1

555 56 8
                                    

5 de Febrero

                             
Fue un día como hoy cuando te ví por la primera vez.

Era una noche oscura y fría de febrero.

Estaba regresando desde mi trabajo.

Te ví parada frente a una cafetería, que estaba cerrada.
Atrapaste de inmediato mi atención.
Que hacía una mujer tan joven y hermosa como tú, sola allí y a esas horas de la noche?

Aún no lo sé.

Me viste pasar frente a ti.
Te acercaste pidiéndome que te prestara mi móvil para llamar a alguien; dijiste que te quedaste sin batería.

Te veías agitada, nerviosa.

Yo había tenido un día muy pesado y no estaba de humor para hacerle caso a una desconocida, lo único que quería era llegar en mi cama para descansar.
Además no te conocía aún.
Nadie me garantizaba que no eras una ladrona y que no ibas a huir con mi celular.

Así que te ignoré.
Proseguí por mi camino en aquella calle, hasta que llegué frente a mi casa.

Me duché.
Me metí en la cama con el pensamiento fijo en ti.
La verdad, me sentía culpable.

-¿Y si esa llamada hubiese sido algo muy importante, algo de vida o muerte?-pensé.

Pero luego llegaron a mi cabeza los problemas de mi trabajo y, solamente por aquella noche,
me olvidé de ti.

Sin decirte adiós Donde viven las historias. Descúbrelo ahora