XXIV

25 1 0
                                    

{Bethany}

— ¿Cómo te sientes? —Preguntó José desde la puerta de mi oficina.

Yo asentí con la cabeza y esbocé una sonrisa con desgano. Mi jefe se fue y me quedé completamente sola. Hacía tres días que no iba al trabajo, le dije que estaba enferma con dolores de estómago y demás cosas, y hoy era el día en que debía volver, puesto que José ya se estaba enojando. De Zayn, no tuve noticias desde el día en que ocurrió el incidente, y de hecho, ya no creía que quisiera volverme a hablar, porque... quedó la cagada.

—Toc-toc —Dijeron cuatro voces familiares.

Levanté la vista y eran mis chicas.

—Hola —Dije sonriendo, ellas sonrieron también y entraron—¿Tú no deberías estar en el trabajo? —Miré a Amanda— ¿Y tú no deberías estar con mi mamá? —Miré a Camila.

—Tengo día libre —Dijo Amanda.

—Tu mamá quiso salir con su amiga, otra vez —Dijo mi prima, rodando los ojos.

—Ah... ¿Qué las trae por acá... entonces? —Miré a todas. Marny sacó una caja de donas desde su espalda y la puso en mi escritorio— ¡Oh Dios, gracias! Me hacía falta un poco de azúcar —Todas reímos y comenzamos a devorar la caja.

Mi temple de ánimo estaba por los suelos, y no tenía ganas de hacer nada.

Zayn sí que me había dejado mal. 

Las relaciones de Pam con Louis y de Niall y Marny iban cada día mejor, me daba hasta un poco de envidia. Sabía que a Camila le gustaba mucho Harry, pero ella me decía que no quería nada con él por todo el drama que había sucedido. Le aclaré que eso era cosa mía y de él, y que a ella no tendría por qué afectarle, así que decidió seguir con él adelante, los veía bien. Amanda y Liam cada día estaban más amorosos, salían cada tarde a pasear, se tomaban de las manos y todo bien, eran una pareja demasiado tierna.

Y yo, era la única pobre que iba mal, excelente.

— ¿Quieres ir a un bar hoy, Bethany? —Preguntó Amanda.

Justo cuando iba a contestarle, mi teléfono sonó. Le hice una seña para que me esperara y contesté.

— ¿Hola? —Pregunté.

—Hola, ¿Bethany? —Escuché la voz de un hombre — ¡Soy Lucas! ¿Me recuerdas? —Lucas, Lucas, Lucas... no lo recordaba.

—En realidad no, ¿Me das una ayuda? —Ambos reímos.

—El chico que te vendió un sándwich en el aeropuerto —Dijo él, y sí, ahí me había acordado.

— ¡Oh sí! —sonreí y escuché lo que tenía que decir— Ajá, sí... claro, claro. No, nada... Bien, ¿A las 5? Suena genial, ¿Me vienes a buscar? —Me quedé en silencio — Claro, es el edificio más grande de Avenida Strafford... ¡Sí, la editorial Factor Wild! Bien, ok, ok te espero... Adiós —Sonreí y corté la llamada.

— ¿Qué pasó acá? —Dijo Camila, levantando una ceja.

—Tengo una cita —Hice una cara de shock.

— ¿Con Zayn? —Preguntaron todas emocionadas.

Yo negué con la cabeza.

—No, estúp**as. Con Lucas, un chico lindisímo que conocí en el aeropuerto —Me encogí de hombros— Así que tendré que rechazar tu propuesta de ir a un bar —Le hice un puchero a Amanda y ella me ignoró con su mano, bromeando.

El plan de 90 días [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora