La Jugada II

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—Joder, Sean

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—Joder, Sean.—Me quejo cuando Sean comienza a tomar el lugar de Disney y me cura como una jodida enfermera.

Aparto la cara al sentir el alcohol.

—Te dije que duele, capullo.

Sean suspira. —Es como dice Disney, eres una puta niñita.

—¿Hay algo que Disney no le haya dicho a Delia?

—Es culpa tuya que se volvieran mejores amigas.

Dejo escapar una sonrisa.

—Además no te enfades con ella , dejó esto aquí.—Menciona señalando el maquillaje, al ver mi expresión se encoje de hombros.—Nos servirá.

Nada ha resultado como he querido, después de darme una paliza mutuamente con Nate Mcgregor, ambos terminamos en la estación de policía, Savanna dio su declaración tras lo ocurrido y aun así solo me dieron acceso a una llamada , Sean llego unas horas después y me logro sacar, sin embargo preferí quedarme en casa él y así no preocupar más a Disney. 

Cojo mi teléfono y maldigo.—La puta batería se agotó.—Arrojo el teléfono en el mueble y me vuelvo hacia Sean.—Dame tu teléfono.

Sean me lo alcanza y marco el número de mi novia, el teléfono suena, más no deja de enviarme al buzón, maldigo por segunda vez y dejo caer mi espalda en el mueble.

—¿Por qué no descansas aquí?.—Escucho a Sean .— Así mañana Disney te vera con una mejor cara.

—¿Tan del asco me veo?

No sé porque pregunto, yo mismo me he visto la cara en el espejo, Nate Macgregor golpea jodidamente bien y no es exactamente como había imaginado  mi pelea con él en la cabeza.

Sean hace una mueca y le tomo la palabra , me duele todo el cuerpo , al menos mañana sentiré menos dolor y necesito descansar y aunque quisiera volver, no tengo la fuerza completa para ir a casa , la paliza que Nate me proporciono me ha dejado con dolores de costillas y espalda , incluso respirar duele.

Puto Nate Mcgregor.

—Puedes dormir aquí, hermano.

—¿Sabes? Cualquier amigo normal me ofrecería su cama.

Sean ríe.—Que bueno que no soy un amigo normal y no voy a darte mi cama, idiota.

Se levanta llevándose el botiquín y regresa minutos después trayendo sabanas , le hago caso y descanso luego de revisar mi teléfono y marcar un par de veces a su número, le escribo lo ocurrido en un mensaje y tras no obtener respuesta seguramente por lo tarde que es, lo dejo sobre la mesa del centro y caigo dormido en cuestión de minutos.





Todo por Disney (#1 Odio a los chicas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora