Derrite mi corazón

Capítulo 47

Han pasado tres días, en los que no he podido saber nada de Peter, solo he tenido llamadas de Nico, no le suelo contestar por eso se que ha intentado contactarme. Igual estaba tratando de no pensar en esta noche esos días, y para eso acompañe a mi tía a hacer todas las cosas que necesaria para la boda. 

Me encontraba ya cerca a casa, acompañada por mi tía en el Starbucks que quedaba a unos diez minutos de casa. 
Saliendo del lugar yo abrí la puerta para darle paso a mi tía, quería que saliera primero, cuando mire afuera vi que en estaba entrando Raquel, se veía muy feliz. Pero para mi en mi cabeza fue una gran mierda, realmente no quería saber nada de esa noche y menos a quien me hizo hacer todo eso, para luego irse con Nico y dejarme sola con Peter. Una parte de mi estaba molesta con Raquel.

-Wendy! que bueno verte! Como te termino de ir en la fiesta?-, me preguntó con emoción detenida frente a mi, acariciando mi hombro con una sonrisa.
-Supongo que pudo haber sido peor...-, le respondí sin emoción alguna. Lo contrario a ella.
-Bueno después de todo tengo que agradecerte? Nico a querido quedar conmigo hoy, en la fiesta pudimos conectar y hablar tan bien! Quien diría que no soy la única que odia a Maya!?-, dijo Raquel acompañado de una risa.
-Ella no es una persona fácil de querer-, le respondí, en eso escuche a mi tía gritarme desde el auto;- Wendy!! Vamos ya que Sam nos espera!
Raquel y yo volteamos a verla,- bueno tengo que irme!-, camine y salí de el local.
-Espero sigamos en contacto!-, dijo Raquel antes de seguir su camino dentro del local.
Cuando la mire ella ya estaba en la caja haciendo fila. Seguí mi camino al auto, y cuando me senté en el auto y cerré la puerta mi tía preguntó quien era ella.
-Ella es... Ella es quien siempre a querido estar con Peter... Ella me amenazaba, pero parece que todo esta bien...-, le respondí a mi tía mirando a Raquel desde mi lugar.
-Ella no es el tipo de amiga que hubiera tenido en la escuela-, rió un poco y añadió.-Pero las amenazas... Cuéntame de eso!
-No es nada importante, mira-, saqué el celular buscando los poco pero raros mensajes que venía recibiendo desde que me mude aquí.
Ella empezó a leer agarrando mi celular en sus manos. luego d unos minutos bajo el celular y soltó un suspiro, miro a Raquel y me dijo;- Ella te dijo que fue quien te mando esto?
-No... Pero es obvio que es ella, mira!-, le señale el primer mensaje,- no quería que me acercará a Peter! Ella es la única persona tan obsesionada con Peter para hacer eso.
-Tal vez, pero creo que tienes que preguntarle por que hizo eso, y si de verdad fue ella-, dijo mi tía devolviendo me el celular y prendiendo el motos para arrancar.
-Esta bien... Lo haré-, respondí con la voz arrastrada. 

Llegamos a casa y el atardecer era tan lindo, que todo el barrio y el sector reflejaba lo naranja en todas partes, era muy bonito, así que al salir del auto tome algunas fotos del cielo en mi celular.

Mi tía estaba haciendo lo mismo, después de esto empezamos a meter las cosas en casa, cuando ya solo faltaba una bolsa donde estaba el vestido, mi tía me permitió ir a buscar a Sam a la cocina y mantenerlo ocupado mientras ella escandia el su vestido en mi habitación. Pero Sam no estaba allí, entonces empecé a buscarlo y me di cuenta que no estaba dentro de casa, entonces salí y avise a mi tía que era segura su entrada. 

Lo dejo en mi habitación, y cuando iba saliendo la puerta de abajo sonó. Me asomé y vi a Sam, en eso le dije a mi tía mientras llegaba a hacerse a mi lado,- llegó Sam, en el momento-, me interrumpí al ver que tras de el entraba Peter con bolsas de regalo en sus manos, parecidas a las que tenía también Sam en sus manos. 
Me dieron muchas ganas de salir corriendo a Peter y abrazarlo, pero cuando el impulso de dar el primer paso también paso por mi cabeza el rechazo y lo injusto que había sido en la fiesta. 
Mi tía camino a las escaleras y al ver que no la seguí se detuvo, al verme mirar tal vez con una expresión de susto a Peter mientras el caminaba a la sala de estar tras Sam sin darse cuenta que yo estaba arriba.
-Quieres bajar?-, preguntó mi tía volviendo a mi lado acariciando mi hombro.
-S... Si... Tal vez mas tarde.
-Que paso contigo y Peter en esa fiesta?-, me dijo con un tono de voz mas serio.
-Nada tía, realmente nada...-, no le pensaba contar lo que paso con Maya o lo que casi pasa con Nico esa noche.- Esta bien bajemos...
-No señorita-, se interpuso en mi camino y dijo,-Me cuentas lo que esta pasando o tendré que ir directamente a hablar con Peter.
Solté una ola de aire y tome fuerzas, cerré mis ojos y lo dije;- esa noche estuve con Nico, no llegamos a ninguna otra base mas allá de un beso pero Peter no le agrado eso y decidió tomar distancia.
-Porque fuiste con ese chico? No logro entender! Pensé que te gustaba Peter.
-Y si, si me gusta mucho. Pero las cosas no han ido bien.
-Entonces por que no están bien, tu no tienes por que irte con otra persona!-, me dijo mi tía molesta.
Crucé mis brazos y le pregunte;- Pensé que para ti era mejor que Peter y yo estuviéramos de lejos...
-No estuve feliz por lo que hizo, al esconderme el hecho que mi madre estaba al borde de la muerte. Pero en el momento en que lo conocí fue un buen niño... Que demostraba cuidarte, y quererte. Eso me agrado de el-, sonrió y suspiro al mismo tiempo.
Me quedé un momento en silencio, por que si sabía estas cosas, pero estaba acostumbrada a siempre ver en la balanza mas grandes las cosas malas, y las buenas casi nunca las veía. 
Si tenía siempre en cuenta que podía contar con el, pero no tenía en mente las veces que lo había hecho, que había estado para mi, aún cuando las cosas entre ambos andaban mal.
Mi mirada cayó al piso de abajo, no sabía que responder, o que era lo que quería escuchar mi tía. Así que espere a que dijera algo. 
-Yo estaré abajo con mi prometido...-, dijo mirándome sobre su hombro mientras daba la vuelta para bajar las escaleras.-No es necesario que baje.

Me quedé quieta sin saber que hacer al ver a mi tía bajar, yo estaba molesta con Peter pero también estaba algo resentida por que no me hubiera dicho que si aquel día en ese armario y solo se molestara pro algo que esa noche el también había estado haciendo con Raquel, y no solo con Raquel sino también con Maya.
Pero pensándolo el siempre tenía que buscarme, las cosas se daban cuando el me buscaba y yo... Bueno, apenas le escribí cuando estábamos distanciados. No se compara al que el se hubiera arriesgado a ir de intercambio solo por mi. 
Creo que me tocaba a mi luchar por el.

Tome fuerzas, puse una sonrisa en mi rostro y empecé a bajar por las escaleras, mentalizada que no, puede ser un si seguro en una segunda.