Don't forget me |Español.

Capítulo 62: Ya no.

—Eres la única mujer que le pertenecerá mi último latido.

—¿Por qué no puedes ver que me perteneces? —Digo con un nudo en la garganta.

—Vamos hermano, necesitas ir a dormir, el alcohol te ha afectado—Me dice Henry tomando mi hombro.

Miré a Eleanor, sus ojos brillaban de tristeza, y las lágrimas estaban al borde, no dijo nada, solo me miró. Necesitaba escuchar su voz, sentir que me perdonaba y que todo iba a estar bien, pero ella solo calló... haciéndome sentir que no habría salvación para mi corazón.

Eleanor

Cada respiración que tomaba era difícil ahora, ¿Cómo puedo sobrellevar todo esto? Todo este amor, todo este dolor y todo nuestro futuro.

Todos me miraban, Jones estaba en el suelo sentado sujetado por dos hombres, lleno de sangre, Zayn intentaba zafarse del agarre de dos hombres y Henry, y las ganas de gritar me abordaban.

—Me iré—Tragué el nudo en mi garganta y todos guardaron silencio. Mire a mi chico de ojos marrones y negó leve, con lágrimas en las mejillas, y las venas del cuello alborotadas.

—No...—Susurró Zayn.

—Me iré, necesito irme, en cuanto Henry me diga que estoy bien...—Agaché la mirada, dudosa de si mirar o no al chico que me amaba. — Tomaré mis cosas y prometo que no volverán a saber de mí.

—No te puedes ir Eleanor, todo allá fuera es hambre, pobreza y escases de agua. —Me dice Jones.

—¡Cierra la maldita boca, Jones! ¡No le hables! —Lo apuntó.

Zayn comenzó a patalear y a tirar golpes hasta zafarse y correr a la cama y tomarme de los brazos. El olor a alcohol se hace presente.

—T-Tú no puedes irte...—Dice acariciando mis brazos—No dejaré que pases hambre, sed y no sé cuántas horribles cosas, mi amor—Me dice acercándose y besándome las mejillas con ternura— Tú no puedes irte, yo te amo, Eleanor, permíteme explicarte, permíteme amarte, te necesito. —Dice con un nudo en la garganta y con las lágrimas escapando de sus ya rojizos ojos. El intentaba que me quedara, pero si me quedaba era hacerle más daño, yo era la culpable que Jones y Zayn estuvieran a punto de matarse a golpes, era su única familia, y ya no quería ver sus ojitos marrones tristes, quizá si me iba, el pronto encontraría a alguien más y se olvidaría de mí.

Mi piel se eriza al sentir sus caricias, y las profundas ganas de llorar me abarcan.

—No lo hagas más difícil, por favor. —Mencioné tragando el nudo. Agaché mi cabeza, verlo de esa manera me rompía el corazón.

—No lo estoy haciendo más difícil, mi amor, sé que necesitamos tiempo, y sé que no es fácil—Su voz se trababa. — No lo es, y me duele, ¿Por qué no puedes perdonarme? Yo te amo, te amo Eleanor Dawson. Algo... dentro de mí—Toma mi mano y la coloca en su corazón— me hace tener la esperanza, me conecta a ti, lo presiento, no te vayas, mi vida está acabada en cuanto tu salgas por la puerta, porque el no saber de ti, si estarás bien o si te volveré a ver, me consumirá día tras día...noche tras noche.

Las lágrimas comienzan a brotar de mis ojos.

—N-No puedo olvidarlo—Susurré.

—Entonces no lo olvides, pero quédate, aquí conmigo, y volvamos a intentarlo. —Susurró— Sé que será difícil al principio, pero tú y yo siempre hemos salido adelante.

Zayn toma mis mejillas acariciándolas sin importarle los pequeños tubos que conectaban mi nariz a un tanque de oxígeno.

—Te amo, Eleanor, y siempre será así, sé que me he equivocado, y sé que no es fácil de perdonar, ni siquiera yo me lo perdono, no he podido, sin saber que era tu padre, él siempre ha estado en mi cabeza, y cada noche su imagen se viene a mi cabeza, quisiera cambiar las cosas, pero no puedo, sabes que aunque lo desee no puedo cambiar las cosas, nunca podré. Acabo de enterarme que era tu padre.

El silencio habita en nosotros por un momento, Zayn parecía adolorido, y vi su mirada estaba hacia las sábanas de la camilla. Como si le diera muchas vueltas a algo que lo tenía preocupado.

—Cuando fui de viaje con Henry hace unos días me enteré que era tu padre. —Me miró— Y... fue un golpe muy duro, estuve pensando cómo decirte, como explicarte, para no perderte y mira... te estoy perdiendo.

—Zayn, necesito irme, alejarme de ti, porque no quiero herirte, necesito sanar mi corazón, me iré por qué y-ya no... —Esta palabra era difícil para mí de pronunciar, pero necesitaba irme, para que Zayn pudiera reconstruirse así mismo, y yo necesitaba irme para poder sanar mi corazón. —No te amo.

Mis palabras parecen dolerle, y su quijada se tensa.

—Dile la verdad, Hermano—Dice Henry detrás de nosotros. —Necesita escucharla.

Zayn se gira y vuelve su mirada hacia a mí. Y niega.

—Si ella dice que quiere irse, no la voy a detener con una estúpida verdad—Dice herido.

—¿De qué verdad habla Henry? —Insistí.

—Ninguna—Negó con las lágrimas cayendo, las limpia y me mira.

El extiende sus brazos, en rendición. Y solo respira profundo.

Observé sus brazos con leves marcas en su piel recientes.

—Algo dentro de mí quiere creerte, quiere creer esas tres palabras, pero mi corazón me dice que me sigues amando, y te conozco más que a mí mismo que podría decir que solo lo haces para irte, así yo te ame con todo mi ser, no te detendré porque si no quieres estar a mi lado, no puedo forzarte a que lo hagas. No quiero que te quedes por lastima, por obligación, o simplemente porque no quiero que lo hagas Eleanor. Así que, si algún día quieres perdonarme y estar conmigo, estaré esperándote toda mi vida. Pero si no lo haces, sé que serás alguien en la vida y que encontrarás a alguien que no se equivoque tanto como yo lo he hecho. —Dice y se acerca a mis labios, y yo cierro los ojos esperando por sus labios, y siento que sus labios tocan mi mejilla.

Cuando mis ojos se abren, una sonrisa tímida se asoma y se levanta para irse con Henry.

Las palabras de Zayn me habían dado en el corazón.

Las personas comenzaron a irse, solo Jones se quedó y se acercó a mí.

—Vete. —Dije sin mirarlo.

—No lo entiendo, Eleanor, me dejas que te bese y ahora me alejas. —Ríe incrédulo.

—¡Vete! —Dije.

—Dame una maldita razón por la que no puedas seguir tu vida conmigo...

—¿Por qué demonios eres tan insistente?

—Porque dijiste que no lo amabas y porque sé que puedo ser mejor que él.