Capítulo 36.- Confesión

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-Tu padre desapareció-Repitió el peliplata, mis lágrimas se habían detenido de golpe, me levanté de inmediato sin saber que hacer en realidad. Antes de poder articular palabra el hombre volvió a hablar.-Nadie lo ha visto desde ayer, parece como si se hubiera esfumado en el aire, revisamos la casa, Quiroga y yo interrogamos a los empleados pero todos concuerdan en que estaba encerrado en su oficina desde hace varias horas, cuando fueron a llevarle comida ya no estaba, su auto está en tu casa y ninguna cámara tiene registro de ese momento, al parecer las desconectaron minutos antes de la desaparición-

-Debo ir a casa-logré articular mientras miraba a Draco-¿Podrías llevarme?-este asintió y tomó un casco que me aventó para que me lo pusiera.

-Yo puedo llevarte-Exclamó el peliplata.

Ninguno dirigió otra palabra al mayor mientras recogíamos lo indispensable, una vez fuera, Kakashi subió a su camioneta y nosotros a la motos de Draco, lo abracé pegando mi cuerpo más de lo necesario al suyo cuando nos miró Kakashi, quien hizo una mueca de enfado. El camino se me pasó en un par de parpadeos, llegamos y de inmediato deje el casco en las manos de Draco para correr dentro de casa. Pero Hinata me interceptó en el camino. La acaricié con cariño, cuando llegaron Draco y Kakashi a mi lado, el animal comenzó a ladrarle con fiereza a Kakashi.

-Tranquila pequeña-Ordené, entrecerré los ojos. Hinata no atacaba a la gente que ya conocía. Sacudí mi cabeza tratando de enfocarme en encontrar alguna pista del paradero de mi padre, entré la casa.

La recorrí de arriba para abajo, nada, todo estaba en su lugar, no había nada raro, todo exactamente como lo había dejado al irme, exactamente igual, revisé los botes de basura.

-¿Qué estás haciendo?-Exclamó Kakashi

-¿Cuándo te enteraste de la desaparición de mi padre?-Pregunté

-Hoy en la mañana-

-¿Dónde están los empleados?-Lo interrogé

-¿Eso qué importa?-Debemos irnos o vendrán por ti-

-No iré a ninguna parte hasta que me digas la verdad-

-¿Me perdí de algo?- La cara de Draco mostraba su confusión.

-Nos quedaremos-Declaré

-Eso no va a pasar- Exclamó el peliplata autoritario.

-¿Cuánto quieres apostar?- Inquirí con una ceja levantada y con tono amenazador sin quitar mi mirada de sus ojos furiosos.

-Esto no es un juego- dijo entre dientes, tratando de controlar sus emociones.

-¡Me importa una mierda!¿Dónde está mi padre?-Grité molesta, si no hubiera sido por la intervención de Draco, la pelea hubiera continuado.

-Vamos Alex-Dijo jalandome de la cintura-Debes descansar-caminamos por el pasillo dejando atrás a Kakashi con todo el enojo.

-Quédate conmigo hoy por favor-me pasó un brazo por los hombros mientras nos dirigíamos a mi habitación.

-Siempre-Dejo un beso sobre mi cabellera tranquilizándome de inmediato, abrió la puerta de mi habitación cediéndome el paso, se veía igual completamente igual, fruncí el sueño.-Prepararé el sillón-exclamo el pelinegro mientras acomodaba las almohadas para recostarse.

-No-lo jalé suavemente de la playera-Duerme conmigo-Inquirí en tono suplicante, en su mirada apareció una sonrisa y una punzada de dolor casi imperceptible. Asintió. nos recostamos juntos, apoyé mi cabeza en su pecho-Él sabe donde está mi padre-

-¿Cómo lo sabes?-Preguntó Draco mientras su mano subía y bajaba por mi espalda.

-La basura se saca cada día, están las cascaras de comida que dejé el día que me fui de casa-La expresión de Draco fue de sorpresa-El día que me fui, los empleados también junto con mi padre-Se hizo un silencio.

-Esto no me huele bien ¿Crees que Kakashi está involucrado?-Su mano me acarició el cabello con suavidad.

