Capítulo 18

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Día martes, todo comenzó normal, Kiri se levanto como si nada hubiera pasado, no encontro al rubio en su habitación y eso se le hizo extraño siempre estaba a su lado al levantarse, se dio un baño y vistió con el uniforme, bajo a desayunar encontrando a todos en la mesa menos a Katsuki.

— Buenos días, emmm, ¿Dónde esta Katsuki? — pregunto un poco sonrojado, buscándolo con la mirada.

— Tuvo un asunto que atender, dijo que te vería en la escuela — dijo la Sra. B.

— ¿Cómo te sientes cariño? — pregunto preocupada y emocionada la Sra. K.

— Estoy bien mamá tal vez sólo fue una indigestión por algo que comí — dijo de lo más normal, viendo que desayunaban — ¡Oh! Eso se ve rico, yo también quiero — dijo emocionado tomando asiento.

— ¿Qué quieres que te sirva cariño? — dijo la mamá de Kirishima.

— 2 panqueques no mejor 3, con mermelada de fresa, chocolate y quiero también un batido de fresa — dijo como un niño pequeño, esperando que lo atiendan.

— De acuerdo, aunque es mucho dulce — dijo la Sra. K.

— Mmmm, pero yo quiero eso, sino es eso no quiero nada más — dijo enfurruñado cruzando los brazos.

— Tranquilo, si los tendrás sólo fue un comentario — rió la Sra. K. — además aquí esta tu almuerzo no se te olvide llevarlo a la escuela — dijo sonriendo.

Kiri sólo asintió esperando sus tan ansiados panqueques, cuando le fueron servidos los devoró más rápido de lo que lo podría haber hecho Kaminari, cuando quedo satisfecho se puso de pie despidiéndose de todos, tomo sus cosas y salió rumbo a la academia.

Cuando iba a medio camino pensaba en las razones que el rubio tuvo para haberlo dejado sólo, más no llegaba a una respuesta, todo era tranquilo hasta que sintió su vista nublarse y hubiera caído al suelo sino fuera por unos jovenes que pasaron por allí, los cuales lo ayudaron y lo llevaron a sentarse, cuando se sintió mejor les agradeció y volvió a emprender su camino a la academia.

Cuando llego vio a Kaminari y Sero platicando, llego hasta ellos saludándolos, entro a su salón dejando sus cosas aun quedaban unos 15 minutos antes de que empezaran sus clases.

— Hola chicos, ¿Cómo están? — les sonrió.

— ¡Muy bien! — dijeron ambos, los cuales se sonrojaron por ese motivo.

— Me alegro — dijo Kiri riendo por la actitud de los chicos.

— Mejor cuentanos,  ¿Cómo estás tú… ? — pregunto Sero — por cierto, ¿Y Bakugou? — pregunto buscando con la mirada al rubio.

— Yo estoy bien, uno que otro percance pero bien, y no se donde este Katsuki — dijo triste.

— Hum, creo que tengo una idea de donde podría estar, así que chicos si me disculpan me retiro tengo 3 minutos para llegar a clase o me dejan fuera, nos vemos luego — dijo empezando a correr que rápido paso el tiempo.

— Pero… — dijo Kiri — yo quería saber donde podría estar Katsuki — hizo un puchero.

— Entremos al salón más tarde lo verás — dijo Kami tratando de animarlo.

Kirishima asintió un poco triste, ambos entraron al salón tomando asiento en sus lugares, las clases dieron inició.

En otro lugar unas horas antes de que empezaran sus clases, se encontraba un rubio viendo ciertos detalles, como flores, comida y uno que otro obsequio, todo debía ser perfecto para lo que tenía en mente.

Un Amor ÚnicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora