Apocalipsis Zeta - Parte 7: La última amenaza

MAL AUGURIO

{JACK}

- ¿Estás bien, amigo?- le digo a Kendrick echándole una mano para ayudarlo a levantarse-. ¡Cuidado!
Alzo mi guadaña y la dirijo hacia el cuello de un soldado, sesgando su cabeza.
- Vale, parece que ese era el último- informo a los demás jinetes-. Ahora, podéis marchaos. Ya nos ocupamos nosotros de la limpieza.
Empiezo a dar media vuelta pero alguien se interpone en mi camino.
- ¿En serio?- me dice Zeta sobre su caballo-. ¿Ni siquiera nos vas a dar las gracias?
- ¿Para qué malgastar las palabras?- le digo-. No estoy de humor para formalidades.
- Jack- dice Zombi, parando al lado de Zeta-. Te has vuelto todo un capullo.
- Ni que lo digas- dice el otro jinete, Zero.
- Mirad, gracias, si eso es lo que queréis oír. Ahora, volved y no os entrometáis en mi trabajo- les digo muy serio-. Nos habéis salvado, bien. Gracias. Pero no voy a volver, chicos, este es mi hogar ahora. En Yanna no me aceptarían, no aceptarían a mis hijos. Y donde yo vaya, ellos vendrán. ¿Queda claro?
- Clarísimo- responde Zeta-. Pero si ellos no te aceptan, nosotros sí. Así que nos quedamos.
No veo sorpresa por parte de los demás jinetes, así que supongo que ya lo habían hablado.
- Solo me estorbaríais- les digo.
Zeta está a punto de replicar algo cuando escucho la voz de Alex llamándome.
Corro hacia su situación.
- ¡Es Abadón! ¡No reacciona!- dice nerviosa al lado del cuerpo inerte de su hermano.
- ¡Llevémoslo a la enfermería de inmediato!

Por suerte, Abadón solo se ha desmayado, víctima del estrés y del cansancio.
- ¿Podemos hablar a solas?- me pregunta mi hija.
Asiento con la cabeza y la conduzco hasta mi despacho.
- ¿Vas a irte, verdad?- le pregunto.
Esta asiente lentamente con la cabeza.
- Sí, cuando Abadón se despierte, volveremos a Yanna. Pero no es eso de lo que quería hablar- me dice mirándome a los ojos.
Entonces sé lo que ella quiere, lo que todos quieren.
- No voy a volver, Alex. Mi sitio está aquí. Debo seguir con los híbridos y en Yanna no podríamos estar bien. La gente se asustaría, no podemos convivir juntos, aún no- le explico.
- Está bien- suspira-. Pero prométeme que pondrás más medidas de seguridad. Se está haciendo eco de tu nueva raza y hay muchas personas que no lo aprueban. Corréis peligro aquí, esto no es nada seguro. Puedo solicitar a Rachel que os consiga un sitio seguro donde podáis expandiros y evolucionar sin miedo.
- Eso no lo veo nada mal- le digo a regañadientes-. Pero ya le he causado demasiados problemas a la presidenta. No va a mover ningún dedo por mí. Ahora tiene cosas más importantes de las que preocuparse.
- Lo sé, los mutantes- Alex pone los ojos en blanco-. Pero estoy segura de que lo entenderá y podrá hacer algo, déjalo en mis manos.
- Gracias, pequeña- le digo con una sonrisa y la abrazo.

Justo cuando Alex estaba a punto de salir, las puertas se abren de inmediato.
Zero, Zeta y Zombi entran con cara de preocupación.
- ¡Jack! ¡Acabamos de recibir una transmisión de Rachel! ¡Las cosas se han puesto muy feas!- exclama Zeta.
- ¿Qué ha pasado?- pregunto sorprendido.
- Está en casi todos los canales- responde Zero colocando una pequeña radio sobre mi mesa y ajustando la frecuencia.
Una voz metálica se va aclarando.
Y lo que dice no augura nada bueno.

"El mundo ha cambiado. Ha cambiado drásticamente. Inesperadamente. Como por arte de magia. Pero nada de esto es obra de la naturaleza. Como muchos estaréis pensando, hay un causante. Y eso somos nosotros, Los Tres Grandes. Los Dictadores del Nuevo Mundo. Un mundo limpio y nuevo. La nueva era de la humanidad. Aún sigue en proceso. Esto no parará hasta que consigamos todos nuestros propósitos. Podéis seguir con vuestra patética idea de reconstruir la vida o marchar hacia El Comienzo, un lugar del que pronto os hablaremos. Ya hemos ganado. Pero no hemos acabado. No acabará hasta que todo esté en orden. Podéis seguir peleando o hacednos caso y dejar que las cosas sigan su curso, pudiendo ser de los pocos supervivientes de La Nueva Era. El Gran Alboroto está próximo. Solo vosotros decidiréis vuestro destino. Hasta próximo aviso."

- ¿Los Tres Grandes?- pregunto sin entenderlo del todo.
- Los culpables del fin del mundo- sentencia Zero.