27 de Octubre
Seattle
CamilaCargue a Megan todo el camino al primer restaurante abierto que encontramos. Al llegar Lauren nos ayudo a salir y tomó mi mano mientras entramos al lugar. Pidió mesa para tres y una silla para nuestra pequeña. No sé si seguía con la idea de soltarle la verdad.
Yo moría de nervios ahora, quería pensar que lo tomaría bien y que haría demasiadas preguntas como cualquier niño a su edad. Respiré pesado y la apreté contra mi pecho.
Lauren dejó mi mano y me tomó de la cintura para guiarme a una mesa. Desde ahí podíamos tener una vista de la calle. Era perfecta por que así podría pensar y distraerme.-Entonces mi compañero me ayudó a dibujar galletas sobre mi sobre, como las que hicimos a hace días. Apenas nos sentamos ella comenzó a contar todo lo que había hecho en la semana. Lauren rió frente a nosotras.
-Haré más para ti y me ayudarás. Asintió animada.
Nos llevaron la carta y Megan jugueteó con ella. Le pedimos nugget de pollo. Yo pedí algunas piezas de carne y ensalada. Tenía hambre pero no quería cenar algo pesado. Por si se me revolvía el estómago por la noticia que debíamos darle a Megan.
Lauren pidió dos cafés y su platillo. Luego me miró e hizo una señal hacía la niña.¿Como se lo iba a decir?
Megan se había distraído sobre la mesa con un par de palillos para comer. Reía divertida alguna figura necesitaba armar.-Megan. Habló Lauren.
Su carita no dejó de concentrarse en lo que hacía.
-Mi amor, Camila debe decirte algo.
Yo abrí los ojos de golpe, pero que gran ayuda iba a darme. Golpee levemente su pie bajo de la mesa. Los ojitos de Megan esperaban a que dijera algo. Por dios. Era una pequeña de solo tres años. ¿Que debía decirle?-Si. Dije después de un rato.
Lauren se reacomodo en su silla.-Cariño ¿Recuerdas lo que hablamos sobre los papás?
Preguntó y Megan respondió.-Sobre que tiene hijos, yo no entiendo como y ¿Camila me lo dira?
¿Que? Solte una risa nerviosa. Lauren tampoco pudo contenerse. Luego se recupero.-Sobre que son dos, mi amor, dos papás, una mamá y un papá, o dos mamás o dos papás. Dios ahora yo estaba más confundida. Megan ahora parecía interesada en el tema. Movió su cabecita en asentimiento.
-Yo...Seguía sin tener las palabras correctas.
-Bien, pues tu tienes dos mamás yo y...
-Mi abuela Clara. Lauren negó de inmediato y me miró. Megan tapó su boca con sus manitas como en sorpresa.
-¿Te casaste con Camila?
Bien fue suficiente y reí de forma nerviosa.-No mi amor, lo que quiero decir es que...
Bebí un poco de agua.-Yo soy tu otra mamá. Lauren me miró raro y Megan no respondió nada. Precisamente en ese momento no había comentarios ni preguntas.
-Vaya que forma tan sutil de decírselo. Lauren murmuró bajo. Megan no comprendía, quizá estaba enfadándose o no sabía. Quería tocar su mejilla ahora pero Lauren me detuvo. -Camila fue quien te tuvo en su barriguita.
-Pero yo no lo recuerdo. Dijo con el ceño fruncido.
-Ya lo sé mi amor, tu eras muy pequeñita. Miró distraída hacía la mesa. Yo mordí mis labios nerviosa y mis ojos se humedecieron. No quería llorar ahora. Megan no merecía que alguien como yo la hiciera analizar su vida, aún siendo tan pequeña. Lauren tomó mi mano sobre la mesa y me dió una mirada "déjamelo a mi".
-Y no esta en las fotos. Dijo en un tono que nunca había escuchado. Debía ser tan inteligente como para comprender que esos años yo no había estado en su vida. Aún cuando era su madre.
-Si, es que ella se tuvo que ir por un tiempo.
-¿Mucho? Sus pequeños ojos verdes me miraron levemente luego miró a Lauren.
-Si, por que ella estaba malita y no quería que tu te enfermarás.
-¿A donde te fuiste? Preguntó Megan hacía mi. Las lágrimas me habían ganado.
-A otra ciudad pero te extrañe muchísimo bebé, es solo que no pude quedarme.
No dijo nada en un buen rato.
Ahora Lauren estaba confundida también.
Tal vez pensaba que se pondría feliz al recibir la noticia.
Recordé como años atrás acordamos darle una familia a mi pequeña, no queríamos lastimar sus sentimientos y entre sus abuelos y nosotras decidimos no mencionar nada sobre su verdadero padre. Lo pensaríamos cuando ella tuviera la edad correcta para saberlo. Era tan duro ocultar algo así a Megan siendo tan pequeña, no queríamos lastimarla ni llenar su cabecita de dudas.-¿Tu eres mi mamá? Preguntó mirándome fijamente.
-Si, bebé.
Intentó salir de su silla pero no pudo. De inmediato Lauren la ayudó y Megan saltó hacia mis brazos. Su cabecita descanso sobre mi cuello. Yo no pude contener el llanto. Y la abracé como nunca. Este momento jamás nadie nos lo quitaría. Incluso Lauren limpió algunas lágrimas de su mejilla y me dió una dulce sonrisa.
Megan se separó para mirarme.-¿Ya no estás malita? Negué.
-¿Ya no tienes que irte?
Besé su frente.-Jamás mi bebé, nunca te voy a dejar. Tomé sus mejillas con cariño.
-¿Ni a mamá Lauren? Su pequeña duda me hizo soltar una risita.
-Tampoco a ella, a ninguna, voy a estar contigo siempre. Asintió y luego quiso ir con Lauren, no lo entendí mucho hasta que la abrazó y susurró algo en su oído. Haciéndola reír.
-Claro que lo sé bobita. Megan besó tiernamente su mejilla.
-Esta un poco preocupada sobre que me ponga celosa por que ahora te va a tener a ti también. Reí con ellas. Después de eso me había llenado de preguntas.
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Cuando te fuiste
FanfictionTe miré, estabas tan dañada, aterrada y con una voz débil me habías confesado lo que querías hacer, lo que jamás quisiste, lo que más temías. Yo solo te había insistido con amor, no tenía más. Saliste por aquella puerta cuando yo te lo suplique y...