunidad, ahora solo me queda esperar que ella decida, si tengo o no probabilidades para tener a mi hijo.


Bueno aquí tienen el prometido capitulo, voy a ver si hago uno también desde el punto de vista de Wyatt, pero si lo hago, les advierto que sera empalagoso.

bueno, espero sus votos y comentarios sobre la verdadera cara de Eric...

¿QUIEREN AMELIA LE DE UNA OPORTUNIDAD A ERIC, PARA RESPONSABILIZARSE DE SU HIJO?

HASTA LA PRÓXIMA ACTUALIZACIÓN

Sólo quiero... *terminada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora