Cap No 2

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El se alejaba y yo quedaba con una sonrisa tratando de entender lo que acababa de pasar.

Entre a el aula 7 como marcaba mi horario la primera clase era Física, mi materia favorita. Me senté en el puesto del centro ya que era el único vacío todo ya esta lleno.
Sonó el timbre y yo me agache a sacar de mi maleta un plumón y un cuaderno y mientras tanto escuché al profesor,- buenos días mis alumnos favoritos de último año, espero tengan un buen día-, la voz se me hizo algo familia pero no importó me senté bien en el puesto para ver bien al profesor.
Mis ojos se abren cuando me encontré que el profesor de esta clase era nada más y nada menos que el chico guapo que me ayudó a recoger mis cosas hace un momento.

-Tenemos a una nueva compañera entre nosotros-, tomando la lista miró y leyó,- la señorita Wendy Ross-, me puse de pie el me miró y guiñando el ojo y una sonrisa pícara dijo,- un placer tenerla entre nosotros-, podría jurar que me coquetea, pero no quiero juzgar ni tener prejuicios es solo una impresión extraña.
Me entristece un poco que sea mi profesor, ya que cuando lo vi en el pasillo pensé en lo guapo que era y qué tal vez esta vez sería mejor que lo que fue con Peter.

Paso la clase, tome mis cuaderno y espere a que todos salieran, me acerque al profesor quien aún estaba en su silla mirando unas hojas.

-Señor profesor, perdón no recordar su nombre-, el me interrumpía cuando decía esto.
-Soy el Sr. Wesley, mucho gusto-, me sonrie lo cual hizo que mi cuerpo inconcientemente le devolviera la sonrisa.
-Claro, soy... Wendy-, estoy nerviosa pero que tonterías digo, el sabe mi nombre.- Claro como lo dijo hace un rato a la clase-, me sonrojo.
-Claro que lo se-, me responde riendo suave.

-Okey solo quería preguntar, se que ya llevan un ritmo y son seis meses de clase que no estuve aquí, abría forma de adelantarme o tener los temas?

-No debería de hacer esto-, se puso de pie recogiendo tu maleta del suelo y saca un enorme libro.- Aquí tengo todos los temas te lo prestaré y por favor devuélvelo la otra semana, sino para tu suerte no tendrás clases.

-Claro muchas gracias...-, miró el enorme libro lo recibo y salgo del aula diciendo,- hasta luego.

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La semana paso y a mi sorpresa eso de tener amigas no era lo mío, se me han acercado algunos chicos pero siempre con segundas intenciones. Algunos días solo empiezo a llorar al recordar a Peter, a la vida que extrañaba tanto tener.
Tomo mi celular y sin pensarlo dos veces estando sentada fuera de la escuela en las escaleras decido escribirle a Peter.

Hey, no me olvides porque ytu no eres fácil de olvidar.

Luego espere un poco, pero recordé que el horario era diferente.
Solté un suspiro y empecé a llorar.

-Estas bien?-, escucho una voz masculina.
Levante mi mirada y limpie mis lágrimas mirando a la persona.
Es una chica, tiene lentes rojos y su cabello es ondulado, rubia, algo baja de estatura.
Se sentó a mi lado.

-Si, es solo... Mucho gusto soy Wendy-, decía finjiendo una sonrisa.

-Mucho gusto soy Katherine.- Me sonríe.-Se que la escuela puede ser lo peor, pero sonríe es el último año.

-Eso haré, gracias-, limpiando mis ojos y sacando un espejo de mi maleta mirando que no fuera notoria mi tristeza.

-Ugh eso no debería ser legal-, dice Katherine mirando a la gran zona verde de césped que ahí frente a nosotras.

-Se que hablas?

-El profesor Wesley, esta realmente bueno, y es tan joven-, dice Katherine mordiéndose el labio.

-Si lo es-, miró al profesor que está jugando con otros chicos con un balón de soccer.

Me quedo mirándolo un tiempo extenso mientras Katherine me comenta de hace cuánto está en la escuela el profesor al parecer también era nuevo pero era demasiado serio en su trabajo, o eso creían todos.

De alguna forma noto que lo estaba observando demasiado así que volteo a mirarme y me sonrió. Asustada sonrió muy poco y esquivo su mirada.

-Es real lo que estoy viendo?-, dijo Katherine interrumpiendose sola.

-Que de que hablas?-, digo sonrojada.

Ella me mira con los ojos muy abiertos,- el profesor te sonrió!

-Que?! No, pues lo normal...-, lo vuelvo a mirar, ahora es el momento en que nuestras miradas se cruzan demasiado, y el con una sonrisa cada vez que se da cuenta que yo también lo miro.

-Eso no es normal-, dice ella.-Creo que seremos buenas amigas.

-Claro que si-, le sonreí.-Tengo que irme mi tía ya está aquí-, digo mirando mi celular.
-Bien, adiós y placer-, responde Katherine mientras me alejo.

En la noche ya lista para dormir, mi celular sonó Peter respondió.
Abrí el mensaje el cual decía.

Tampoco eres de olvidar fácil, me he arrepentido de lo idiota que fui contigo, lo siento. Siento mucho que nuestra despedida no fuera la correcta. Me gustaría devolverme al momento en que te tenía enfrente y hacerlo mejor.

Ese mensaje me hizo sonreír mucho, respondí y acostandome con una gran sonrisa me quedo profundamente dormida.

Derrite mi corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora