Ricky Horror

185 11 2
                                    

Titulo: Debí haberte notado antes II
Advertencia: No. 
Nota: Dejen sus pedidos en los comentarios.
-----


-(...) tomé el avión y dio la casualidad que tenía trabajo en la ciudad entonces pensé que sería divertido y bueno para los dos vernos de nuevo... ¿Me estas escuchando, Ricky?
Él lucia agitado, era normal pues acababa de terminar el show pero parecía que no me escuchaba.
-¿Qué?-agitó levemente su cabeza-lo siento, me siento aturdido por todo. Es que... Wow, estas aquí y... No pensé que volviéramos a vernos.
Sonreí sabiendo lo que debe estar sintiendo, mis nervios me hacían casi vomitar cuando pensé en verlo de nuevo e incluso aun siento que mis manos tiemblan, ahora mismo soy un poco torpe.
-Bueno-se adelantó ahora luciendo con más confianza- ¿Quieres tomar algo?
Asentí y caminé detrás de él hasta la salida.

-¿Cómo es que estas en una banda?-pregunté después de tomar de mi té. La tienda olía a café lo cual me hacía pensar en café negro, justo el que solía tomar por las mañanas cuando estaba en la escuela. No me gustaba recordarla así que dejé de tomar café como todo lo que tuviera que ver con mi horrenda vida pasada.
-Pasó muy rápido de hecho justo unas semanas de tu partida. Comenzaba a tocar más los instrumentos, lo hago cuando no tengo nada que hacer y al final se decidió. Los años pasaron y terminamos donde estamos en este momento.
-Me alegra saber que funcionó cada una de tus ideas.
-También a mi-sonrió y dedicó un largo rato a mirarme.-demonios, luces exactamente como te recordaba.
-Me alegra saber que mi físico siga siendo el mismo. Mi madre dice que me veo más vieja pero debe ser por el estrés del trabajo.
-¡Cierto!-exclamó casi sobresaltándome- ¿Qué estás haciendo en la ciudad?
Sabía que terminaría preguntando por eso.
-Ya lo mencioné, trabajo pero busco algo más, Ricky.
Me miró extrañado. La confusión de su rostro me hacía sentir insegura, tal vez era mejor no haber venido.
-Quiero que me pidas que me quede.
Su mirada mostro más confusión de la que esperaba, mis ánimos caían y estar sentada frente a él con el olor a café no ayudaban.
-No entiendo.
-Ricky, te he extrañado demasiado y... Mi trabajo me está matando, las personas son malas y... Antes, en la escuela yo era la mandona. Me di cuenta muy tarde que nadie quiere a alguien así como amigo.
-¿Por qué dices eso?-se acomodó en su asiento.
-Porque no he podido arreglar nada de lo que odiaba en la escuela.
Ricky me siguió viendo de la misma manera, fue un terrible inicio y nada de lo que fuera a decir ahora haría cambiar su idea de lo extraña que era.
-Perdón-dije por fin- no debí venir-me levanté al instante notando que Ricky no se movía- olvida lo que dije. Nos vemos luego.
Sabía que en realidad no volvería a ver a Ricky si me marchaba así pero no iba a arruinar todo lo que había construido.

Mi estancia en la ciudad iba a terminar y seguía pensando en lo estúpida que me había comportado, las cosas no salieron como pensaba y estaba devastada. Odiaba todo lo que había construido sola por eso mismo, quería a alguien junto a mí pero lo arruiné enormemente.
Comencé a empacar mi ropa de nuevo en mi maleta sintiéndome apenada por todo lo que había dicho.
Mi taxi estaba listo, todo estaba listo solo debía subir a el. Él hombre era educado y llevaba una conversación consigo mismo sobre el mal trafico de la ciudad, yo solo me limitaba a decir que estaba de acuerdo con todo lo que decía.
-Que tenga un buen viaje, señorita-dijo depositando mi maleta a un lado de mi. Le sonreí y agradecí antes de tomar la maleta con pesadez. Mi teléfono comenzó a sonar haciéndome sobresaltar.
-Que no sea mi madre, que no sea mi madre-rogué y mi corazón palpitó fuertemente al notar que era el viejo numero de Ricky en la pantalla de mi celular. Pensé en no contestar la llamada, ya había tenido las emociones suficientes como para no volver a intentarlo pero pensé que tal vez algo iba a cambiar.
-¿Si?-mi voz titubeó un poco pero pude arreglarlo rápidamente carraspeando por lo bajo.
-Lo siento, debí haber dicho algo. Dejé que te marcharas sin más y so no fue correcto.
-Entiendo, Ricky. Fue una acción impulsiva de mi parte.
-¿Dónde estás? Hablemos de eso.
-Estoy por irme, mi estancia terminó y mañana debo ir a trabajar. Debo irme ya.
-No, es la cosa más tonta que has hecho después de haberte marchado hace años, espera ahí. Iré y hablaremos de esto.
Por supuesto que quería hablar de eso pero no tenía tiempo, mi trabajo se estaba jugando y no tenía más que mi computadora y mi libreta de apuntes. No iba a dejar que esto también se me fuera de las manos. Abrí la boca para negarme pero Ricky colgó después de haber hablado.
Esperé algunos minutos, comenzaba a cansarme e incluso llegué a pensar que no vendría pero al fin de la tarde Ricky estaba parado frente a mí luciendo arrepentido.
-No supe cómo reaccionar-comenzó a hablar por lo más importante- apareciste de la nada en un show y después me dices que me quieres en tu vida... Yo no entendí, pensé que hace años te habías marchado porque querías alejarte de todos. Me dolió ¿sabes? Pensé que podíamos conocernos después de lo sucedido.
-Lo entiendo.
-Pero... Nada de lo que digo cambiara mis sentimientos por ti. Siempre me pareciste más que una chica mandona y solitaria, a veces pensaba que eras divertida mencionando todos los artículos de la escuela después de mencionar que ibas a mandarnos a detención. Eres una chica linda-sonrió apenado.
-Ricky, por favor déjame ir ya. Fue tonto de mi parte haber pensado que tú podrías cambiarlo todo.
-Lo puedo intentar, (Tn).
Sonrió de lado esperando a mi respuesta. No sabía por qué lo pensaba tanto si en un principio era lo que quería, se sentía como si lo estuviera obligando por dar lastima o algo así.
-No... No puedo permitirlo...
Ricky me miró desilusionado.
-Ni siquiera me conocer de verdad, Ricky...
-Podemos encargarnos de eso-me tomó de la mano y me hizo sentir como si estuviera obligándolo a hacerlo, a comportarse de esa forma.- No quiero que te vayas de nuevo. Por favor.
Di un suspiro largo y antes de aceptar le regalé una sonrisa.
-No quiero irme.
Mi menté se quedó dando círculos alrededor de un mismo pensamiento, muchas cosas en mi vida no habían funcionado como lo esperaba, había experimentado el fracaso cientos de veces pero mi madre me obligaba a olvidar que algo así paso. Quería a Ricky de alguna manera diferente y tenía miedo de perderlo por mi culpa.

One Shots (MIW)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora