Capitulo 23

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Aún estoy en el hospital, todo esto me cayó como agua fría, todo iba tan bien, ¿Por qué ahora?

No voy a ver a mi hija crecer, no estaré en sus cumpleaños, cuando se le caiga su primer diente, el primer día de colegio. Me perderé lo más importante de mi vida.
No se que hice para merecer esto, o tal vez esté sea sólo un obstáculo más, o tal vez solo sea... el final.

Se suponía que me iba a esforzar, pero siento como si hubiesen arrancado toda la fuerza y los sueños que tenía, dejándome otra vez en el principio, sin ninguna esperanza. Mi corazón quiere luchar, pero mi cabeza solo me dice que me rinde, que nada de lo que haga valdrá la pena.

Wyatt me mira con dolor, sabe que me estoy dando por vencida.

— una vez escuché una frase en la universidad, no sabía que significaba, pero ahora si la entiendo perfectamente — dice captando mi atención.

— ¿cuál era? — preguntó curiosa

"Después de escalar una gran montaña, uno encuentra qué hay muchas otras montañas que escalar" es de Nelson Mandela — dice con lágrimas en los ojos, odio verlo así, pero amo ver que no se ha rendido. Eso me ayuda a permanecer de pie.

No te puedo perder, no haré que te tengo completamente — solloza, lágrimas abundan de sus ojos, jamás lo vi llorando, y es muy duro verlo así, sabiendo que tu eres el culpable de su sufrimiento.

Su brazos me abrazan fuertemente, como si no quisiera soltarme nunca, mis ojos están aguados, estoy tratando de no llorar, pero es imposible. Mis lagrimas siempre estarán ahí.

De repente se separa de mi, y sus manos acunan mi rostro. Sus ojos azules me miran con tanta intensidad, que tengo miedo de romperme al frente de ellos.

— promete que lucharás — dice con voz seria.

Ya no lo soporto y exploto.
Dejo salir todo, lloro fuertemente, esto es muy duro, no soporto la idea de no seguir perteneciendo en su vida, de no seguir siendo suya. No puedo con esto.

Sus brazos vuelven a rodearme, apoyo mi cabeza en su pecho. Los dos estamos destrozados por esta noticia, que nos cambiará completamente.

Cuando nos separamos, mis ojos ya no tiene lagrimas, ahora están hinchados, pero me siento un poco mejor.

— no me has respondido — dice Wyatt.

Le sonrió, y con dirijo mi mano a su mejilla, quitando la última lagrima, sin embargo cuando la voy a quitar él me retiene apoyando su mano en esta.

— Está bien, de todos modos también hay una pequeña probabilidad de que eso no suceda — le sonrió.

— esa es mi chica

**********

Mi teléfono suena, debe ser mi hermano, cada cinco minutos me llama para saber cómo estoy. Aunque están siendo exagerados, prácticamente me prohibieron todo lo que pudiera causarme emociones fuertes. Ya no me dejan ver películas de amor ¡exagerados! Y lo peor, tampoco me dejaron terminar de leer " Yo antes de ti", aunque les dije que ya me sabía el final, no aceptaron.

Hace poco que salí del hospital, y por un momento me sentí libre, reiteró lo dicho, solo por un momento, ya que apenas llegamos a la mansión de una vez me encerraron en la habitación.

Aunque siendo sincera, esto me está gustando mucho, o sea, me traen la comida, hacen todo por mi, ¡Me siento la reina del mundo!

Una cosa que en total no me gusto, es que ya no puedo estudiar, por recomendaciones del doctor, ya que es muy arriesgado. En resumen, este año me quedaré burra.

Sólo quiero... *terminada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora