° Mal Alfa (HopeV) °

Final Take two°

El alfa dejó los labios de su omega escuchando un claro chasquido, se puso de rodillas para mirar a su esposo, su bello omega y solo de él, se acercó para besar su frente, cada ojo y su mandíbula. Se incorporó ahora usando sus dedos, tocando con sus yemas el cuello, el pecho cubierto bajando hasta el muñón que mantenía cerrado la bata, Taehyung lo miraba detenidamente como si quisiera que abriera su bata, así que deshizo ese muñón y abrió aquella tela, dejando admirar esa piel caliente, su omega lo miró y gimió a su mirada. Llevó su boca a ese cuerpo, empezó un lento camino de besos, probando y chupando todos los rincones de la piel, pasó por el cuello, al pecho y a los pezones que delineó con su lengua y succionó, suficiente en esas dos glándulas, bajó en su bonito abdomen donde su omega llevó a su lindo cachorro, lo acarició y depositó un suave beso, siguió bajando hasta llegar a ese miembro despierto, no esperó mucho y lo metió en su boca para saborearlo. El omega gemía por cada sensación, era muy sensible y receptivo, apretó las sabanas mientras el alfa se comía su miembro, tan intenso que hizo que se corriera en la boca del pelinegro.

El alfa se bebió cada esencia de su castaño, todo le pertenecía. Llevó sus manos a su bata, específicamente en el muñón para abrirla rápidamente y dejarla en el suelo, observó de nuevo a Taehyung, él tenía la respiración descontrolada por el reciente orgasmo, su pecho subía y bajaba y sus ojos parecían perdidos, no había terminado, quería darle más placer. Sus labios bajaron a la estrecha entrada para lamerlo, solo unas cuantas veces para probar su delicioso sabor que desprendía su esencia, cuando su lengua rozaba su castaño se retorcía de placer. Empezó a penetrarlo con un dedo lentamente, Taehyung era alguien estrecho, tardó en sentir que podía meter otro dedo, mismo que probaba al omega, aun no lo sentía listo.

El omega estiró su mano y con dificultad tocó la mejilla del alfa, aquel levantó la mirada para ver lo que ocasionó al estar abajo, sudor en su frente y mejillas coloradas -Hoseok te necesito a ti. Te quiero a ti...Por favor...

-Te dolerá  Tae -cuando su omega no estaba en celo, la preparación tardaba en hacerse, él lo hacía pacientemente para que ambos disfrutaran, no quería lastimarlo.

El castaño negó -Tú no me lastimarás Hoseok...por favor hazlo...

No podía negarse a su omega, agarró y acomodó las piernas para ponerlas a un lado de su cuerpo para que pudiera entrar en ellas, alineó su miembro y acercó la punta en la húmeda entrada, Taehyung lo sintió y acercó sus caderas un poco más. Hoseok empezó a impulsarse suavemente hasta llenarlo completamente mientras que su omega apretaba las sabanas y gemía ahogadamente, no se cansaría de verlo unido a él, no quería que ese momento acabara. Se acercó para besarlo, sabía que le había dolido al sentirlo, no quería moverse hasta que su omega quisiera, lamió sus labios y los chupó, sus lenguas se enredaban llenando la habitación de esos sonidos hasta que sintió como su castaño se movía debajo de él, fue la clara invitación para tomarlo, empezó un suave ritmo que solo ellos disfrutaban, aquel beso que no habían dejado de lado parecía encenderlos más porque la lubricación aumento.

Ahora el omega quería ser embestido y el alfa quería probar todo de su omega, el alfa rompió el beso para sentarse, entrelazó los dedos con los del omega para ayudarlo a que se sentara a horcadas en él.

Taehyung sabía que esa posición era la más intensa para ellos, donde podían sentir sus pieles cerca y sus rostros juntos admirando el placer dibujar sus caras, puso sus piernas a lado del cuerpo del alfa mientras que el pelinegro tomaba sus caderas para empujarse dentro de él, ambos gimieron al llegar al final, retomaron el beso y empezaron un ritmo mucho más rápido, las paredes estaban tan lubricadas y su interior se sentía caliente, el miembro del pelinegro empezó a tocar su próstata con ese ritmo salvaje, completamente sumergido en el placer que le daba su alfa. Ocultó su rostro en el pecho del alfa sintiendo esas contracciones en todo su cuerpo, mareado por todo el placer, mordió el pecho de su alfa para sostenerse y aguantar hasta el final.