° Mal Alfa (HopeV) °

8

Después de ese día que el alfa lo haya insultado de la peor manera, no quiso verlo de nuevo, bastaba con su aroma y una prenda de él, afortunadamente también no se lo encontraba en la universidad.

Los días eran normales, estaba haciendo su mejor esfuerzo para sacar buenas notas y consumir correctamente sus alimentos en los descansos, después de embarazarse si le costaba un poco, porque se cansaba rápido, tenía mucho sueño, le daba rápidamente hambre y tenía que ir con más cuidado por la escaleras y la calle, afortunadamente los días que se encontraba a Jungkook este lo acompañaba y lo llevaba a su casa, no faltaba días que le preguntara cómo iban las cosas con el alfa pelinegro a lo que el castaño terminaba mintiendo un poco, bueno de todo, no quería que se sintiera mal por él.

También había los días malos, donde escuchaba las burlas de su fracasado matrimonio, por esa omega rubia llamada Hyuna, que decía que Hoseok nunca aceptaría a su hijo como suyo, no quería que le doliera las palabras de esa arpía que no sabía nada de él, pero si lo hacía. Solo la terminaba ignorando "A palabras necias, oídos sordos", ganas no le faltaba de golpearla e insultarle de igual manera, pero debía tranquilizar su enojo para el bien de su bebé y evitar poner en riesgo su estado físico.

Al llegar a casa, limpiaba un poco, aunque casi no estaba sucia porque el alfa no estaba la mayoría del tiempo, preparaba una pequeña cena y dejaba algo para el idiota alfa, después se bañaba para terminar los pendientes de la universidad y poco tiempo se dormía sin saber si el pelinegro regresaba o no.

°

Se despertó a mitad de la noche para ir al baño, debido a su vientre creciendo ocupaba un espacio en su vejiga haciéndola más pequeña, fue al baño sin problemas y se dirigió a la cocina para servirse un poco de agua, caminó en la sala y sintió aquel aroma en ese lugar, era Hoseok durmiendo en el sofá, se acercó hacia él, su aspecto decía que se había ido de fiesta y estaba alcoholizado de nuevo, la mitad de su cuerpo estaba en el sofá y la otra fuera, avanzó hacia su habitación dejándolo así, pero después pensó que se podría lastimar el cuello y la cabeza.

Regresó para por lo menos intentar despertarlo y para que quitara su cuello en la orilla del sofá, lo pateó un poco en el pie, pero aquel alfa parecía un tronco durmiendo.

-Hoseok...Ho...seok -lo movió más fuertemente, no respondía a nada- No puedes dormir así, tu espalda tonto...

Resignado en no poder despertarlo se empezó a ir a su cuarto, en el camino escuchó unos sollozos, fue a la fuente del sonido y miró el rostro de Hoseok con lágrimas salir, estaba llorando amargamente en sus sueños, no lo había visto así desde que su madre lo dejó, llorando sin consuelo, se alarmó.

-¡Hoseok! Despierta – lo movió del pie, pero tampoco hacia caso-

Sus lágrimas no paraban, se sentó en el suelo y se acercó, sus delgados dedos poco a poco dieron con su rostro para secarle las lágrimas – No llores Hoseok...estoy aquí -le susurró cerca de la cara, a lo que el pelinegro dejó de moverse tan agitadamente, las manos del omega pasaron a los cabellos del alfa que se empezaba a tranquilizar, entre masajes en los cabellos el alfa se calmó, este empezó a mover su nariz para buscar ese aroma que estaba siguiendo inconscientemente, su mano se levantó para buscarlo y tocarlo, pero Taehyung lo detuvo agarrándole la mano y entrelazando sus dedos, este se sintió conforme con ese pequeño tacto dejando de moverse, el omega sin saber que hacer se quedó y poco tiempo cayó dormido a lado del alfa.

°

A la mañana siguiente el alfa despertó con dolor en la cabeza por el alcohol tomado, observó que se quedó dormido en sofá, buscó sus manos y se dio cuenta que estaban entrelazados con unos delgados dedos, se sentó y miró al omega dormir a un lado del sofá, ese olor a jazmín estaba muy cerca de él y lo tranquilizaba, se levantó de golpe despertando al castaño, que frotó sus ojos y lo miró.

-No debiste dormir aquí -le dijo serio-

-¿Qué hora es?

El alfa no le contestó, se fue a su habitación y la cerró. Al estar dentro miró su mano que aún conservaba la temperatura cálida del omega, y el aroma a jazmín que estaba en su cuerpo al dormir juntos, se sentía raro, pero no podía caer por un omega. Se dio un baño para quitarse ese olor.

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Hola :).

Día que actualiquirri jajaja

Rabitta