27

830 104 23
                                    

Bucky

-No creo que sea buena idea.

-Creo que siempre que empieces alguna oración con eso solo me quedaré en silencio.

-Eso sería cruel, pensaría que me dejaste aquí como tonto.

-Solo bromeó jamás haría eso, pero es que acaso no confías en mi.

-Si lo hago, pero no se, no me vería como...

-Buck...

-Es que tendria que estar contigo en todo momento.

-...

-Tendrías que cuidarme.

-...

-Steve!!

-Has ido alguna ves?

-No.

-Entonces cuál es el problema.

-Solo no quiero causarte más problemas.

-El único problema que me causas es ver cómo te lastimas. Buck entiendo que no debe ser nada fácil, pero ha pasado una semana entera de la que no sales de casa. No has bajado a la cafetería y no quiero ver esa expresión triste contigo de nuevo.

-Es solo... Steve tengo miedo, qué pasa si alguien...

-Tendrán que pasar sobre mi si alguien quiere hacerte daño. Será divertido.

-Supongo que si.

-Vamos quita esa cara de angustia, será emocionante. No hay nada como ir a una feria para pasar un buen rato.

-Podríamos ir mañana, ya sabes es mejor estar, no se podría llover.

-...

-Bien'!! Pero ten en cuenta que eso es cruel Steve.

-Así me quieres. Anda dejare que te duches primero en lo que termino de envié algunos correos a los proveedores.

Como no tienes idea...

Escuche como Steve camino a su estudio, me encontraba estático en el lugar al pensar en que esta sería la primera vez que estaría en un lugar tan público y expuesto.

Si es cierto he estado innumerables ocasiones en la cafetería de Steve y por su puesto esas salidas de antes, pero la idea de estar en un lugar rodeado de una multitud me ponía nervioso.

Se que debo ser realista y el resto del mundo no es como Steve. No todos se muestran tan amables ante una persona como yo y estoy más que seguro que el mundo exterior no está hecho para alguien como yo.

Simplemente no podré estar confiado de la ayuda de mi bastón en todo momento y eso me pone sumamente nervioso.

Pero esa parte de mi que se emociona ante la aventura, esa voz en mi cabeza que me animaba a seguir en los tiempos más adversos me susurra con complicidad dándome aliento. Diciéndome que será algo maravilloso.

Me permito sentir esa sensación de emoción ante lo desconocido y evoco todo los pensamientos emocionantes que se me ocurren ante la idea de una nueva aventura.

Tallo mi cuerpo pensando en lo qué pasó esta semana. Nuevamente sentía que no descansaba lo suficiente a pesar de estar horas en cama.

No tenía el mismo apetito que antes y nuevamente recuerdos de todo lo malo que pase al lado de mi familia, me atormentaban en cada momento del día.

Tenía miedo de abandonar la seguridad que brindaban estas paredes ante la sola idea de qué tal vez alguno de mis hermanos se presentará casualmente en este lugar.

Se que Steve me explico en que parte de Rosewood estábamos, pero no es un lugar grande y aunque estuve aislado tanto tiempo se muy bien en donde se encuentra mi casa, Justo del otro lado del pueblo al menos, pero no dejaba de estar en el mismo lugar que el que ahora consideró mi hogar.

Ahora mientras pasó la secadora sobre mi pelo peinándolo como Charlie me enseño pienso en cómo me gustaría ser normal por una sola noche. Salir de este aislamiento y ser como los demás.

Claro que no sucederá el anhelo de ese loco sueño quedo enterrado entre escombros de cosas que se nunca tendré, pero que a pesar de eso mucho he recuperado al estar ahora finalmente libre.

Me preguntaba al principio si lo que sentía dentro de mi era solo una devoción. Alguna especie de agradecimiento ante lo que toda historia romántica diría, el príncipe azul que me rescato del castillo.

Claro que lo sentía, jamás podré hacer nada para agradecerle al grado de gratitud como el ha mostrado conmigo, humanidad es la palabra. Pero mientras termino de cepillar mi cabello se que si es posible sentirme de esa manera y al mismo tiempo saber que el calor en mis mejillas no solo es por lo agradecido que estaba.

Pero era realista y realmente no podía seguir fantaseando ante ideas tan absurdas, jamás se fijaría en mi. Se que no y eso me aterra más que cualquier otra cosa.

Suspiro apartando esas ideas de mi mente, si no terminare atrapado en el mismo torbellino de ideas fatídicas y no llegaré a ningún lado. Me permito sonreír ante la idea de pasar un día en una feria, que loco suena después de pensar que jamás experimentaría eso de nuevo.

Aunque eso tendrá que esperar porque por lo distraído que estaba no puedo evitar sentirme frustrado al darme cuenta que olvide sacar mi ropa. Con frustración me ato la toalla a mi cintura y espero que Steve se encuentre aún en su estudio mientras busco algo de ropa.

Iba descalzo por la casa concentrado en recorrer a la mayor rapidez el tramo hasta el cuarto para conseguir algo de ropa. No hacía ningún ruido y era un experto en pasar desapercibido.

Sonrió al pasar mi mano sobre el respaldo del sillón de la sala, solo dar vuelta por el pasillo y estaré en nuestra habitación, al doblar la pared y dar vuelta siento como mi mundo es sacudido ante el repentino obstáculo en mi camino, rebote como si hubiera chocado con una montaña, se que es ridiculo pero no podía pensar en nada cuando antes de caer dos brazos me sujetaron con fuerza y creo que de nada sirvió el baño porque empezaba como el nerviosismo recorría mi cuerpo haciéndome sentir sumamente acalorado en estos momentos. Como si no fuera suficiente siento como la toalla en mi cadera empieza a deslizarse ante la repentina sacudida. Mi corazón se aceleraba en mi pecho hasta que casi sentía que subía por mi garganta...

Sin miedo (Stucky)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora