Capitulo 34

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"La mayoría de las personas prefieren confesar los pecados de los demás"
Graham Greene.

Después de que me hicieron mil y un exámenes, dejaron que Taylor entrara a la habitación en la cual me tenían conectada a una intravenosa.


-hola nena-sonriéndole y sintiéndome mucho mejor le digo.


-hola-el se acerca besando tiernamente mis labios.


-¿cómo te sientes?-


-mucho mejor-y aleluya por eso, los dolores no eran nada bonito.


-me hiciste pasar un buen susto Brooklyn-


-lo siento-digo apenada.


-no te preocupes, pero tengo que avisarle a tu madre-me pongo alerta de inmediato negando.


-no lo hagas-


-Brooklyn.....


-no, Taylor en serio no es necesario-el se acerca dejando su mano en mi mejilla y mirándome con esos profundos ojos que me aceleran el pulso. El es precioso, con esas cejas pobladas, ojos negros profundos y labios gruesos de un rojo cereza.


-¿no crees que ya tenemos suficientes problemas Brooklyn?-se a lo que se refiere pero decírselo a mama solo traerá, preocupaciones innecesarias para ella-no debemos seguir acumulando mentiras, tarde o temprano te alcanzan-


-lo sé pero no veo esto necesario Tay-las cosas con mama ya están lo suficientemente complicadas para que le añadamos esto-ni siquiera se lo que tengo, capaz no es nada y no tenemos que decírselo además ya me siento mucho mejor-el niega sonriendo.


-¿recuerdas cuando Sam fue a prision y no quisiste decírmelo?-asiento sin entender mucho de lo que habla-creíste que no era necesario decírmelo, pero era necesario que lo hicieras, es mi hijo y merezco saber todo lo que pasa con el. Tú madre también merece saber qué sucede contigo Brooklyn, sé que ahora no lo entiendes pero es algo que entenderás cuando tengas hijos-sonrío relajándome por las caricias que sus manos dan a mis mejillas. ¿Como puedo decirle que no a este hombre? Si me dijera que me llevaría al infierno con gusto iría por una simple y sencilla razón. Lo amo.


-te amo tanto Taylor-


-¿señorita O'Brien?-Taylor fue interrumpido por un médico que se acercó a nosotros.
-soy yo-levanto la mano y el asiente sonriendo mientras se acerca a mi.


-soy el doctor ditz ¿cómo se siente?-


-mucho mejor-


-me alegro, aunque no debe preocuparse, tuvo la segunda enfermedad más común de los Estados Unidos-


-¿y esa es?-pregunta Taylor provocando que el médico lo mire.


-disculpe ¿usted es?-puedo ver a Taylor enojarse mucho antes de responder.


-Taylor Lautner, su jefe y el papa de su novio-


-mucho gusto, la señorita O'Brien presentó un cuadro de gastroenteritis-


-¿gastroenteritis?-digo frunciendo el ceño sin entender.


-si es una infección, muy común a decir verdad, con unos analgésicos estarás más que bien-


-pero me dolía mucho el estomago-y eso sí que no lo estaba exagerando.


-es parte de los síntomas-le resta importancia el médico.


-menos mal no es algo grave, gracias por atenderla doctor, llamaré a su madre-


-no se preocupe solo hago mi trabajo. Cuando estés lista para irte comunícaselo a la enfermera, de resto toma muchos líquidos-asiento más tranquila de que no tenga nada grave.

Viviendo el pecado (taylorLautner)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora