Un Amor Único

Capítulo 39

El día llego anunciando su llegada con los rayos del sol sobre el rostro durmiente de la pareja de recien casados.

Estaban tan comodos que no se movieron compartían el calor que sus cuerpos desprendían, todo tan bello y tranquilo, pero sabemos que nada dura así que cuando el sol entro más por la ventana dando de lleno en el rostro del rubio este gruño y se removió en su lugar.

Cuando se dio cuenta que no podría volver a dormir bostezo y se talló ambos ojos quitando así el poco sueño que aun quedaba en el, vio a su lado mientras una sonrisa se formaba en sus labios, ese chico pelirrojo que aguantó todos sus arranques estaba cómodamente dormido a su lado.

Su esposo que bien se oye eso, estaba embobado en sus pensamientos cuando siente que se empieza a mover, se agacha depositando un beso en su frente.

— Buenos días dormilón — saluda el rubio.

— Bueno día ¡waaah! — bosteza estirándose, estaba cansado — quiero seguir durmiendo — hizo un puchero.

— Vamos debemos levantarnos, tengo hambre — dijo el rubio mientras se levantaba dejando a la vista su bien formado cuerpo — no seas holgazán — paso sobre el chico aplastándolo un poco.

— Ten cuidado — se quejo riendo Eijirou.

— De acuerdo — tomo algo de ropa y entro a ducharse.

Eijirou miraba a su alrededor viendo el desastre que ocacionaron la noche anterior, se sonrojo al ver los juguetes a un lado, los trajes en otro y la cajita de condones sin abrir.

Estoy cansado penso mientras volvía a recostarse sintiendo algo pegachozo entre sus piernas, se sonrojo al saber que era aunque ya estaba seco.

Se puso de pues con cuidado ya que le dolía un poco camino buscando algo que ponerse al tenerlo decidió acompañar al rubio, no deben malgastar agua.

Cuando entro ve como Katsuki esta de espaldas a él y el agua baja por su cabeza pasando por su cuello, su espalda, llegando a ese trasero que le encanta, bajando por las piernas hasta perderse en la demás agua.

Siente un poco de celos de esa agua que toca a su esposo, sonrió nadie podía prohibirle a él tocarlo ya era suyo completamente suyo, se asusto un poco por sus pensamientos posesivos pero que más da.

Entro a la ducha abrazándolo asustando a Katsuki quien sólo respingo del susto.

— Idiota me asustaste — le golpeo la frente.

— Hay que ducharnos para comer — dijo entrando bajo el agua.

— Ja primero te quejas ahora me ordenas — sonrió — idiota — beso su cuello — quiero el postre por adelantado — empezó a tocarlo.

— Hmm... puedes esperar... — suspiro.

— Tengo hambre y quiero comer mi postre además debes alimentarme quiero leche calientita — termino de decir viendo el rostro completamente sonrojado del pelirrojo.

— Oye... — jadeo.

— No te quejes será rápido así que flojito y cooperando amor — susurro mordiendo el lóbulo de su oreja.

Eijirou suspiro dejándose llevar además no es que pusiera mucha resistencia, jugaron con el agua y el jabón, lavando el cuerpo contrario, acariciándose, besándose, entregándose completamente al placer que ambos sentían.

Después del baño salieron para posteriormente vestirse eh ir a comer, cuando bajaron Eijirou corrió y tomo su celular llamando a su madre.