Capítulo 13

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Los minutos pasaban lentamente para Katsuki quien ya estaba arto de escuchar la máquina haciendo su "pi,pi,pi", juraba que si no lo daban de alta en esos momentos se aventaba por la ventana, suspiro viendo un pequeño osito cortesía de su novio, sonrió bobamente agradecía estar vivo.

Tan entretenido estaba en sus pensamientos cuando escucha que dicen su nombre, voltea por inercia y ve al doctor junto a sus padres los cuales asienten a cada indicación del médico, ve en la puerta a su pelirrojo quien le sonríe, el médico se acerca a Bakugou dando así su último chequeo clínico.

Saltaría de emoción al saber que ya podía irse de ese lugar con olor a desinfectante, pero no lo hace debe mantener aun intacto su orgullo. Termino de vestirse tomando la mano de Kiri quien se sonrojo por el detalle, caminaron platicando mientras sus padres los seguían, al salir ve a Kaminari quien los saluda con una manzana acaramelada en la mano.

— No se como le hace para comer tanto y no engordar — dice Katsuki frustrado ojala viera a ese chico sin que este comiendo.

— No tengo la menor idea — suspira Kirishima.

— ¿Cómo estas rubia? — dijo Kami mientras retrocedía lentamente viendo como Katsuki preparaba su puño para golpearlo.

El rubio escucho risas provenientes de sus padres y su pareja, se vengaría de ellos de eso estaba seguro, sonrió perversamente viendo al pelirrojo quien paro de reír abruptamente y cambio de color, sí con el empezaría.

— Creo que debo irme — dijo Kiri asustado.

— ¿No piensas venir a comer a casa, cariño? — dijo la señora Bakugou sonriendo maternalmente.

— N...no e...es e...es...eso... — dijo como pudo viendo la mirada rubi de su novio sobre él.

— ¡Oh Dios! no me digas que no te gusta mi comida — dijo llorando falsamente sabiendo las intenciones de su hijo.

— No, como cree señora si me gusta es sólo que... — no termino de decir al ser interrumpido por el rubio.

— Eso no se dice Eiji — dijo sonriendo — a una madre nunca se le rechaza una comida — lo abraza.

El Pelirrojo se tensó por el abrazo, relajándose sabiendo que el rubio no haría nada frente a sus padres, Kami quien veía todo sólo sonrió suspirando, pobre de Kirishima la que le esperaba con ese chico de sangre vengadora, se despidió llamando la atención de todos diciendo que se verían en la escuela.

Antes de que se fuera, el rubio se acerco le dio un abrazo y le agradeció, Kami se sorprendió nunca se espero eso del rubio, se sonrojo haciendo reír a los demás. Se despidió de nueva cuenta, cuando lo vieron alejarse, el señor Bakugou les dijo que debían irse.

Así fue como un Kirishima "obligado" por su novio y suegra fue llevado a cenar a su casa, el Sr. Bakugou sólo negó con la cabeza esos dos no tenían remedio. Al llegar el rubio se llevó al pelirrojo a su cuarto, quien entre protesta y protesta cedió poco a poco.

Al llegar a su habitación el rubio empujo a Eiji haciéndolo caer en su cama, quien nervioso, trataba inútilmente de escapar.

— ¿Qué piensas hacer? — dijo sonrojado por la mirada coqueta del rubio.

— Nada que tu no quieras — dijo acercándose — además quien fue él que me anduvo provocando ¿Ah? — dijo mientras se empezaba a quitar la ropa.

— Estas loco tus padres están aquí — dijo asustado y sonrojado — además aun no me recupero por completo y tú acabas de salir del hospital — dijo desesperado.

Un Amor ÚnicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora