-Alexis-jadeoo, con rapidez se dirigió hacia mi, pero tambien me movilize encerrandome en el cuarto, cubrí mi rostro con mis manos, pegué la espalda a la puerta y de deslize hasta el suelo, las lagrimas no dejaban de salir, comenzó a faltarme aire en los pulmones, la puerta detrás mío sonó, el peliplata tocaba insistente. Sentí a que alguien presionaba mi pecho con ambas manos impidiendome respirar.
-Princesita abreme-Decía con dulzura-Tenemos que hablar de esto-
-¡Vete de aquí!-grité, no quería verlo, si lo hacía se que recordaría ese momento como si lo estuviera viendo.
¿Por qué diablos salí a espiarlos?
-Es un malentendido cariño-dijo, el apodo hizo que mis lágrimas aminoraran-Sabes que no fue nada-mi garganta quemaba, quería gritar, romper todo lo que estuviera a mi alrededor.
¿CÓMO RAYOS NO FUE NADA?
-No quiero verte-susurre, una enorne burbuja se asentó en mi gargata.
-Princesita-Exclamó en voz baja
Cállate, no quiero escucharte
Sólo vete
-Alex-
No es justo si lo dices con esa voz, no debo perdonarte, me duele lo que has hecho, solo vete.
-Pequeña-
Déjame sola, yo no cometí el error
¿Por qué me hace esto?
-Mi amor-exclamó
El corazón me dio un vuelco.
En ese momento mi cuerpo se movió por sí sólo, me levante de un salto y abrí la puerta, el peliplata dio un paso hacia atrás asustado, mi mano se movió con rapidez y fuerza golpeando su mejilla con la palma abierta, al momento lleve mi mano a mi pecho. Su mejilla se pintó de rojo, la palma de mi mano ardió.
Lo había golpeado.
-L-lo siento-dije aún con lágrimas en el rostro, mi voz se había deformado y mi respiración era entrecortada-N-no quise h-hacerlo-exclamé con la mirada baja. Sonrió levemente ¿Se estaba burlando de mí? ¿Esto le parecía divertido?
¿Me odiaba ahora?
Cerré los párpados con fuerza queriendo que la tierra me tragase y voltee queriendo encerrarme en mi habitación nuevamente, arrepintiéndome de haber salido, pero el peliplata me lo impidió, rodeándome con sus brazos desde mi espalda, atrapando mi cuerpo y pegándolo al suyo.
Que mierda de vida
¿En qué momento todo se volvió tan dificíl?
Yo no pedí esto
Teniendo que esconderme en todo momento
Soportando a este hombre
Eso durara poco, no soy la chica a la que le gusta que la protegan.
Con un movimiento brusco lo separe de mi, con una rapidez inhumana entre al cuarto dejando al peliplata sin un segundo para reaccionar.
-Sólo déjame hablar-
Más súplicas de las que puedo contar se hicieron presentes esa noche, me lancé a la cama y cubrí mi cabeza con la almohada, la pierna me ardía, pero me dolía más el pecho, que no dejaba de presionarme con fuerza, me hice un ovillo e intente dormir.
Los parpádos empezaron a hacerse pesados.
No me di cuenta que caí dormida hasta que la fría brisa de la ventana llegó a mis pies, despertandome.
Voltee a mi alrededor, las imagenes de lo que había pasado unas horas atrás inundaron mi cabeza. Solte un suspiro. Mis ojos se acostumbraron a ma oscuridad permitiendome ver con claridad la habitación, mi pierna aún no me dolía. Tomé las pastillas que estaban sobre la mesa de noche y las tomé, me levanté con cuidado y comencé a urgar los cajones.
No me iba a quedar aqui.
Todos los hombres son iguales.
Siempre va a pasar lo mismo ¿Por qué esperar a que ocurra otra vez?
Me voy.
No podía estar cerca de ellos.
Todo este torbellino de acontecimientos de presentaron cuando llegó Kakashi, debo alejarme de él. Soy lo suficientemente inteligente como para buscar un escondite y vivir sin problemas. Ningún hijo debe cargar con los problemas de su familia
Mamá se quedó con papá y murió a su lado, no pasará lo mismo conmigo.
En uno de los cajones encontre una bolsita roja con dinero, unos 700 pesos, suficientes para tomar un camión lejos de aqui. La puerta no era una opcion para salir, seguramente Kakashi tenía la casa llena de seguridad y no anticipando mi huida sino previniendo la entreda de alguien, entonces recorde que no sólo debía alejarme de Kakashi sino esconderme de los Yakuzas, pegé un resoplido. Tengo que buscar otra opción.
Voltee a mi alrededor, la ventisca que entró por la ventana hizo que me abrazara por el frío.
La ventana
De inmediato recorde todas las películas que había visto, con esa idea en mente tomé las sábanas y la colcha y las amarré una con otra, até un extremo a la cama.
Esto será fácil, tal vez no tanto, la pierna no será de mucha ayuda, lo bueno es que la practica al pintar será de un punto bueno.
Lancé la cuerda improvisada por la ventana.
Perfecto, llega hasta abajo.
Guardé el dinero y me dispuse a salir.
Las pastillas, regresé por ellas.
Me senté en el marco de la ventana, tomé con fuerza mi única ancla de seguridad y me lancé, bajé poco a poco, mis ojos estaban puestos en el suelo, cuando mis pies lo tocaron, sonreí victoriosa.
Empecé a caminar hacia la carretera, las luces iluminaban el asfalto a lo lejos, será una noche muy cansada. Caminé cerca de 45 minutos hasta que llegé a la carretera,el problema es que no había ninguna parada de camion.
Que suerte la mía
Camine al lado de la carretera pidiendo aventón, cuando un aunto pasaba me hacia una señal, pero ninguno paraba.
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Hola, este capítulo se los traigo por que estoy muuuy feliz💕, México hizo historia en el fut bol, hace unas horas le ganamos al campeón mundial Alemania. Disfruten el capítulo.
Takus2010
