El plan de 90 días [TERMINADA]

XXXI

{Zayn}

Había cumplido mi objetivo, dormir con la morena. Luego de varias súplicas la noche anterior, de aguantarme varios insultos de su parte y de toda la mierda sincera que me dijo, dejó que me quedara en su hogar.

Eso sí, no nos hicimos uno como tanto yo había querido, sólo... dormimos.

Me desperté antes que Bethany, por lo tanto, me dio tiempo para poder mirarla mientras dormía.

Era hermosa, por la mi**da, que sí.

Le comencé a acariciar una de sus mejillas, pero fue un error, puesto que le comenzó a picar y se despertó poco a poco.

—Deja de hacer eso, ton*o —Susurró a penas, mientras luchaba contra sus ojos para que no se le cerraran.

—Perdón, no me resistí.

— ¿Cómo la pasaste? —Preguntó ella.

—Perfecto... —Me quedé callado un momento, pensando en si decir o no un comentario pervertido— Pero lo hubiese pasado mucho mejor si hubiese tenido el chance de tenerte aquí encima de mí, haberte agarrado de la cintura y... —Noté cómo ella se sentó de golpe y sus mejillas estaban bastante rojas.

—Zayn, eres un mald**o cerdo. No puedo creerlo... —Negó con su cabeza y se levantó de la cama. Yo reí ante la reacción y ella entrecerró los ojos— Quédate ahí, te haré el desayuno —Yo sólo asentí y me quedé acostado.

Coloqué mis brazos detrás de mí nuca, miré al techo y me quedé pensando.

{Bethany}

El hacerle desayuno a un hombre en mi casa, me recordaba a Harry.

Wow.

Esta situación se parecía en varios aspectos a aquella noche, excepto porque ahora conozco al tipo que está en mi habitación y, no tuvimos sexo.

Preparé dos tazas de café y un par de tostadas, algo simple. Escuché que el teléfono de Zayn comenzó a sonar, él contestó y luego se escuchó un feo ruido.

— ¡Zayn! ¿Todo está en orden? —Grité para que escuchara en la habitación.

Sentí como corrían hacia la cocina, y era Zayn con cara de muerte en boxers.

Ay mie**a...

¿Cómo hace eso?

—Marny está en el hospital, dará a luz —Lo único que hice fue botar las tazas al suelo y abrir los ojos a más no poder.

El cuerpo me empezó a temblar y Zayn me abrazó.

—Mie**a, no puedo creerlo... ¡Tenemos que ir a verla! —Me quedé en silencio un momento— Iré a ducharme...

—Me meteré contigo, hay que ganar tiempo y ahorrar agua.

—Tú no pierdes ninguna oportunidad, ¿Verdad? —Negué con la cabeza y me encerré en el baño.

Pasados diez minutos me salí y era el turno de Zayn.

Me coloqué un short de mezclilla más una blusa bonita que me tapaba un poco el escote. En el cabello no me hice nada, si no, me iba a atrasar mucho. Zayn salió del baño al cabo de diez minutos también, se colocó la misma ropa con la que estaba ayer, no comimos nada, y corrimos rumbo al hospital en su auto. Fue extraño, estuvimos en el hospital en cosa de cinco minutos, jamás había visto a Zayn manejando tan rápido, eso me causó un poco de susto.