Capítulo 17

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Inicio de semana traía consigo el inicio de clases, todo transcurría normal, hasta que Bakugou se dio cuenta del comportamiento de su compañero el cual lo ponía de muy mal humor.

— Oye idiota — dijo Bakugou teniendo la atención completa del pelinegro.

— ¿Sucede algo? — pregunto no era normal que el rubio hablara con los demás.

— Eso mismo me pregunto yo — dijo enojado — podrías dejar de estar suspirando como imbécil no me dejas dormir — dijo molesto.

— Lo siento, es sólo que el amor me tiene idiota — dijo sonriendo.

— Idiota sería poco, más bien diría que te tiene estúpido — dijo — además deberías decirle al rubio ese, que tu eres su admirador — dijo para volver a su puesto.

— ¿Eh?, ¿Qué?, ¿Quién te dijo eso? — pregunto sonrojado y sorprendido.

— Sólo un idiota no se daría cuenta, así que deja de estar perdiendo el tiempo o te quedarás sólo — se acomodo para dormir.

Sero se quedo pensando en lo dicho por el rubio, tenía razón y aunque ya sabía de antemano que el chico con complejo de pikachu le correspondía, no se animaba a confesarse, golpeo la mesa con su cabeza se sentía frustrado, además quería invitarlo a unas aguas termales.

Se acerco al puesto del rubio sentandose frente a el, golpeo su hombro lentamente captando su atención.

— Ayudame — dijo decidido.

— ¡Aah!, porque demonios lo haría — dijo el rubio enojado ya que tenía sueño.

— Es más ten — dijo dandole unos boletos — es para un parque de atraccciones, lleva a tu pareja — dijo juntando las palmas — por favor ayudame — rogaba Sero.

— De acuerdo — suspiro derrotado, que fácil penso Sero.

Sero le conto la forma en que se declararía, siendo golpeado más de una vez por Bakugou, el rubio sólo asentía y aveces lo ignoraba nada de eso le importaba en esos momentos, sólo quería ver a su pelirrojo.

— ¿Entonces que opinas? — Pregunto Sero, Bakugou no había escuchado nada.

— Esta bien sólo no seas tan idiota — si esa era una buena respuesta.

— ¡Gracias! — exclamo feliz el pelinegro.

Continuaron hablando más Sero que el rubio. En otra parte en la misma escuela mejor dijo en los primeros años, un pelirrojo veía comer a su amigo como si no hubiera un mañana.

— ¿Puedes decirme que te sucede? — Pregunto Kiri.

— Es que… — Tosió porque casi se ahoga — me gusta alguien — dijo un poco triste.

— ¡De verdad eso es genial! — dijo emocionado — ¿Pero porque la cara larga? — pregunto preocupado.

— Soy un idiota — dijo abrazando a Kiri, quien sólo lo consoló para que le contara que sucedía.

— Tranquilo todo estara bien así que cuentame — decía el pelirrojo emocionado.

— De acuerdo te contare — suspiro desanimado — el fin de semana salí a comer porque alguien me dejo un boleto de un local con bufete, muy rico por cierto — decía desviándose del tema.

— Si, si que más y no cambies de plática — regaño Eiji.

— Lo siento, bueno como decía conocí a un pelinegro que me entero que compartimos una clase y ni sabía que existía, y pues es el quien me gusta pero parece que esta enamorado de alguien — suspira derrotado — y yo le dije que me gustaba — tapo su cara con sus manos — soy un idiota — decía llorando.

Un Amor ÚnicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora