El plan de 90 días [TERMINADA]

VII

{Bethany}

—Hey tú —Dije como pude, puesto que estaba más nerviosa que la... no sé, estaba bastante nerviosa—Hey, te hablé, ¿Estás sordo? —Repetí, pero el tipo que estaba de espaldas y fumando un cigarrillo no me prestaba atención—Oye, imb**il   —Toqué su espalda con la punta de mi dedo, presionando fuerte y enterrándole mi uña. 

Instantáneamente se dio vuelta.

— ¿Cuál es tu maldito problema? — habló fuerte, sobándose donde yo había presionado.

—Pues nada, sólo quería que prestaras atención —Me interrumpió.

—Que yo sepa, mi nombre no es <Hey tú> u <Oye, imb**il> —Imitó la voz de una niña pequeña, yo lo miré sonriendo negando.

—Pues perdóname por no saber cómo te llamas —Me encogí de hombros.

—Zayn Malik a tus servicios, morena —Estiró su mano y la tomé al instante.

— Bethany Dumas —O estoy loca, o hizo una horrible mueca cuando mencioné mi nombre.

— ¿Y sólo así? ¿No estás a mis servicios? —Preguntó atónito.

—Pues... no, no estoy a tus servicios. Y ya vamos, antes de que me arrepienta de salir contigo, Malik.

—Malik —Repitió sonriendo.

— ¿Qué? —Levanté una de mis cejas, mirándolo.

—Pues nada, me dio risa —Se encogió de hombros y sacó las llaves de lo que supuse era su auto. Apretó un pequeño botón y sonó la alarma. Santa madre de Dios, tenía un Lamborgini negro más lujoso de lo que yo podía imaginar.

Rápidamente comenzó a caminar y yo lo seguí, él se metió en la parte del copiloto, encendió el motor y yo me quedé parada frente a la puerta del copiloto, esperando que sus dotes de caballero salieran a la luz.

— ¿Te quedarás todo el día parada ahí o qué? —Preguntó desde dentro, mirándome con una ceja levantada.

—Pues no sé, me gustan los hombres que tienen un poco de actitud <caballerosa> hacia las mujeres—Me crucé de brazos y lo miré feo.

—O te subes o te quedas ahí.

—Me quedo.

—Como quieras —Se encogió de hombros, hizo rechinar las llantas del auto y se fue.

¡SE FUE!

Es que enserio, no lo podía creer. No sé si mis piernas se habían muerto o aún estaban shockeadas, pero me quedé parada en el mismo sitio como una verdadera estúpida.

Sólo rezaba porque nadie hubiese visto mi intento fallido de salir con Zayn Malik desde el edificio, sería algo muy humillante. No sé, debió haber pasado por lo menos un minuto cuando recobré vida y me di cuenta de lo que había pasado...

El muy imb**il se había ido y me había dejado, literalmente, tirada en la calle. Decidí comenzar a caminar en dirección a mi hogar, ya nada me quedaba por hacer.

De pronto una bocina sonó tras de mí y me di vuelta...

¡Claro!

Era el imbécil de Malik, quién tenía una sonrisa gigante en su rostro. Lo único que hice fue levantarle el dedo del medio y sonreírle cínicamente.

—Princesa, su auto espera por usted —Ahora se bajó, abrió la puerta del copiloto e hizo una reverencia.

— ¿Me estás hinchando las bolas que no tengo o qué? —Pregunté, enojada.

—Era una pequeña broma, tómatela con humor —Me golpeó el brazo, algo así como lo hacen dos amigos hombres.

—Me pegaste... ¿Es enserio? —Levanté una ceja y estaba a punto de pegarle una bofetada, pero me contuve.

—Tranquila fiera —Me tiró un beso al aire y yo le <<sonreí>> muy falsamente.

Me subí rápidamente al auto, que olía fatal a...

¿Sexo?

No sé. Él demoró un poco en subir, y fue ahí cuando recordé e hice lo que me había dicho Marny...

<Baja un poco tu blusa para que se te vean tus amigas>

Luego de un minuto, partimos rumbo a no sé dónde.

—No sé, te aconsejo que le hagas una limpieza a tu pobre auto —Dije tapándome la nariz.

—Perdóname, soy hombre, vivo solo, mis amigos y yo somos cerdos, nada que hacer —Me miró sonriendo y no se despegaba, listo, me estaba poniendo nerviosa.

—Mira al frente, no quiero morir por tu culpa.

—No moriremos, estás hablando con el rey de la conducción —Me guiñó el ojo y ahora noté cómo miraba hacia <cierta> parte que anteriormente había desabrochado. 

El plan estaba saliendo a la perfección. 

—Mira hacia el frente, ¿Crees que no me doy cuenta de tu poca discreción? —Ahora lo miré yo, y rápidamente él giró la cabeza y contuvo la risa, mordiéndose el labio. A mí también me dio risa, pero disimulé perfectamente — ¿Dónde piensas ir? —Pregunté luego.

—A un motel —Dijo rápidamente, mirando hacia el frente.

— ¿Disculpa?

—Que al restaurante de un hotel —Ahora rió y me miró por un par de segundos— ¿Qué clase de hombre piensas que soy al querer tener sexo en la primera cita?

—Pues no lo sé... puede que piense que eres el típico mujeriego en busca de sexo en la primera cita—Me encogí de hombros y crucé una de mis piernas encima de la otra. Error, se subió un poco la falda.

— ¿Cómo quieres que no piense en sexo siendo que estás dejando a la vista cosas que me son imposibles de no mirar? —Dijo frunciendo el ceño.

—Pues contrólate, no quiero que te vaya a ocurrir algún percance mientras estamos en medio de la carretera —Hice un gesto con mi cabeza señalando <su parte> y él rió. 

En cosa de minutos llegamos al restaurante que había dicho anteriormente. Ahora sí comprendió que soy una tipa hecha a la antigua y bajó rápidamente de su asiento para abrirme mi puerta.

Caminamos lentamente hacia la entrada y en eso nos atendió el mozo.

—Tenemos todas las mesas ocupadas, señores.

—Reservé hace unas horas, Zayn Malik —Le señaló la recepción y rápidamente el mozo vio.

— ¡Mil disculpas Señor Malik, no lo reconocí! Su mesa está mas que lista —Le dijo él. Mierda, al parecer Malik sí que era importante, es decir...

¿Quién reserva una mesa en uno de los restaurantes más caros de Cambridge?

Aparte, tiene un Lamborgini...

Será perfecto para escribir mi artículo.