Sin miedo (Stucky)

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Tarde lo sé, pero al menos este capítulo tiene 4000 palabras!!

Steve

Cada parte de mi cuerpo, hasta la más mínima célula que recorre mi ser, mi alma entera gritaba por acercarme a él. Por romper la distancia entre ambos y poner fin a esta distancia entre nosotros este frío glacial al no tener su piel junto a la mía como tantas noches.

Mi mano buscaba la suya en la oscuridad, levantaba lentamente más como un reflejo que como una necesidad, pasar mi pulgar por el dorso de su mano, por sus nudillos memorizando el tacto de su Piel pago la mía, de añorar lo suave que es.

Sin importar el frío de sus pies junto a los míos, sentirlo nuevamente cerca. Pero siempre que levantaba mi mano para buscar la suya, luchaba con fuerza sobre humana para resistir esa tentación, ese anhelo de tenerlo nuevamente como antes.

Su voz en la oscuridad de nuestra habitación era demasiado abrumadora, sin importar estar perdido en la oscuridad su voz para mi era un faro de luz que guiaba mi camino.

Y al escucharlo, al sentir su angustia, escuchar sus dudas y sentir su miedo como mío es cuando más me recrimino el no haber hecho más, el esta de esta manera por mi culpa, yo soy el único responsable de que no recuerde nada. De ponerlo en esta tensión.

Nunca puedo hacer nada por las personas que amo, no fui capaz de defenderlo entonces y aunque ahora esté dispuesto a hacer de todo por el, no quita ese dolor que lo acompaña.

Lo prive de ver el mundo de una manera imperdonable, no puede ver pero yo le borre sus recuerdos, soy el único responsable de esa ceguera. Sin importar cuanto me digan los demás que fue su familia, que su padre se encargó de ponerlo en ese hospital.

Y tienen razón, pero si yo no hubiera fallado a mi promesa, si hubiera sido más fuerte y no lo hubiera dejado solo...

No pude evitar sentir cada palabra que me decía, lo verdaderas que eran sus palabras, lo real que volvía toda esta situación.

Y ahora, a pesar de que me pidió que lo besara, sintiendo su frente contra la mía nuestros alientos juntos, siento el mismo miedo que el, al romper esta barrera auto impuesta entre ambos, para evitar hacernos daño.

Si el me besaba, yo no podría parar. Extraño el contacto de sus suaves labios contra los míos, lo extraño más que nada en el mundo. Sus besos en todo mi rostro, su nariz contra la mía.

Y ahora aquí tan cerca de el, a nada de dejarme llevar por la necesidad de recuperar a mi otra mitad, al amor de mi vida, de perder el control y dejarme llevar. Es cuando decido retroceder, cuando se que no quiero que se vuelva realidad mi más grande temor.

Por lo que me mantengo positivo siempre, invoco la esperanza que jamás me ha abandonado y espero, imploro que el destino nos deje ser felices.

Al tratar de inhalar aire, mientras me apartaba de él poco a poco, un suspiro se me escapo. No me había dado cuenta de cuando había empezado a llorar.

-Steve...

-Descuida estoy bien.

-No lo estás.

-Es verdad, no lo estoy. Y lo siento, pero creo que por primera vez no podré cumplir con algo que me pides.

-Lo siento, se que fue tonto pedirte eso, considerando, bueno todo.

-No es por eso, es solo que... no lo había visto de esa manera. Como lo dices, es bastante acercado a nuestra realidad en estos momentos, no me gusta ser pesimista. Y de los dos tú eres quien siempre me ha hecho ver las cosas, con tan pocas palabras logras entenderme a la perfección.