-Lo nuestro tiene que terminar- sentenció el Rumano dejando todo en silencio.
Llevaban días discutiendo, la insistencia del rumano en los últimos días respecto a la diferencia de edad entre ambos había generado ya varios problemas.
-¿Qué?- preguntaste al borde del llanto.
-______ eres 10 años menor que yo, deberías de buscarte a alguien de tu edad, nosotros ya no funcionamos como pareja- dijo
-¿Vas a tirar a la basura 2 años de matrimonio?- preguntaste – Porque la edad no te importo mucho cuando nos casamos.-
-¡Pero es que ya no puedo estar con una niña, porque eso es lo que eres ______!- grito molesto.
Se dirigió a su cuarto y minutos después tú lo seguiste para encontrarlo empacando su ropa en una maleta.
-No, no y no- dijiste sacando la ropa de esta.
-______ entiéndelo por favor, se acabó- sentencio.
-Sebastián por favor no lo hagas no nos dejes- dijiste llorando, esperando que el llegase a entender tu oración.
Mas al parecer Sebastián no logro entenderlo y se marchó de la casa, dejándote así, con el corazón roto.
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-Aun no logro entender porque lo hiciste- dijo Evans observando a Stan.
-Entiende que no le seguiría arruinando la vida más- contesto.
-Pero la amas, ella ha sabido llevar lo de tu fama, las giras ¿Qué es lo que quieres?-
-Le llevo 10 años Chris, 10- repitió.
-¿Y desde cuando te importa eso?-pregunto.
-No es justo, ni siquiera está bien y no quiero lastimarla más, el día que me fui dije cosas que no quería y me partió el corazón haberla hecho llorar- se asincero pasando las manos por su cabello.
-¿Qué te dijo ella?- volvió a preguntar Chris.
-Solo dijo "No nos dejes por favor"-respondió.
-¿Nos? ¿Tan siquiera comprendiste lo que te quiso decir con eso?- cuestiono un divertido Evans.
Sin embargo Sebastián solo frunció el ceño esperando que su amigo le iluminara.
-Pedazo de idiota, tu esposa técnicamente te dijo que está embarazada y ni siquiera lo entendiste- cuestiono.
Fue ahí cuando Sebastián comprendió, se levantó rápidamente y salió de la casa de Evans, en la cual se había hospedado los últimos días.
Por tu parte estabas acostada en tu cama, como toda la última semana procesando aun como el idiota de tu marido te dio una estúpida excusa para dejarte.
Escuchaste unos fuertes toques en la puerta principal pero no pensabas abrir, así que solo seguiste observando tu patio a traves de la puerta corrediza que había en tu habitación.
Dejaron de tocar pero grande fue la sorpresa cuando viste a Sebastián llegar hasta la puerta y tocar de nuevo.
Tu tan solo torciste los ojos y le diste la espalda a Stan.
-Vamos ______ ábreme por favor debemos hablar- suplico.
-Tú y yo no tenemos nada de qué hablar- gritaste.
-Sé que fui un idiota y más por no haber comprendido lo que dijiste al día que me fui ______. Pero no estoy dispuesto a alejarme de ti ni de nuestro bebe- hablo.
Te levantaste de la cama y abriste la puerta para luego decirle -Vaya que tardaste- sonriendo hacia él.
-Bueno digamos que fue Chris quien me dijo lo que habías querido decir- confeso avergonzado a lo que solo atino a besarte dulcemente.