-Completamente, lo que no sé es si realmente está de nuestro lado-La puerta del cuarto se abrió dejando ver la mirada de sorpresa del peliplata.

-¿Qué rayos haces aquí?-pregunte sentandome en la cama

-El perro no ha comido y no sé donde esta su alimento-murmullo sin despegar la vista de Draco. suspiré con calma, Hinata no tenía la culpa de lo que estaba pasando.

-Ya regreso- Draco asintió al escucharme. Baje sintiendo la presencia del peliplata detrás mío, en ningún momento alejándose. Abrí la puerta del cuarto de servicio, donde guardábamos las croquetas, tome un tazón y rellené su plato, salí, el clima era refrescante y una suave brisa me revolvió el cabello. Dejé su plato en el suelo, ella se acerco y lo olisqueo un poco, levanto su cabeza y se fue sin interés en su plato de comida.

-Hinata no tiene hambre-Inquirí consiente de su estúpida mentira para alejarme de Draco.

-Princesita-Susurro tras de mi. Un escalofrío recorrió mi cuerpo.

-Deja de llamarme así-Exclamé mientras entraba a la casa

-Lo siento mucho-Su disculpa me detuvo en seco, provocando una mueca de molestia en mi rostro, me volví para verlo-

-cierra la boca-escupí

-Fue un error estúpido-Voltee los ojos al escuchar su excusa.

-No quiero escucharte-Comencé a subir las escaleras con rapidez, tratando de llegar junto a Draco.

-¿Prefieres a ese idiota sobre mi?-Reclamó, giré sobr mis talones, para encontrarmelo justo en mi espalda, tanto así que tuve que dar un paso atrás.

-"Ese idiota" como tu le llamas, siempre ha estado para mi y jamás me ha lastimado como tu lo has hecho-Lo apunte con mi dedo índice mientras hablaba. Él tomó mi brazo con suavdad y yo no lo quité.

-Alex escúchame-Me miró con ojos suplicantes, podía ver el dolor de su mirada, la descision de ir con Draco lo lastimaba casi tanto como a mi. Una punzada de dolor me atacó en el pecho haciendome ceder.

-¿Qué?, dime lo que quieras por que en cuanto termines me iré- me cruce de brazos tratando de parecer amenazadora y así evitar que siguiera tocándome, pues no podía concentrarme en otra cosa que no fuera su tacto contra mi piel y como esta comenzaba a cosquillear en el lugar donde me había tocado, los brazos del peliplata cayeron a los costados de su torso, como si lo que fuera a decir, hubiera consumido toda su energía en un segundo.

-Te amo, princesita-Soltó por fin, haciendo que mi cuerpo entero se tensara y mi corazón comenzara a palpitar con rapidez, mis pulmones exigían más aire de lo normal.

-E-eso no es verdad-Logré susurrar

-Lo es, te amo- repitió-las yemas de sus dedos rozaron con delicadeza mis brazos haciéndome respingar, no noté que se había acercado tanto, su rostro estaba cerca del mío, miré hacia arriba encontrándome con sus ojos. Brillaban de deseo cuando estos se posaron en mis labios y sus manos viajaron con una caricia hacia mi nuca provocandome un estremecimiento que me recorrió por la espalda, jalo con suavidad de mi nuca atrayéndome hacia su rostro, mis manos subieron a su pecho deteniendo sus movimientos y así evitando que nuestra cercanía aumentara, miro mis manos un segundo y después regreso su mirada a mi ojos con una expresión de dolor. Podía sentir su respiración sobre mis labios a pesar de la mascarilla, usando una de sus manos bajo el complemento dejando a la vista su rostro, yo cerré los ojos con fuerza cuando Kakashi se acercó aún más a mi.

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Chicas! Me gustaría leer sus teorías acerca de lo que Kakashi está ocultando, POR QUE SÍ, él oculta algo sumamente importante  que cambiará la historia por completo en cuanto se sepa, las estoy leyendo <3 y respondiendo.

Takus2010

Mi Guardaespaldas/Kakashi Hatake/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora