Secretos.

capitulo 17

Pov. Pablo.

-No sabes cuanto tiempo llevo queriendo hacer esto- le digo mientras la envuelvo en mis brazos y entierro mi nariz en su cabello, aspirando su delicioso aroma.

-Y tú no sabes cuanto tiempo llevo deseando que lo hicieras- Me contesta Lil y no pudo evitar sonreír y ahora le doy un beso en su cabello.

-Lil tenemos que...- No puedo terminar la frase porque ella se separa de mi bruscamente y pone su mano sobre mis labios.

-No quiero hablar ahora Pablo, tengo miedo que te arrepientas, que me digas que no te gusto o que... que esto sea uno de mis sueños. Yo quiero guardar el recuerdo de mi primer beso, porque toda mi vida he soñado que sería justo así... - Un momento ella dijo ¿su primer beso?- bueno no exactamente así en ellos estábamos rodeados de flores, globos o velas, pero siempre eras tú- Me dice viéndome directo a los ojos. Me inclino nuevamente y me apodero de sus labios que se han convertido desde esta noche en mi obsesión. Y ella corresponde con entrega a nuestro beso, como en los anteriores, aunque de una forma muy tímida y tierna.

Me separo de ella lentamente y cuando abro mis ojos ella aun los mantiene cerrados se ve hermosa con las mejillas sonrojadas y los labios ligeramente enrojecidos e inflamados, me acerco a ella antes que abra sus ojos y le doy un beso en su linda naricita ella sonríe y lentamente abre sus ojos, nuevamente uno mi frente a la suya, ambos nos quedamos mirando directamente a los ojos.

-No es un sueño Lil, es la más bonita realidad- Continuamos así por un momento, pero necesito aclararle que yo jamás podría arrepentirme de este momento y sobretodo que que no me cabe el alma en el cuerpo al saber que ¡YO LE DÍ SU PRIMER BESO! Porque la amo. Así que poso ambas manos en sus mejilla y me dispongo a aclararle- Preciosa este momento, para mi ha sido el más especial, nunca me arrepentiría de algo tan hermoso Lil ¿me entiendes?- ella no dice nada solo asiente yo no puedo evitarlo y nuevamente pruebo sus labios, pero esta vez solo un roce- Pero Lil es importante que sepas que, esto... esto no es solo para un rato, Lil, puede que sea muy rapido para ti, es decir llevamos muchos años sin vernos y solamente unos días desde que regresaste. Pero quiero pedirte una oportunidad y si, se que tal vez soy muy mayor para ti o puede que te sientas incomoda ante esta situación, pero Lil te prometo que si me das la oportunidad yo...- Nuevamente posa su mano sobre mis labios.

-Pablo en todos estos años, en ningún momento he dejado de sentir por ti algo muy especial, al principio tenía muchísimo miedo de admitir mis sentimientos hacia ti aun conmigo misma, sobre todo porque como tú mismo dijiste eras mayor que yo, pero era porque creía que me veías como a una hermana o como a una niña fastidiosa que te seguía a todos lados, luego al aceptar que sentía algo por ti. Tú te fuiste a la universidad, pero en todo este tiempo yo no he dejado de pensar en ti ni un solo día- No puedo evitar sorprenderme con sus palabras, el saber que ella me corresponde y no solamente eso, el saber que lleva tanto tiempo sintiendo algo por mi, como yo por ella.

-¡Oh Lil! para mi tampoco fue fácil aceptar lo que siento por ti, al principio me sentía tan mal porque tu eras una niña, una muy hermosa, tierna y linda niña. Pero cuando nos reunimos nuevamente hace unas noches en tu casa solamente puede ver a una muy hermosa mujer. Y como ya te dije puede que sea muy rápido para ti, pero yo he esperado ya demasiado tiempo- Los ojos de Lil se han llenado de lagrimas- Te pido una oportunidad, para demostrarte que lo nuestro puede funcionar- Lagrimar ruedan por las mejillas de Lil, ella mueve su cabeza en forma afirmativa y sonríe- Nena te prometo que te voy a hacer muy feliz.

La beso nuevamente, pero esta vez lo hago de una manera lenta queriendo grabar este momento en mi memoria y que perdure para siempre. Cuando nos separamos le doy otro beso en la naricita que se encuentra rojita, luego sus mejilla y por ultimo su frente, para luego envolverla en mis brazos, agradecido con la vida, por haberla regresado a mi. Desde este momento luchare por hacerla muy feliz, por cuidarla, por protegerla, por amarla como ella se lo merece y no descansare hasta convertirla en mi esposa. Liliana Analí Villalobos.