11

12.6K 1.4K 81
                                    

3/3


SeokJin en silencio conducía hasta su casa, junto a un Jungkook que confundido observaba a su hermano mayor perder el control de sus propias emociones.

-¿Ya me dirás qué te pasó?- pregunto el menor volteando a verlo mientras el mayor conducía fingiendo indiferencia.

-¿Qué pasó con qué?- Jungkook rodó los ojos viendo como su hermano se negaría a hablar.

-No sabía que eras un bravucón en la universidad.

-No soy ningún bravucón, eso fue solo... Ese chico no me cae nada bien, ¿Okay? Lo odio, lo detesto, solo lo conozco hace dos días y no lo soporto.- terminó por decir cuando estaciono enfrente a su casa, suspiró apoyando su cabeza en el respaldo de la silla y lo miró de lado.- no me preguntes por qué, no quiero hablar sobre eso.

-Bien, bien... No preguntaré.- elevó las manos sonriendo divertido.- supondremos que no lo averiguaré luego, supondremos.

Jin negó rendido, no tenía tiempo para preocuparse por eso ahora, algo mucho más grande estaba ocurriendo y sentía que su cabeza pronto explotaría si no se encargaba de eso primero.

-¿En qué piensas ahora?

-¿En qué podría ser, ah?

-Ya, estás matandote por demás la cabeza, el abuelo prometió que solo seria una visita, quería vernos, nos extrañaba.- intentó calmarlo mientras acariciaba el hombro de su hermano, quien a simple vista parecía derrumbarse completamente.

-Lo sé, yo también lo extraño pero... No me perdonaría si algo malo le ocurriese.

-¿Qué podría pasarle?- frunció el ceño ante la insistencia de algo malo en su hermano.-  Jin, es hora de que me cuentes algo, vivo engañado como si fuera un niño pequeño y tú llevas toda la carga como si fueras un padre, hasta para el abuelo. Dime, ¿Qué te asusta tanto para protegernos como lo haces?

-No es nada malo Kookie, olvidalo y vamos a ver al viejo.- dijo el castaños intentando salir del auto, sin embargo la fría mano de el pequeño lo detuvo, obligandolo a sentarse de nuevo.

-No, me contarás todo ahora. Meresco saberlo, ¿No crees? Soy tu hermano, ya soy grande, es hora de que me digas.

Jin suspiró rendido mientras asentía lentamente, sabía que tenía que decirle la verdad, aún que no fuera tan mala, no podía evitar culparse por todo, el sabía que... Si tan solo hubiese llegado antes, si tan solo... Hubiese sido mejor.

-El culpable de todo soy yo.

-SeokJin, no...

-Déjame contarte, Jungkook, y ya verás por qué tengo la culpa...- murmuró recordando aquello que algún día prometió olvidar.

___FlashBack___

-Ya, ya, ya, ya, ¡Ya! ¡Gané! Mi amor, ¡si!- el dinero pronto desapareció de la mesita, para luego posicionarse en los brazos del señor, cuyas canas empezaban a hacerse notorias y arrugas, que a diferencia de otros, en el se veían pacíficas.

-Bien, mi amor...- una mujer alta y de rasgos delicado beso a aquel hombre, vitoreando su triunfo cuando un gruñido, de parte del oponente se hizo presente.

-Supongo que con eso que ganaste ahora, me pagarás lo que me debes, ¿no?- la sonrisa en ambos rostro se desvanecieron poco a poco hasta quedarse finas líneas que se miraban.

-Disculpa pero... Este dinero lo usaré para alimentar a mi familia, su pago aún puede esperar, ¿No? Le di un montón hace poco, deme tiempo.

-¿Por qué? Si veo dinero justo aquí, su deuda es muy grande, señor Kim. Debería ir reduciéndola.

Penetrame, ¡ahora! [NamJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora