Instituto y el malo del salón. (EDITADO)

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Pov Sky

¿Qué me depara el día de hoy? posiblemente sea un día aburrido y sin trabajo, similar a los días de la semana que pasó.

Mi nombre es Skyler Morgan, odio mi nombre y quien lo sabe me llama por mis iniciales S.M y quien no... pues lo lamento pero mi puño impactará su rostro, tengo 18 años, si soy legal pero sigo estudiando por haber perdido un año, junto a mi mellizo James Morgan.

Dirán: "Aww perdieron un año para seguir estando juntos" y la respuesta es definitivamente NO.

La relación que llevo con mi hermano no es tan buena para ser mellizos, para tener 18 el no es tan "maduro" digamos que es un infantil y sigue creyendo en las clasificaciones de un instituto, se hace llamar el "popular" y yo siendo su hermana, a la que no soporta, soy la "nerd", si exacto, no soy la popular, soy la nerd.

Mi trabajo es parte de mi día a día, cada vez que estoy en un instituto tengo que tomar un papel que no sea muy llamativo, pues tengo enemigos, por cada instituto que paso un papel nuevo o antiguó me recibe, la rara, la torpe, la adicta a el ajedrez, etc.

¿Mis padres? no, de ellos no hablo ni aunque me regales un kilo de pan.

¿Situación sentimental? eso es del diablo.

En fin, soy una (por decirlo así) espía, mi tio es el jefe de una Organización Secreta de Insensibles(OIS), bueno quizás eso no significa la "I", pero lo olvide okey?

— Sky! despierta! — escuche gritar a el estúpido de James, a excepción de mi familia nadie me llama Sky.

— Ya desperté — susurré estirándome en la cama, al parecer me escucho ya que no volvió a gritar.

Me levante y me dirigí al baño, me desvestí, hice mis necesidades, me bañe y cepille mis dientes. Salí en ropa interior ya que tengo un cajón en el baño lleno de lo que cubre mis partes íntimas.

Seque y peine mi castaño cabello, me coloque un abrigo azul que me queda enorme y me hace parecer un duende inflado, me puse unos pantalones anchos café que escondían mi trasero, unos zapatos de punta negros, me coloque unos anteojos enormes y me puse un gorro negro ya que hacia frío.

Cogí mi celular, mi bolso y mi billetera con mi dinero, papeles, placa de la organización y tarjetas de crédito.

Baje y fui a la sala, pase de largo al pasillo y toque la pared cinco veces con mis dedos en un leve ritmo.

Tac,TacTac,Tac,Tac.

Se abrió la pared y se podía ver el pequeño gimnasio y en la pared de la otra esquina todas mis armas y mas. Fui a la pared y agarre lo necesario en un día, una navaja pequeña que guarde en mi zapato escondiéndola con el pantalón, una pistola pequeña que guarde entre mi ropa para que no se vea, además, un gas pimienta, una pistola eléctrica, un pistola mas grande y balas que guardé en mi bolso en un bolsillo secreto, ahora si estaba lista para irme.

Salí del gimnasio y cerré, en la puerta estaba James.

— No olvides que no te traeré porque saldré con mis amigos — dijo y no pude evitar poner los ojos en blanco, siempre es así, prefiere a sus amigos y chicas de una noche que a mi, su hermana.

— Como sea — dije y salí.

Camine hacia el instituto que no estaba tan lejos, antes de llegar pare en una cafetería y compre un café, eso es mi adicción, no puedo empezar mi día jamás sin café.

Llegue y me di cuenta que había llegado temprano al igual que una ñoña, como siempre. Sentí mi celular vibrar y lo saque de mi bolsillo.

Era un mensaje de mi tío.

¡Espía encubierta! [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora