Titulo: Katharsis
Advertencia: Si. Contenido explicito. Ambientado en el siglo XIX o algo así.
Nota: 5/6
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La luz del sol entraba por la ventana de la gran casa, había estado pensando por horas en los ataques a vampiros descontrolados. No podíamos retener a los asesinos más y cada vez éramos menos. Necesitamos detener lo que estaba pasando o dejaremos de existir.
-(TN)... Hey, te he estado llamando hace unos segundos. ¿Puedes concentrarte?-Ben hablaba, sabía que debía estar prestando atención a cada cosa que decía pues siempre sus planes salían bien, antes lo hacían pero realmente había un solo pensamientos que iba y venía todo el día a mi cabeza, los tiempos habían cambiado y ya no podíamos estar peleados unos vampiros con otros.
-Ben, piensa en lo que mencioné ayer. Necesitamos ayuda de...-No pude pronunciar la palabra, desencadenaría los impulsos de Ben en querer detener cualquier pensamiento que pudiera tener sobre ello pero sé que lo amerita más que nada para evitar desaparecer por completo.
Su puño golpeó la mesa haciéndome pestañear.
-No me detendré de insistir, si atacamos separados no haremos mucho daño, somos pocos y puedo asegurar que no vamos a triunfar solos.
-No sabes lo que pasará-dijo casi gruñendo, su vox era áspera y dura cuando estaba el tema de los otros de por medio.
-Si quieres puedo hablar yo, no tienes que verlos. Arreglaré todo.-caminé con prisa hasta la puerta de la habitación destrozada pero su grito me detuvo. Lo había enfadado lo suficiente como para gritar sin temer que alguien lo escuchara.
-No vas a hacer nada. Ya he dicho que todo se hará conforme a nuestro, repito... Nuestro plan.
Asentí sabiendo que la pelea la había perdido y que no iba a aceptar que siguiera insistiendo.
-Ahora ¿podrías dejarme explicarte el plan para que puedas hacerte cargo de todo?
Volví a asentir y caminé para situarme frente a la mesa iluminada por la desgastada lámpara de aceite que estaba sobre la mesa. Sus palabras me hacían darme cuenta de lo elaborado del plan, tenía que realizarse todo a la perfección y yo como general del pequeño ejército que teníamos de vampiros debía hacerme cargo de que entendieran el plan.Miré el cielo sabiendo la tormenta que habría enunas horas, las ordenes de Ben habían sido claras: Atacar al anochecer". Esperábamoscerca de la base a donde atacaríamos, nos ocultábamos entre los árboles yevitábamos el camino directo. El sigilo iba a ser nuestra alidada.
-(TN), el sol se ha ocultado por completo. Tal vez es buen momento paracomenzar a movernos-dijo un chico llamando mi atención. Asentí segura de avanzary antes de dictar mis órdenes todos entramos en alerta al escuchar una alarmadentro de la fortaleza y gente gritando.
No, no, no... No podía estar pasando nada de eso. Corrí junto con un par depersonas más buscando la mejor vista para ver dentro de la fortaleza.
-Vampiros-dijo uno haciéndome enfurecer. Debimos verlo venir, también querríanatacar esta fortaleza. Con la furia adueñándose de mis pensamientos me dirigí ami pequeño ejército.
-Es ahora o nunca. Ataquen, yo me haré cargo de encontrar el mapa que buscamos.
Todos estando de acuerdo corrieron en dirección de las murallas conmigo detrás.Intentaba evitar cualquier contacto con los hombres dueños de esta base paraencargarme de mi plan principal pero era imposible, habían alarmado a los demástocando la campana servía como alarma y casi era imposible atravesar a loshombres.
Pude observar a varios hombres que no eran míos mientras recorría los pasillosbuscando la habitación general, ahí debía estar el mapa que buscaba.
Abrí tres habitaciones y había inmovilizado a varios hombres antes de dar conla habitación correcta pero para mi suerte ya había alguien dentro buscandoentre todos los cajones y libreros que había. Su mirada fue hacia la puertacuando escuchó que la abría.
-¿Sorprendida?-me habló con una sonrisa maliciosa haciéndome volver a hervir enrabia. Caminé con rapidez hasta él mientras dejaba que mis palabras esperabanlo sorprendida que estaba.
-Claro que lo estoy, idiota.-lo aparte con una mano de la mesa donde estabanesparcidos algunas hojas y pergaminos.- Arruinaron nuestro plan, hicieron uncompleto desastre-lo miré directamente a los ojos, su rostro estaba muy cercadel mío pero realmente no me importaba en ese momento, estaba furiosa.
-Ese era el plan-dijo dándome una de sus miradas irónicas que odiaba. Bufé yvolteé a la mesa en busca del mapa que los dos necesitábamos. Mis manosrecorrieron los pergaminos pero estaba más que claro que ninguno de esos era.Quise seguir buscando pero una mano conectó con mi brazo y me hizo voltear deforma brusca. Sus labios se unieron con los míos de forma desesperada, estaba conscientede que no era un momento para esto pero realmente lo necesitaba. Puse mis manosrodeando su cuello antes de apartarlo un poco.
-Chris, tengo cosas que hacer-dije sabiendo el poco tiempo que teníamos.
Él volvió a capturar mis labios con los suyos ignorando por completo lo quehabía dicho.
Sus manos me tomaban con fuerza por la cintura y me levantaron con facilidad dejándomesobre la mesa. Realmente sabía lo malo de la situación pero hacía meses que noveía a Chris por la disputa de vampiros contra vampiros.
Lo tomé con fuerza del torso y lo acerqué a mí, levante casi con desesperaciónsu camisa y me adueñé de los botones de su pantalón.
Sentí su pequeña sonrisa juguetona sobre mi cuello y en otra situación lo haríaarrepentirse pero de verdad lo necesitaba.
Tomé su miembro en mi mano y solo seguí besándolo lo cual tal vez provococierta confusión en él.
-¿Me harás suplicar por ti?-soltó uno de sus comentarios nada esperados.
-No, esperaba a que te deshicieras de mis pantalones pero parece que tengo quehacer todo yo-intenté no reírme al ver su rostro y para evitarlo me bajé de lamesa y bajé mis pantalones.
Chris volvió a posicionarme sobre la mesa y se hizo un espacio entre mispiernas.
-¿Siempre tan directa, cariño?-preguntó. Odiaba sus charlas durante el sexo, noera algo que me matara pero sin duda era singular en él.
-Me conoces de hace siglos, literalmente. Ahora cállate-volví a tomarlo por elcuello y lo besé de la misma forma de antes: desesperada.
Podía sentir su miembro en mi entrada pero no hacía nada para entrar en mi locual me estaba volviendo loca. Realmente quería que yo suplicara por él. Tomésu miembro entre mis manos alineándolo a mí y moví mis caderas por mi cuenta.Mi primer gemido hizo que Chris tomara de nuevo todo el control y con ayuda desus manos me acercó más a él para comenzar a mover sus caderas.
La mesa nos seguía con cada movimiento lo cual hacía un completo desastre,había papeles con escritos por toda la habitación y era lo último que nosimportaba. Sabía que en cualquier momento alguien iba a ir a buscarme parasaber si ya tenía el mapa y eso provocaba más placer y adrenalina a lasituación.
Solo faltaron unos cuantos gemidos de mi parte para que Chris diera las ultimasembestidas haciéndome llegar al orgasmo, sus manos me tomaron con más fuerza ysus embestidas fueron más rudas intentando llegar él.
Me recargue sobre mis manos poniendo mi espalda en diagonal. No estaba cansando,no podía cansarme y mucho menos de esto pero era hora de parar.
-¿Dónde está el mapa?
Chris me sonrió divertido mientras se ponía sus pantalones. Abrió un cajón dela misma mesa donde estaba sentada y lo extendió en el aire. Intenté tomarlopero lo quito de mis manos antes.
-Chris.
-¿Qué? También lo necesito.
Me levanté y subí mis pantalones. Su mirada seguía cada movimiento que hacía yla mía solo estaba en el mapa. Hizo una mueca y me lo tendió.
-Gracias-le dije sonriendo para después guardar el mapa. Él se alejó de mí y yolo seguí.
-¿Nos vemos está noche?-le pregunté aun sabiendo la respuesta.
-Sabes que no podemos vernos-se situó frente a mí. Lamentaba la situación puessabía que serían otros meses sin verlo hasta que se hicieran las paces o losataques a vampiros se erradicaran. Su manó conectó con mi mejilla y la acariciócon suavidad.-todo se pondrá peor, Ben querrá atacarnos en algún momento ysabes que tendrás que hacerlo.
-No quiero.
Mi corazón inservible ya en este punto no bombeaba pero verdaderamente podíasentir lástima por nosotros.
Me regaló una sonrisa de lado y beso mi frente.
-Te amo-susurró.
-No es cierto-le dije divertida queriendo evitar que esto sonara como unadespedida, el solo me sonrió y me dejó ir por la puerta.
No sabía hasta que punto iba a arrepentirme por no haberle dicho que sentía lomismo.
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One Shots (MIW)
FanfictionPedidos: abiertos Escribo one shot, headcanon, preferences, NSFW alphabet, etc.