Habría que ser muy tonto o muy despistado para no notar su sola presencia, y era obvio que todos éramos unos tontos ya que ante todos solía pasar desapercibida, hasta que un día mágicamente ves aquel aura que le roda, quedándote así perplejo a esta persona, ante su ser.
______, a quien afortunadamente hago llamar mi esposa, solía solamente ser una ayudante detrás de cámara cuando grababa I, Tonya, de ahí con conocimos y aunque desde un principio mis intenciones eran claras, conquistarla, lo tome calmado y comencé por ser su amigo, luego mejor amigo, luego novio y ahora, su marido.
Esta es más joven que yo, 8 años, solamente, mas sin embargo sabía que tenía aspiraciones y luego de nuestra boda le ayude con su universidad para que fuera aquello que siempre quiso, una gran abogada de la cual me enorgullece cada día.