Desperté esta mañana gracias a la alarma de el reloj que se encontraba en la mesa de noche a lado de mi cama. Fui hasta mi baño para darme una ducha antes de ir al colegio, por la hora en la que salí del baño supongo que Harry despertó hace mucho, él siempre despierta a las 6 de la mañana para hacer el desayuno y encargarse de todo lo necesario en la casa. Busque mi uniforme que había puesto en el cajón, el cual no fue muy difícil de encontrar ya que era lo único que estaba en aquel vacío cajón. Me vestí con este mientras arreglaba un poco mi cabello, y le agregaba un poco de maquillaje a mi rostro, aunque iría a la escuela, lo que significa que Emily debe ir, no Aria.
Termine de arreglarme minutos después, para las 6:30 ya estaba lista para salir de mi habitación, claro, sino antes haber empacado mis gafas y mis frenos para poder ponérmelos al llegar al colegio, no soportaría que alguien me viera así, no. Camine por el pasillo que conducía a la bella sala de estar, gire hacia la derecha, encontrándome con mi dulce papi cocinando el desayuno. Llevaba puesto solo un pans de sus pijama, su torso estaba descubierto, lo que dejó perfectamente a la vista sus tatuajes, eran fascinantes. Se dio la vuelta al notar mi presencia, u al sentir mi mirada sobre el todo este tiempo. Llevaba puesto el delantal que decía "baby girl's daddy" recuerdo cuando se lo obsequie en su cumpleaños, agote mis ahorros en ese delantal, pero por lo que veo le fascinó, además de que se ve demasiado varonil con el, con su cabello cayendo por su rostro, su rizada cabellera era demasiado sexy.
-Buenos días, papi. -dije caminando a él para depositar un beso en sus labios.
Sus bellos ojos verdosos busco la mía y al encontrarla la cautivó con una de sus tantas miradas sensuales que el emitía.
-¿Dormiste bien? -preguntó aún mirándome con una sonrisa. Una bella sonrisa, bella y picara sonrisa.
-Genial, aunque, lo del móvil ayer... -me interrumpió apegándose contra la isla de la cocina, su cuerpo estaba tan cerca del mío que nuestras respiraciones era una sola.
-¿Quién era? -preguntó con algo de desconfianza.
-Era... El chico, pero solo decidí apagar el móvil e ignorarlo, juro que nos atendí la llamada, papi. -dije intentando zafarme del agarre. Mientras hacía un puchero.
-Bien, te creo, hermosa. Ayuda a poner la mesa, es hora del desayuno, no quieres llegar tarde a la escuela. -dije mientras se concentraba en lo que cocinaba.
Obedecí de inmediato saltando de aquí para aya buscando todo lo necesario para poder tener un desayuno decente. Encontré manteles , cubiertos, copas, platos, etc; todo eso funcionaba de maravilla. Acabe de colocar todo en la mesa, esta estaba lista para que papi llevará el desayuno. Segundos después de haber dejado lista la mesa, papi llego con dos platos en sus manos, en ellos habían humeantes panqueques con crema batida y fresas recién cortadas, él sabía que era mi desayuno favorito. Dejó el plato frente a mí mientras me dejaba encantar por el olor de aquel alimento tan delicioso. Comencé a comer mi desayuno, claro, con ayuda de los cubiertos para evitar enseriarse o algo así.
-¿Dónde estudias, princesa? -preguntó papi mientras comía su desayuno.
-Hamilton, esta algo cerca. -dije con algo de rareza en mi ser, no lo sé.
-Bien, te llevaré y luego iré por ti, ¿Okay? -dijo mientras me miraba de una manera encantadora. Asentí con una enorme sonrisa mientras me dedicaba a acabar con mi desayuno.
Cuando mi plato estuvo completamente vacío, papi los levanto de la mesa y los llevo al lavaplatos, llamó a la chica de servicio y le dio órdenes de lavar todo, además de que desempacara mis cosas. Cuando acabó de ordenar a la chica, fue hacia su habitación para poder cambiarse, ya que prácticamente estaba en pijamas. Espere sentada en el living, observando cada adorno, cada florero, cada jarrón, todo era demasiado lindo en ese Penthouse. En cuestión de minutos Harry salió de su habitación con uno de sus bellos trajes para el trabajo que lo hacían ver irresistible, sus típicos mocasines y se cabello alborotado y buen peinado a la vez. Me puse de pie de inmediato y lo seguí hacia la puerta. Bajamos en el ascensor hasta la recepción. Le pidió al chico de mostrador las llaves del auto, este se las entregó y ambos salimos en camino hacia el auto. Cuando lo hayamos subíamos a este y papi condujo hasta salir del estacionamiento de la privada.
Harry conducía callado por las calles de Chicago, tenía la mirada puesta en el camino y ninguno siquiera respiraba. No pensaba decir nada, como yo lo recordaba era muy callado, y algún ruido mientras estaba en paz era algo completamente irritante para el. Así que simplemente no emití ningún sonido o palabra alguna.
-¿Estás bien? Te noto callada. -dijo él mientras me miraba por un momento, ya que después volteó hacia el camino para enviar un accidente.
-Nada, solo que no sé de qué hablar. -dije con algo de nervios.
-Habla de lo que quieras, pero... -se callo por unos segundos.
-¿Si? -dije para que continuara hablando.
-¿Hubieron más chicos que yo en tu vida? Bueno, como vi anoche si hubo uno pero... Antes de el y de mi, ¿hubieron más con los que te ayas acostado, Aria? -preguntó en un tono algo firme.
Claro que si, perdí la cuenta después de 12, y la mayoría de veces lo hice con chicos con los que ya había tenido sexo, Camerón fue alguien con quien conviví esas experiencia aún más.
-Mmm... Si. Hubieron algunos, pero un chico, ese chico fue con el cual tuve cosas repetidas veces, debes entender me sentía sola, quería que alguien me pudiera hacer sentir como me sentía contigo, pero fue inútil. -dije cabizbaja, algo avergonzada.
-Esta bien, te entiendo. No tienes idea de cuánto me hiciste falta, cada noche me enfurecía de tan solo pensar o imaginar de que alguien más te tenía para sí mismo, y no era yo. Siempre temí que dijeras que si a esta pregunta, pero yo no soy nadie para juzgar, te hice sufrir, princesa, te pido perdón por ser un estúpido, perdón por lastimarte, perdón por no valorarte, perdóname. -dijo con algo de sinceridad en su voz.
-Claro que si, papi, siempre estaré aquí. Te amo. -dije picoteando sus labios. Este sonrío ante el acto y se dedicó a conducir.
Estuvimos frente al colegio, y antes de abrir la puerta del auto, Harry me detuvo y me hizo volver a sentarme en el asiento.
-Recuerda, compórtate, estudia, y nada de chicos, ¿entendido? -dijo sonriendo y yo haciendo lo mismo, eso era lo mismo que me decía cuando me iba a la secundaria siendo más pequeña.
-Si, papi. Te amo. -dije dándole un delicioso beso en los labios. Este relamió sus labios cuando me separé y baje del auto, sentí su mirada recorrerme y eso me alegro demasiado.
Quién mejor que sea el.Espere a que el auto se alejara y corrí literalmente hacia el baño, es hora de que Emily haga su "espantosa" aparición.
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Daddy's Little Princess (j.b) (h.s)
Fanfic"Mi hija Maddie lo necesita a su lado, es su padre. Ella lo necesita... Yo lo necesito." Daddy kink. Contenido sexual.