One Shots (MIW)

Joshua Balz

Titulo: Quédate
AT: No

De nuevo se iba, tenía que salir a trabajar como las otras veces. Solo lo observaba caminar por toda la habitación buscando la mochila que había empacado ayer. Yo sabía donde estaba y solo lo miraba buscarla con la mirada mientras yo aun seguía en la cama. 
-_____, ¿sabes dónde puede estar?-preguntó Balz mientras se detuvo a mirarme. Negué y el siguió buscando- no entiendo, la había puesto aquí, junto a la maleta. 

Seguí callada mientras el comenzaba a desesperarse. Hasta que se detuvo de nuevo. 
-¿Dónde esta?-dijo serio.

-No lo sé-levanté los hombros y el ladeó la cabeza. 

-Lo sabes-dijo mientras se acercaba a mi. Volví a negar y el se sentó en la cama dándome la espalda.- y también sabes que me tengo que ir-dijo mirando al frente. 
-De nuevo-le respondí mirando mis manos. 

-De nuevo-me imitó. 
-Es...-casi estaba a punto de detenerme pero continué-Es la tercera vez que te vas y aun no acaba el año.

El dio un suspiro y me miró. 
-Sabes que así es... Siempre será así-me tomó de la mano y la acarició. 
No lo miré y junté mis rodillas al pecho. 

-Esta a un lado de la mesita-él miró la mesa pequeña y después me miró a mi. 
-¿La cambiaste de lugar?-preguntó aun sabiendo la respuesta. Asentí- Pude haber perdido mi vuelo.
-Lo sé-dije mirándolo. Él hizo una mueca y se sentó a un lado de mi. 
-Hemos estado juntos tres años, sabes como son las cosas. 

-Se que te marchas y me dejas por muchos meses-dije bruscamente. Después me arrepentí y seguí hablando- recuerdo cuando las cosas comenzaron a cambiar más. Tu te ibas más seguido y te veía menos. 

-Si, crecimos... 

-Sé que lo hicieron, todos... Hicieron un buen trabajo, ahora la gente los sigue, les agrada lo que hacen. Me alegra pero... No me gusta que te marches. 

El asintió y beso mi cabeza. Me abrazo por unos instantes y después de levantó.
-Te llamaré como siempre lo hago-dijo tomando su mochila. Lo miré sin esperanzas a que se quedara un poco más y asentí. 

-Extrañame-le pedí mientras veía como tomaba sus demás cosas. 

-Siempre lo hago-me sonrió y caminó hacía las escaleras de la casa. Escuchaba sus pasos y después la puerta abrirse y cerrarse. 

Balz tomó el taxi que lo había estado esperando y se dirigió al aeropuerto esperando que el tiempo pasara más rápido que las otras veces aunque sabía que no iba a ser así. 

-¿Todo listo?-le preguntaron sus amigos cuando el ya estaba frente a ellos. Asintió. 

Caminaba junto a los demás para tomar el vuelo pensando en lo difícil que había sido para él despedirse esta vez. Ni siquiera le había dicho que volvería. Solo quería dejar de ver sus tristes ojos porque sabía que si no se iba rápido se quedaría junto a ella. Ella jamás sabría lo difícil que era para él marcharse y dejarla. Era incluso más difícil para él irse que para ella quedarse. Siempre la extrañaba como nunca.