Estoy aun en el hospital, ya estamos a sábado, mi abuela no mejoraba, seguía aun igual desde el martes. Le mandaron ha hacer más exámenes en donde vimos que su cerebro esta deteriorado, aun sigue luchando por seguir. Esto nos tenía a todos asustados, tristes y en duda, ya que el doctor nos menciono la edad de mi abuela y aun si volviera a estar consciente solo sus oídos estarían con nosotros, no podría volver a ser la de antes, y todos sabíamos que mi abuela nunca fue una mujer de quedarse en un solo lugar, siempre fue muy dominante y le gustaba hacer todo por si sola, hasta el punto de el aseo en los trastes, ella prefería lavar todo, segura de que le quedara muy bien lavado sin ayuda de nadie.
Todos estábamos en un enorme suspenso, porque en el fondo todos sabíamos cual era la mejor decisión , pero aun no estábamos listos para despedirnos, realmente no... Pero tampoco era justo dejarla a la mitad de su vida solo por el egoísmo de nosotros como familia. Yo miraba a la ventana para evitar contacto visual con mi abuelo, o mi tía Ester. Sam estaba en la cafetería haciendo llamadas para aplazar la fecha de la boda, por lo que solo quedaba una semana, la aplazaron dos semanas mas.
Mire mi celular, estaba pensando en que necesitaba a un amigo a alguien a mi lado, pero también algo que me distrajera, yendo en busca de los mensajes con Peter, empecé escribiendo "Creo que necesito apoyo aquí en la clínica... Estamos por escoger que será de la vida de mi abuela". Pero antes de enviar el mensaje escuché a mi tía romper el silencio comentando:- Papá quieres seguir esperando a que despierte?
Voltee a mirar a mis abuelos, mi tía ahora estaba al lado de mi abuelo, acariciando su hombro mientras limpiaba sus lagrimas,- nunca voy a perder la esperanza. Ella es el amor de mi vida-, cuando mi abuelo empezó diciendo esto, me acerque a la cama de mi abuela, viendo como mi abuelo se quebrantaba en llanto mientras seguía hablando,-siempre imagine que cuando se fuera de este mundo sería al mismo tiempo en que yo lo hiciera,- soltó una risa triste.- Es imposible que fuera así, pero así siempre lo quise. Ella en cambio, siempre me dijo que por ahorrarme el dolor de la perdida, permitiría que yo me fuera antes, ella pensaba que era mas fuerte que yo. Lo que era verdad... Siento que no puedo perderla, pero pensando en que esto fuera a la inversa se que ella sería capaz de hacer lo que fuera mejor para mi que para ella-, termino de decir poniendo su mano en el rostro tapando las lagrimas que salían.
-Ella siempre dejándose de ultimo lugar... Seguro pensando en nosotros ella preferiría seguir viviendo-, dijo mi tía.
-Pero no sería feliz-, añadí yo en un tono bajo cruzándome de brazos, con mis ojos muy llenos de agua.
-No lo va a ser... No en esas condiciones-, dijo mi abuelo agarrando la mano de mi abuela se sentó en la cama a su lado.
-Te daremos un momento para pensarlo papá-, dijo mi tía caminando a la puerta extendiendo su mano, invitándome a salir con ella.
Cerré a puerta tras de mi,-vamos en busca de Sam?-, asentí a la sugerencia de mi tía.
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Mi tía estaba frente a mi en la mesa circular y al lado mío estaba sentado Sam. Los tres en total silencio con tazas de café sobre la mesa, que aun ninguno probaba.
-Que crees que el abuelo escoja?-, le pregunté a mi tía nerviosa moviéndome en la silla con mis ojos aguados.
-Creo que lo mismo que tu y yo decidiríamos para ella.- Una parte de mi se estremece y la otra no se sorprende empezando a sentir un nudo en mi garganta.
Mi tía y Sam se dieron cuenta en el momento en que empecé a moverme bastante incomoda en la silla y a sentir querer salir corriendo. Mi pecho se sentía pesado sobre mi corazón. Puse mi mano sobre mi corazón y decidí empezar a llorar, pensando que ya era suficiente aguantar desde el momento en que baje. Puse mis codos en la mesa para que mis manos quedarán e mis ojos.
-Quieres ir a casa? Estas bien?-, dijo Sam. Yo asentí sintiendo que mi celular vibraba, era un mensaje entrando.
No leí el nombre, supuse que era Peter, siendo así entre rápidamente a su chat en el que decía: "Como va todo?"
Yo respondí; "Ya ven al hospital, realmente te necesito".
Bloqueé el celular y respondí a Sam, pues mi tía y el aun me miraban esperando una respuesta,-no, quiero estar aquí, no quiero estar en casa sola con esta incertidumbre-, le dije a Sam sonriendo le aun con tristeza en mis ojos, y el me devolvió esa pequeña sonrisa. Tome aire y añadí,- cuando ustedes llegaron aquí sentí alivio y por un momento mi esperanza creció, sobre todo cuando dijiste que ellos juntos irían a conocer Argentina... Y hasta llegue a sentir que la abuela despertó en ese momento-.
-Lo se, yo tenía la ilusión de que estuviera en mi matrimonio, ayudándome con todo y haciéndome sentir mejor si el estrés llegaba, como siempre lo hacía-, dijo mi tía.
Pasamos medio hora allí abajo, hasta que Sam sugirió subir a ver como estaba mi abuelo.
Cuando llegamos al pasillo donde estaba mi abuela, vimos de pie hablando con una doctora a mi abuelo mientras lloraba. Yo empecé a caminar rápido tratando de dejar atrás a mis tíos. Llegué a mi abuelo agarrando su brazo de gancho, pero cundo llegué la doctora se despidió de mi y de mi abuelo alejándose. Volteé a ver a mis tíos y ya estaban a dos pasos de nosotros.
-Que paso abuelo?-, le dije yo asustada.
-Decidí-, dijo el con una voz ronca, con lagrimas en sus ojos y soltando un suspiro.
-Que decidiste abuelo?-, el tomo aire. Y respondió;- hoy ya se acabaron las visitas, pero mañana a las 10, tendremos 2 horas para despedirnos de ella.
Todos empezamos a llorar, abracé a mi abuelo y sabiendo que tan vez tenía dudas sobre lo que decidió le susurre al oído,-es lo mejor para ella-, sentí que asintió con su cabeza entre mis brazos.
Mi tía sugirió que se quedaría esta noche con mi abuela, y mientras ellos hablaban con el resto de la familia, yo fui a el rincón del pasillo, sentándome en el suelo y apoyando mi espalda en la pared. Soltando todo mi dolor allí, sin pensar en más era el momento para mi, y aunque no quería estar sola en casa, si necesitaba un momento para mi y no podía esperar a llegar a casa. Sobre mis rodillas crucé mis brazos y entre ellos empecé a sollozar. Hasta que escuché una voz masculina,- todo esta bien Wendy? Que ha pasado?-, sentí que se sentó a mi lado y acaricio mi espalda en ese momento tome aire aun con mi rostro entre mis brazos y decidí levantar la cara.
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Derrite mi corazón
Teen FictionLas cosas no terminaron, apenas comenzaron. Wendy una chica común con muchos problemas como cualquier persona sigue su travesía descubriendo como vivir y seguir su vida. una nueva historia y una misma persona. La secuela de corazón de hielo. Si no h...