Daddy's Little Princess (j.b) (h.s)

FINAL ALTERNATIVO (3/5)

Desperté debido a la puesta de sol que se asomaba por el ventanal de la alcoba. Me removí de inmediato y me incorporé sobre la cama.
Mire el reloj en la pared, las 5:42 p.m. Había dormido por un largo tiempo. Recogí la camisa estampada de Harry y la utilicé para cubrirme, quería saber en donde era que se encontraba.

Salí de la habitación y escuché ciertos ruidos en la cocina, avancé rápidamente por el pasillo hasta toparme con Harry, preparando la cena.

-¡Despertaste, hermosa! -dijo con una entusiasta sonrisa al verme. -Lamento haberte dejado sola, pero quería preparar algo para que pudieses comer, linda...

Su parloteo se detuvo cuando me acerqué y le rodee el torso con ambos de mis brazos. Recargué mi cabeza sobre su pecho y pude ver que correspondió muy bien a esta muestra de afecto.
Me alejé y le miré con una bonita sonrisa, le plantee un pico en los labios.

-¿Cómo has estado? -fue lo primero que mi cerebro formuló, no había hablado con él desde los preparativos de la boda, y desde hace unas horas.

Rió. -Estoy de maravilla. ¿Qué tal tú? ¿Disfrutas tu estadía en la Isla de Barbados? -preguntó con simpatía mientras colocaba los utensilios en la mesa.

Suspiré. Creo que se que sigue después de esto. Estaba tan aturdida que por poco olvidó que estoy aquí "en contra de mi voluntad".

-Sobre eso... Marcel... -me calló casi de inmediato.

-Harry... Harry... -corrigió con algo de timidez.

-Bien, Harry. -tomé asiento junto con él alrededor de la mesa.

Él lucía bastante nervioso, no está seguro de lo que pueda decir, pero creo que esos momentos en mi mente me hicieron reflexionar demasiado.

-Harry, no diré que no tengo la más remota idea de porque hiciste esto, por que es evidente que lo sé. No voy a culparte, algo como lo nuestro no pudo simplemente esfumarse con el tiempo, porque de cierto modo fuiste la primera persona a la que amé. -eso lo hizo sonrojar. -Estoy confundida, y al principio algo aterrada porque no quería perder lo que tenía de vuelta en casa, Harry, lo quieras o no, esa gente es mi familia, esos niños son mis hijos y... no quiero verlos crecer sin su madre, y se lo que digo...

-¿Acaso ibas a casarte con Justin porque no encontraste nada como yo? -dijo bastante frío en sus palabras, y sobre todo con firmeza.

Me quedé callada, no pensaba ponerme a discutir sobre algo que no tenía idea.

-Sabes que todo eso que tienes pude habertelo dado yo, sólo yo. No necesitabamos de nadie más.

-¿Tengo que recordarte que trataste de matarme? -su rostro perdió color. -¿Qué trataste de matar a Maddie? -una lágrima brotó sin querer. -¿Qué trataste de matarte?

El silencio acompañado de mis sollozos hizo que Harry desviara la mirada en varias ocasiones, para no detenerse en la mía.

-¿Creiste que haciendote eso mi vida seguiría bien? Harry, el simple pensamiento de perderte me rompía por dentro, y cuando pensé que lo había hecho... No supe que hacer. Yo no era nada sin ti, tu me hiciste la persona que soy ahora. Y sé de antemano que la gente comete errores, y el pensar que mi vida continuaría mejor sin ti, fue el más grande que cometiste. Si en realidad hubieras querido tener todo junto a mi, no me hubieras arrojado a los brazos de alguien más.

Sus puños golpearon la madera, y el llanto se hizo presente. Sabía que provocaría esto, pero no pensaba decir nadamas que la verdad.

-Esa nunca fue mi intención. Aria... Yo te amo como nunca podrás imaginarlo, tenía problemas y eso nunca te impidió quererme. ¿Crees que me sentí mejor al saber que el bebé que esperabas era de otra persona? La única cosa por la que lo hice es porque si en realidad querías estar junto a mi por el resto de tu vida... Justin nunca debió aparecer en tercer plano.

-Eso es mierda.

-¡Es la verdad! Y sé que lo sabes. ¿Cómo crees que me sentía cuando te veía con él? ¿Cómo me sentí las infinitas veces que desee tenerte por última vez? ¿Cómo me sentí las cientos de ocasiones en las que Justin te besaba? ¡Esa vida era para mi! ¡Y tu se la diste a él!

-¡Esa vida siempre ha sido para ti! Siempre lo fue. Justin nunca fue la mejor opción, siempre fuiste tú. No mentire al decirte que trataba de recrear tu rostro en mi mente, y pensar que todos los demás eran sólo tu. Harry... Yo hubiera dejado todo de lado por ti. Hubiera dejado a Justin, a Cameron, hubiera renunciado a todo por ti. Pero me lastimaste, y acepté todo eso, al fin y al cabo... ¿Qué mierda es el amor sin dolor y sin sufrimiento? -dije con el corazón en la garganta.

Esas palabras que estuvieron presionadas en mi pecho por años... Por fin eran escuchadas por la persona indicada.

-Sólo que... Ahora no sé si en verdad podré dejar todo lo que construí por ti... Eres todo lo que necesité, pero ahora... -me interrumpió abruptamente. Tomó mi mano por encima de la mesa, no sin antes depositar un cálido beso en esta.

Sus ojos cristalizados partieron mi corazón, pero al igual que él, yo lo lastimé de forma egoísta, y en algún momento tuve que reconocerlo. Vernos en está situación me hace querer llorar de nuevo.

-No quiero verte sufrir más, has tenido más que suficiente. -sorbió de su nariz y continuó. -Pienso dejarte hacer lo que quieras... Pagaré tu vuelo de regreso a Atlanta, puedes quedarte con mi dinero, con las propiedades, la empresa... Todo será tuyo si lo pides...

-Harry, no...

-No es todo. -guardé silencio y lo dejé seguir. -O puedes quedarte... Podremos hacer la vida que siempre merecimos, y esta vez con la persona adecuada. -sonrió. -Sólo toma tu decisión y si quieres pensarlo, estaré afuera si me necesitas.

Se puso de pie y se dignó a irse por la misma puerta trasera que daba al precioso mar caribeño. No podía dejarlo hacer esto. Mi mano rodeó su muñeca y le impedí irse, haciendo que este se sorprenda y vuelva a su silla.

-No hay nada que pensar, Harry...

Él me miró con mucha intriga, parecía que esta misma lo carcomia por dentro. Sus ojos curioso trataban de leer mi mirada, pero estaba tan segura que no hubo necesidad de tanta espera.

-Creo que es muy obvio, así que sólo dime que hacer.

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